En poco tiempo, el coche llegó a la villa. Simón y Chris bajaron, dejando a Julie esperando en el coche. Sin embargo, Julie insistió en seguirlos.

Chris intentó persuadirla: —Julie, esto tiene cierto peligro, escucha mi consejo y no vengas con nosotros.

—Si hay problemas en tu familia y me quedo atrás, ¿qué tipo de amiga sería? — respondió Julie.

Simón frunció el ceño. Si esta chica no tenía segundas intenciones, ya era bastante leal.

Chris no pudo resistirse a sus ruegos y la llevó consigo. Los tres se dirigieron juntos hacia la villa.

Simón se rio internamente. Un heredero adinerado que se deja influenciar por una mujer, parece que realmente ama a Julie.

Al llegar a la puerta, fueron detenidos por el guardia.

Chris dijo directamente: —Soy Chris, vine a negociar con mi padre.

—Es extraño, no he oído hablar de usted— dijo el guardia.

Simón interrumpió fríamente: —¿Un guardia tiene tanto que decir? ¿Pueden ustedes acaso involucrarse en los asuntos de la familia?

El guardia estaba a punt