Elliot se negaba a seguir hablando de Avery, así que permaneció en silencio.

Ruby no lo presionó para que respondiera. En su lugar, sonrió y dijo: "Elliot, ¿sabes lo preocupada que estaba cuando me enteré de que a mi papá le pasaba algo? Gracias a Dios que estabas a mi lado. Sentí que todo se solucionaría contigo a mi lado".

"A tu padre no le pasará nada", dijo Elliot.

"Lo sé, ya no me preocupa. Solo me siento afortunada de poder casarme contigo, afortunada de poder ser tu esposa".

Después de rescatar a Avery del mar, el salvavidas empezó inmediatamente a hacerle la reanimación cardiopulmonar.

Avery por fin se despertó después de escupir el agua.

El salvavidas le preguntó a Avery: "Señorita, ¿quiere ir al hospital?".

"Estoy bie...", dijo Avery mientras negaba con la cabeza.

Pero antes de que pudiera terminar la frase, Avery se dio cuenta de que no podía morir. Todavía tenía hijos en casa esperándola, todavía tenía amigos y familia que la querían. Había más cosas en la vida que