Brian había ido temprano a la oficina, ya que encontrarse en la mansión lo estaba por volver loco, aunque extrañaría a su pequeña el tiempo fuera, tener a Gael tan alejado sin poder hablar con él le dolía en gran manera. Que el médico le pidiera que no discutieran no permitía que intentara acercarse, Gael podría ponerse mal si llegara a alterarse. Miguel y David le habían llamado para animarlo, pero nada hacía que se sintiera mejor, solo sería ver a Gael y que este le dijera que lo amaba y que no se iría, pero para Brian esto era pedir mucho ya que Gael ni siquiera quería verlo. El teléfono en su escritorio comenzaba a sonar sacándolo de sus pensamientos. Sin ánimos de conversar responde la llamada. - Hola? - Brian Benet, te saluda Poy... - Brian queda tieso luego de oír ese nombre, se trataba del notario donde habían hecho el contrato con Gael. - Señor Poy, un gusto saludarlo... - Responde nervioso. - Let me comentó que tú hija ya ha nacido. Sólo quería informarte que si demora
Sus lágrimas seguían cayendo sobre sus mejillas. Su libertad ya estaba en sus manos, solo debía esperar a que los días pasen para poder ir a su consulta para saber que ya estaba en condiciones de tomar un viaje.Su teléfono comenzaba a sonar anunciando una llamada, poniéndose de pie va hasta este tomando notando que se trataba de Peter. Secándose las lágrimas responde mientras Peter se veía en la pantalla su sonrisa se fue desvaneciendo.- Gatito... por qué lloras?- Pety... - pronuncia cayendo en llanto.- Por Dios! ¡odio verte llorar! que sucede?! - Pregunta Peter preocupado.- Ya-- el divorcio está hecho... - Intentaba componerse.- Cómo? ¿pero acaso no lo anularon?- No, lo olvide... pero Brian siempre quiso que nos separemos, tal vez por eso tampoco me lo mencionaba, todas sus atenciones eran solo por... nuestra hija.- Qué estás diciendo?- Lo oí, cuando fui para que me llevara a anular el contrato que habíamos hecho, escuche cuando les decía a sus amigos.- No puede creer, ¡es
Un fuerte dolor en su brazo lo hace despertar, abriendo sus ojos encuentras a Gael sobre este acurrucado con su pequeña que seguían durmiendo plácidamente. Una gran sonrisa se muestra en sus labios, aunque quisiera tenerlos más tiempo el dolor hacía que lentamente intentara apartarlo. Gael abre sus ojos al sentir que Brian apartaba su acogedora almohada, abriendo sus ojos se encuentra con la hermosa sonrisa de Brian. - Brian... - Lo siento es que ya sentía entumecido el brazo... - No fue un sueño? - Susurraba Gael haciendo que este sonriera. - No y estoy feliz de que no lo fuera. Alessa se durmió toda la noche... - Sí, es muy cálida... - Un silencio se hizo entre ambos viendo a su pequeña. - Amor, ¿podemos seguir juntos? - Pero ya estamos divorciados... - Dice Gael con pesar. - Qué importa, empecemos de nuevo... - Estás seguro? - Completamente... te amo y también a nuestra pequeña... - Entonces, iniciemos. Hola mi nombre es Gael Wins, ella es Alessa tu hija... - Sonríe Gael
Despertar de un sobresalto era algo que hace tiempo no le sucedía, pero no encontrar a Gael a su lado, un temor se apoderó de su corazón haciendo que bajara de la cama rápidamente para ir a al baño, pero tampoco se encontraba allí.- Gael no está? - Pregunta con la respiración agitada, agilizando sus pasos va al placard a ver si sus pertenencias se encontraban. - Todo está aquí... fue todo un sueño, debo superarlo. - Susurraba suspirando aliviado.Comenzando a caminar va a ver la habitación de alado para ver si se encontraba allí pero tampoco había señales de él. Se dirige hacia la habitación de Alessa ya que esta tampoco se encontraba en la cuna que habían llevado a su habitación. Abriendo la puerta lentamente podía ver a ambos. Gael cargaba a Alessa en sus brazos susurrándole algunas palabras que podía oírlas.- Mi princesa, no sabes cuánto he imaginado este momento, de tenerte en mis brazos, ver tus ojitos, tocar tus manitas. Recuerdas que te había dicho que te contaría nuestra his
Los días pasaban disfrutando de su hermosa familia, aunque no tenía ganas de ir a la empresa debía dejarlos en la mansión. Brian se encontraba desde muy temprano en su oficina ya que debía estar presente en varias reuniones. Una fotografía donde se encontraban Gael con su pequeña Alessa en brazos y Brian abrazándolos sobre su escritorio hacía que no los extrañara tanto y estar lejos no fuera tan agonizante.- Tú maldito tailandés! - Se oye abriéndose la puerta asustando a Brian dando un respingo.- Maldita sea Miguel!! - Dice llevándose una mano en el pecho respirando agitado, por un momento pensaba que Gael era quién entraba, que en milésima de segundo creía que estaba acabado y ni si quiera sabía por qué.- Jajajaja creíste que era Gael no?!- Qué idiota eres Miguel. - Dice David adentrando tras él.- Si claro, tú fuiste el de la idea. - David hace un gesto de indignación.- Qué hacen aquí?- ¡¿Qué?! Acaso crees que ese chisme solo iba a quedar en una llamada. Por qué siempre nos cu
Brian seguía tratando de asimilar lo que había pasado dentro y fuera de su oficina, nunca se hubiera imaginado a Gael realizar semejante movimiento, cosa que de alguna manera comenzó a temer. Gael le había dicho que lo esperaría en la casa, pero ahora no sabía si era buena idea ir. Era obvio que debía darle una explicación de quien era ese idiota, pero Gael no había mostrado estar molesto siquiera con él, incluso lo beso y.… ¿¡lamió sus labios!?Brian seguía pensando en todas las posibles preguntas que le haría Gael antes de darle un golpe, bueno no es que estuviera exagerando, pero debía estar preparado para lo que le haría no? Primera vez deseaba que Miguel estuviera en la casa ablandando a Gael con sus locuras, pero este no respondía la llamada como si supiera por lo que podría ocurrir en la casa una vez que llegara.- Mal amigo! Gael va a matarme. - Repetía en todo el camino, hasta llegar a la mansión. El silencio era tenebroso al entrar por la puerta, mirando por todos lados se l
El día iniciaba, mientras intentaba abrir sus ojos, el torso desnudo de Brian lo cubría por completo rodeándolo con sus brazos, con una sonrisa toma un de ellos para poder bajar de la cama.Brian al sentir el movimiento se acurruca ajustando más sus brazos que Gael suspira profundo.- Ne sarang, debo ir al baño...- No, quédate más...- De verdad debo ir, ya no puedo retenerlo. - Decía abriendo los brazos de Brian que ampliamente muestra un puchero disconforme haciendo que Gael negara. - Espero que Alessa no sea así de manipuladora.- No te tardes...- No irás hoy a la oficina? - Pregunta mientras va bajando.- No, quiero estar con ustedes aquí...- Está bien, ¿quieres ducharte? - Pregunta y de inmediato Brian abre sus ojos con una gran sonrisa.- Babo! (también significa tonto)- Si, me sigues hablando en coreano, no te aseguro que salgas librado amor... - Amenaza bajando de la cama para acompañarlo.- Solo porque quiero ver a nuestra pequeño no te sigo el juego. - Dice con una sonri
Los días fueron pasando, mientras Gael seguía insistiendo en lo que deseaba, Brian intentaba persuadirlo para que dejara la idea, pero esto era prácticamente imposible. Mientras más se resistía mayor era la curiosidad en Gael.Cómo podía hacerle entender, que solo la idea lo aterraba, sí en verdad era más cobarde de lo que creía. Pero Gael no se detenía en una negativa, aunque Brian lo complaciera en todo, siempre terminaba con esa conversación.Brian debía realizar algunas reuniones en la oficina, cosa que lo tendría muy ocupado en esta. No le agrada dejar tanto tiempo a Gael y a su pequeña, pero había días en que terminaba muy tarde que terminaba rendido y solo llegaba a la casa deseando arrojarse a la cama.Este día no era la excepción, luego de despedirse con un beso de su amado fue a la empresa Let estaría realizando varias visitas en distintos puntos del país que se mantendría un tiempo fuera de la mansión.Brian se encontraba en su oficina con una pila de documentos que debía t