"Pues no dejes de pedir más".

Justo cuando giraban por quinta vez, Jim finalmente no pudo aguantar más y exclamó: "¡Eh, si no te preparas pronto, te perderás el momento perfecto!".

Joshua volvió a la realidad. Rápidamente dejó a Luna en el suelo y le dio un beso en la frente. "De acuerdo. Hora de prepararnos".

Luna frunció las cejas, pero antes de que pudiera decir algo, Rachel y Bonnie se la llevaron entre bastidores.

La maquilladora y la asistente la habían estado esperando, con el vestido de novia preparado de antemano.

Cuando Luna apareció, la sentaron rápidamente en una silla y se pusieron a trabajar. Algunas personas la ayudaron a ponerse el vestido, otras se encargaron de peinarla y el resto de retocarle el maquillaje.

Luna por fin sabía lo que era ser una celebridad con un equipo de estilistas a su entera disposición.

Soltó una risita amarga y dijo: "Bueno, si hubiera sabido que me tratarían así, habría salido hace mucho tiempo".

Había hecho muchos amigos en la cárcel e