Narra Rut

Después que Adriana se fue Daniel y yo nos miramos y soltamos una carcajada recordando las ocurrencias de Adriana. Ella siempre ha sido muy entretenida y siempre es un placer compartir con ella, de una manera u otra ella pone la diversión donde quiera que esté, es como esa pizca de sal que siempre hace falta para preparar una buena sazón.

Buscamos nuestro vino e hicimos un pequeño brindi sin decir nada, solo chocamos nuestra copa y nos tomamos todo el contenido. No sabíamos exactamente porque brindábamos, pero sentimos la necesidad de hacerlo. a lo mejor inconscientemente estábamos brindando por nuestra relación y por el gran amor que nos une.

-Te amo - dijo Daniel mientras se acercaba más a mi posición – y con ese pijama no te imaginas todo lo que estas provocando en mí. Su mirada se tornaba oscura y llena de lujuria, me hacía sentir deseada, su mirada me estremecía

Sigue leyendo en Buenovela
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Escanea el código para leer en la APP