Nikolai miró hacia donde estaba la mujer y volvió su vista a sus padres, sencillamente no iría a saludarla, si ella quería su saludo tendría que venir ella a su asiendo así era y así será.
—Y bien Nikolai, que le vas a regalar a tus padres —Comento Marbella pasándole una tetera el pequeño.
—Ya verás —El Joven le guiño un ojo sonriente.
Al final de la noche cada persona le llevaba el regalo que le entregaría a la pareja colocándolo a su lado en una mesa que iba desde el inicio de la escalera de la derecha hasta terminado en la escalera izquierda, una mesa bastante larga, pero los regalos acumulados eran más. Nikolai mando a buscar el regalo con su criado privado, el cual se llamaba Robin, lo había contratado hace un año y le había servido en muchas ocasiones antes de ser contratado por esa razón lo tomó mucho cariño y lo invito a vivir en el palacio, Nikolai le llevaba dos años a Robin y estos dos al conocerse muy jóvenes se llevaban muy bien.
—¿No la vas a saludar Nikolai? No te ha dejado de mirar —Comentó Patrick mirando a su hermano.
—No lo haré, si ella quiere que venga ella a saludarme no me voy a rebajar porque ella me haya pasado de nivel.
—Aah! —Patrick se pasó la mano por la cabeza viendo lo testarudo que era su hermano, Patrick no quería decirle que aquella mujer estaba interesada en él, debía saberlo por su mismo, pero viendo la situación el rebelde y orgulloso Nikolai no se enteraría —. Van a decir que estás celoso y que eres un orgulloso presumido.
—Si soy muy orgulloso, digo presumido no ¿Celoso? Tampoco. A esa mujer le pasaré sea como sea, pero no voy a permitir que al saludarla tus hermanos comiencen a querer relajarme delante de ella, tampoco quiero que ella se sienta suprema conmigo como se ha sentido con todos ustedes por lamerle los pies.
—No digas eso Nikolai, apenas me he acercado a ella. Y tus hermanos solo quieren fastidiarte. Mañana hay una reunión empresarial debes llevar algunas ideas para que tus fábricas no queden por el suelo delante de las de ellas.
—¿Cuántas tiene?
—Veintidós.
—Joder, solo tengo diecisiete.
—Pero, solo tenía diez, las otras diez la fue comprando poco a poco, primero compró los establecimientos y el año pasado le dio empleo a más de cincuenta mil personas.
—Muchas gracias Robin —Dijo cuando el joven le entregó el regalo.
—Santos cielos Nikolai, esa lámpara perteneció a la habitación del antiguo faraón —Su hermano toco los brillantes diamantes.
—La gané en una subasta —Nikolai paso con aquella maravilla delante de sus padres, y como había dicho su hermana su padre colocó una cara de preocupación y su madre se agarró el pecho por tanta belleza, el peso de aquella lámpara se pesaba por sus diamantes blancos y perlas preciosas—. No se preocupe padre estaré bien, mis bolsillos aún no están rotos —Algunas personas estaban maravilladas, no cualquier persona podía tener aquellas lámparas y Nikolai estaba regalando una, sorpresa se llevó el público cuando la rubia rusa sacó el otro par poniéndolo junto con el de Nikolai.
—Vaya que nos gusta resaltar, verdad? — la rubia posó aquellos enormes y bellísimos ojos verdes en él asiendo que su cuerpo vibrará, Nikolai no pudo evitar sonreír, esta mujer no solo era una gran trabajadora, era hermosa, auténtica y llena de una personalidad extrovertida.
—Gracias a ambos por el regalo —Los felicitó el Rey, su madre le dio un beso en la mejilla y agradeció a la rubia, oficialmente se volvían los reyes más ricos de todos, ser rey de una nación no te volvía rico, de hecho Nikolai era más rico que sus padres, pero aquellos objetos valían una fortuna, y mientras iba a manos de gente más elegante más valía, que fuera un regalo para una pareja real lo hacía aún más valioso.
Nikolai pasó a su asiendo después de saludar algunas personas, bebió un sorbo de un vino y se sentó en la silla, miró a donde estaba la rubia y esta le sonrió devuelta. Nikolai levantó la copa para brindar con ella y esta aceptó, camino a donde él estaba; Victoria, Nikolai había logrado que aquella mujer diera el paso que él en sus pensamientos jamás pensaría dar, Nikolai no solo era orgullo, una de las cosas que lo resaltaban era su anhelo de tener el control, su palabra y su fiereza en el trabajo, a estas alturas Nikolai no encontraba algo de coquetería en aquella mujer aunque algunas personas a su alrededor ya estaban viendo algo así.
—El periódico va a estallar cuando salga la primera foto de estas dos personas juntas —Comento Alisa llegando al lado de sus hermanos mayores.
—Eso de hacerse el fuerte y no venir como nosotros lo hicimos le funciono a la perfección —Alexander uno de los mayores bebió un sorbo del vino después de decir aquello—. Tengo la certeza de que de ahí saldrá algo más que una amistad empresarial.
—No te lo creo —Comento Jonathan, el que va después de él, el primero fue Joshua, el segundo Miguel, el tercero y el cuarto eran un par de gemelos Lucas y Marcus luego iba Alexander y el que había hablado Jonathan y el último entre tantos hombres Nikolai.
—Esa chica está muy sonriente, creo que tiene razón —Comento Miguel—. No hay que perder tiempo, si esa mujer se casa con uno de nosotros oficialmente seremos la familia más rica de este país sin mencionar que somos la familia Real.
—La gente siempre está diciendo cosas, pero de ti nunca escuche nada —Nikolai bebió otro sorbo de su copa, tomo el champán en sus manos y le sirvió a ella y luego a su copa.
—Me fui a rusia a los diecisiete años, llegué nuevamente hace dos años, y claro para que tú me notes fui comprando algunas fábricas viejas, pensé que lo harías tú; me sorprendió que aún haya en venta siendo tu un empresario recolector.
—Me descuide, no pensé que tres más serían necesarias para que una mujer no me pase.
—No lo hice con la intención de rebajarte Nikolai, en serio me llamaste la atención desde la primera vez que te vi en aquella parroquia, pero no podía acercarme a ti, es difícil acercarse a la familia real al menos que seas muy rico.
—No me gusta que sea así, por eso se me ha ocurrido una idea para hablarlo en la reunión empresarial de la familia.
—Hacen reuniones familiares empresariales.
—Claro, no solo es familiar, van todos los empresarios del país, en esas reuniones dan información de las nuevas ideas de trabajo para subir la taza de empleos, pero sabes qué; Tú eres suficiente para este país, no te rías estoy hablando en serio.
—No es nada, me halaga que digas eso. ¿Qué tienes pensado?
—Aún no lo tengo definitivo, pero lo pensaré bien esta noche, deberías ir sabes; hay algunas empresarias que podrías hacer no sé, colaboración ¿Maquillaje tal vez?
—Mi empresa va en la venta de lencería femenina, he creado mi propia marca, no tenía la intención de resaltar, pero creo que estoy siendo un buen trabajo.
—Lo estás asiendo muy bien sinceramente, y ya no te tengo rencor —Francesca soltó una carcajada, Nikolai le devolvió la carcajada, le sirvió nuevamente champán y bebió un sorbo.
A las diez de la noche se culminó la fiesta, a esa hora aún había personas en la entrada del palacio para ver cómo salían los grandes funcionarios y tal vez ver si el rey y la reina salían, pero claro en aquella hora no lo harían, así que tendrían que esperar el periódico de la mañana para saber cómo ambos estaban vestidos. Nikolai subió los escalones algo cansado, se despidió de sus padres y al entrar a la habitación se tiró con toda y ropa en la cama.
—Joven Nikolai recuerde que debe quitarse la ropa antes de ir a dormir.
—Lo sé Robin, pero estoy tan cansado ¿Podrías ayudarme por hoy? Prometo que la próxima vez la haré yo solo. Y no me digas joven porque tú eres joven también, solo dime Nokolai bien —El joven intentó levantarlo de la cama, pero Nikolai estaba muy pesado, al final tuvo que levantarse por sí mismo.
—Siempre me dice eso —Respondió mientras le quitaba la chaqueta.
—Entonces ¿por qué debo repetirlo tanto?
—Siento que le faltó al respecto si lo llamo como Nikolai solamente, no solo es mi jefe, nunca se me olvida que es un príncipe también.
—¿Recuerda cuando nos conocimos?
—Lo recuerdo muy bien, usted tenía quince y yo trece, nos pusimos a jugar y usted nunca me dijo que era príncipe hasta que su padre salió.
—No tenía y aún no tengo la intención de verte menos que yo a pesar de mi estatus. Eres el primer amigo que tuve que me habló sin temor a ser pisoteado, tal vez si te hubiese dicho que soy príncipe no me tratas como lo hiciste aquella vez.
—Y me avergüenzo.
—Lo único que me duele es que sigo siendo más pequeño que tú de estatura, esa vez pensaste que tenía menos edad que tú —Robin soltó una carcajada mientras terminada de ayudar a ponerle el camisón para dormir.
—No sé por qué soy tan alto, mido dos metros eso es muy exagerado; a veces no puedo respirar sobre todo cuando estoy corriendo.
—No corras, aún te necesito; tengo que contarte un plan que tengo para mañana y tú serás la persona que necesito para esto.
—Bien, cuéntame que hay en esa cabecita inteligente —Nikolai sonrió acomodándose en la cama.
—Bien aquí va...
Ángela balbuceó algunas malas palabras mientras termina de fregar el último plato, sintió como el hombre encargado de aquel pequeño restaurante donde ella trabajaba como limpieza y también como mesera pasó por su espalda tocando su trasero, Ángela se volteó con un plato en la mano.—¡Si me vuelve a poner la mano en el trasero juro que le parto este plato en la cara, maldito viejo verde! Me oyó se lo parto! —al gritar aquello llamo la atención de tres cocineras y dos hombres más que estaban en la cocina, algunas de ellas sonrieron por lo bajo cantando Victoria, Ángela había sido la única que le había dado su boche por ponerle la mano en el cuerpo sin su consentimiento, estaba acostumbrado hacerlo, pero nunca se imaginó que se encontraría con una mujer como ella, rebelde y boca sucia.—¡No te he hecho nada! Solo
Ángela bostezó mirando el mensaje en la pantalla que le había dejado Adalia, suplicándole que debía estar preparada para irla a buscar, abrió el chat y le envió otro mensaje diciéndole que la esperara en la esquina, Ángela suspiro levantándose de la cama y miró hacia el camarote, Carlín la más pequeña estaba envueltas entre sus sábanas en un sueño profundo en cambio Darleni seguía metida en su celular, tal vez chateando con ese novio que tanto le desagradaba a Ángela, se levantó de la cama y busco entre las gavetas que ponerse.—¿Vas a salir Ángela?—Sí, esa mujer me está suplicando que lo haga, no quiero ir, pero ya sabes como es Adalia.—¿La loquita? ¿La que siempre está con señores ricos en playas?—Sí esa misma, bueno
La alarma de nikolai sonó a las siete y media de la mañana, apagó el sonido escandaloso, pero melodioso y se estiró aún sentado en la cama, bostezo dos veces y bebió un trago del agua que estaba en la mesa de noche, se volvió a estirar y se levantó de la cama, la reunión empezaba a las ocho de la mañana en el palacio del norte; se decía que era a las ocho, pero en realidad los empresarios empezaban a llegar a las ocho y medía, ya que, la familia real tomaba esos treinta minutos para ellos; camino hasta la mesita de noche y volvió a echarle un vistazo a los apuntes que Robín le había hecho anoche sobre las ideas que tenía pautada para que su compañía creciera un poco más. Soltó el pequeño cuaderno en la cama y se desvistió, caminó hasta el baño y entro en la ducha totalmente desnudo, dejo la puerta entre abierta y cerr
Nikolai escuchó la última idea empresarial y hasta este momento nadie mencionaba expandirse fuera de Dinamarca, eso le daba mucho mérito, ya que no quería que su idea fuera cliché como casi todas las que había escuchado, hacer más fábricas, dar más empleos y claro eso estaba bien, él estaba pensando dentro de sus ideas agregar la construcción de cinco fábricas más.—Nikolai, es tu turno. Habla que esto es cada tres meses —Comento el príncipe Joshua, algunos empresarios sonrieron, el joven se levantó del asiento y camino hasta la parte delantera de la sala, abrió su cartera y sacó su laptop.—Hola a todos, no voy a hacer muy extenso. Voy a comprar las tres fábricas de la hermosísima Francesa y claro, esa no era la idea que tenía cuando entre a esta sala, de hecho hasta estoy sorprendido no me lo esperab
Ángela bostezó mirando a sus hermanas, miró la hora en su celular eran aproximadamente las seis de la mañana, no podía faltar hoy al trabajo aunque se sentía muy mal, la enfermera le había recetado un medicamento, pero ella no tenía dinero suficiente para comprarlo, tal vez José tenía razón, era su culpa lo que le había pasado no tomaría del dinero de su hermana por nada del mundo aguantaría su dolor hasta que pudiera.Ángela estaba equivocada en ese aspecto, ninguna mujer era culpable de una violación; ni por su forma de vestir, ni por su belleza, ni por nada; algo así no se podía justificar con nada existentes en este mundo, pero claro no estaba en sus manos ese conocimiento. Caminó hasta el baño fuera de la casa y se bañó entro a la vivienda se puso el uniforme y salió hacia el colmado de la esquina.&
Antonia madre de Ángela le hizo una sopa con mucho ajo y verduras a su hija, la vecina del frente estaba sentada con ella hablando de que siempre está atento a sus hermanas y que si ve algo raro siempre viene a ver como están, Ángela estaba muy agradecida con ella por eso; la joven le había quitado las niñas a su madre por los pleitos que esta hacía con su marido Ángela entendía que eso no era una vida sana para dos niñas, también sabía que su madre no era perfecta así que no la obligó a quedarse sola para que las mantenga con ella, cuando consiguió su primer trabajo alquiló esta pieza a mil quinientos pesos dominicanos quincenales. Respiro profundo y tomó el plato que si madre le pasaba. —No te dejes morir Ángela, si tienes algo no dudes en llamarme, yo estoy cerquita y tú eres una buena persona no se me olvida la vez que tuvieron que llevarme al hospital de emergencia y tú te quedaste en mi casa y no dejaste que los niños me pasen hambre yo aunque no lo creas te agrad
Nikolai miró su reloj de mano al llegar al restaurante, las ocho y medía marcada en las agujetas; dejó esperar a Francesca cinco minutos esperaba que eso no la hiciera sentir incómoda. Salió del Bugatti y le entregó la llave al personal para que lo llevara al parqueo. El joven caminó hasta la puerta y un hombre le abrió.—Bienvenido su alteza real príncipe Nikolai de Schleswing —Habló el hombre que lo recibió después de entrar, el lugar era bastante lujoso muy agradable a la vista y sostificado.—No tienes que darme tantos honores John, siempre vengo a este restaurante —Contestó Nikolai hacia el señor a su frente, este sonrío a tal gesto y señaló el camino algunas personas dejaron de atender a los suyo para mirar al joven, Nikolai saludaba los que podía mientras caminaba junto al gerente del restaurante el cua
Hola como están a los nuevos lectores de este libros, estoy asiendo una nota aquí después de tantos capítulos porque soy así media tonta, en fin; a lo que quería llegar era.Informarles sobre esta novela y las siguientes, esta es una trilogía o saga hasta ahora estoy pensando en saga pero solo tengo tres títulos, este es la primera novela.Las tres se tratan de realeza moderna, no les puedo garantizar de que una sea la continuación de la otra porque mi idea central no es esa, aunque me gustaría hacer una historia de un personaje que le estoy cogiéndole un poco de cariño y a otro que no menciono tanto pero también se me esta quedando el cora. No voy a mencionar esos personajes porque no es seguro como ya le había dicho no es la idea central.¿Por qué? hago esta nota, me gusta comunicarme con mis lectores por cualquier cambió, les quería decir que tal vez cambie a entrada lo que esta en la descripción de la obra o tal vez lo deje así dependiendo como me vaya mejor.