En el pasado, lo único que sabía era que su esposo era un asesino a sangre fría y que solía quitarle la vida a los demás con un chasquido de dedos y una sonrisa en su rostro. Sin embargo, no sabía que había un lado de él que amaba y apreciaba tanto la vida. Conquistó toda la Isla Estrella sin movilizar a un solo soldado ni disparar una sola arma. Parecía fácil. Sin embargo, había sido el resultado de su dedicada planificación y organización durante los últimos seis años. Sebastian no tardó en comenzar los trabajos de reparación y restauración de la Mansión Payne y de la antigua residencia de la familia Summer. Ordenó restaurar la Mansión Payne para devolverle su esplendor, como solía ser cuando pertenecía a la familia Summer. Se colgaron en la mansión retratos de los antepasados de la familia Summer como señal de respeto y homenaje. Estos arreglos no llevaron mucho tiempo. Una vez que se tomaron las decisiones necesarias, las obras de restauración se completaron en una semana
Jade guardó silencio. Sabrina sonrió fríamente mientras miraba a Jade. "Señora Lynn, ¿no recuerda en absoluto a este hombre?". Jade dijo: "Tú... Él...". "¿Quién es él?", preguntó Sabrina mientras una gran sonrisa estaba plasmada en sus labios. Al ver la expresión de Sabrina y escuchar la forma cariñosa en que llamaba el hombre a Jade, Lincoln inmediatamente miró a su esposa con sospecha. "¡¿Quién es él?!". "Él...". "Jadie, siempre me has amado. Hice todo lo que me pediste. Tenía una buena vida en Ciudad del Sur, con un trabajo estable, pero me pediste que viniera a Isla Estrella contigo, así que lo hice. ¿Puedes salvarme, por favor...?". En ese momento, el hombre delgado supo que la muerte se acercaba rápidamente a él. No podía ocultar la verdad por más tiempo. Jade apartó al hombre con una fuerte patada: "¡Gran idiota! ¿Estás confabulado con Sabrina? Así es, lo admito, ¡fui yo quien te pidió que asesinaras a Sabrina! Sin embargo, hacerlo fue idea del Amo Payne, y en aque
Tan fácil como abrochar un botón. Selene y sus padres estaban asustados. A lo lejos, Harry Payne y su esposa estaban igualmente aterrados. Para sorpresa de todos, Minerva era la más valiente de ellos. Mantenía la cordura e incluso miraba a Sebastian con ligera admiración. Murmuró en voz baja: "Cuando mi Tío Holden controlaba la isla, también era tan feroz y decidido como él". Minerva miró a Aino y le dijo suavemente: "Oye, mi pequeña seguidora, tu padre es muy parecido al Tío Holden". "¿Al Tío Holden?", preguntó Aino. Aunque Aino era una niña orgullosa y casi arrogante, le contestó tranquilamente a una chica fea como Minerva que la llamaba su pequeña seguidora. Aino pensó que era un honor ser la seguidora de una chica que era diez años mayor que ella. "¡Mi Tío Holden!". Minerva puso los ojos en blanco ante Aino. "¡Te quería como si fueras su propia hija! Yo le daba asco, pero en cuanto te vio, te mimó como si fueras su pequeño tesoro. ¡Ja!". Aino comenzó a reír. "Oh... t
"¿Qué?". Minerva pensó que lo había escuchado mal. A su lado, Sabrina añadió: "Te preguntó qué quieres estudiar en la universidad para que podamos inscribirte en una escuela adecuada". Sabrina conocía mejor a su esposo. Era un esclavo de los deseos y necesidades de su hija. Sebastian podría darse cuenta de que a su hija le agradaba esta chica de nariz aplastada. Era salvaje y rebelde, pero en conjunto, tenía un alma justa. Crecería para ser un talento valioso si llegaba a recibir una educación adecuada. Y lo más importante, tendría a una amiga, y Sebastian también lo consideró. Al llevar a Minerva a Ciudad del Sur, la tendría como rehén. De esta forma, si Harry Payne y su esposa querían derrocarlo e idear otro plan retorcido, ya no podrían hacerlo. Minerva empezó a llorar con gratitud: "Yo... Yo... Amo... Amo Sebastian, usted... ¿realmente está dispuesto a patrocinar mis estudios en Ciudad del Sur? Ciudad del Sur está llena de buenas escuelas, con tantas universidades como a
Algunos estaban a cargo de la defensa y la gestión, y otros se encargaban de las organizaciones civiles. Sabrina sonrió y le dijo a Sebastian: "Sebastian, mira. La familia Summer desapareció de Isla Estrella desde hace más de 50 años, pero la gente aún los recuerda. A ti también te quieren y te respetan. Debes estar muy feliz". El hombre sonrió suavemente. ¿Qué era la felicidad? Ni su carrera ni sus ambiciones podían darle la felicidad. Las únicas cosas que podían darle felicidad eran su mujer y su hija. Delante de todos los altos funcionarios de la isla, el hombre dominante y despiadado, de sangre fría, atrajo de repente a su mujer entre sus brazos y le plantó un suave beso en la frente, diciendo con dulzura: "Vamos, es hora de subir al avión". Sabrina se quedó sin palabras. ¿Era necesario hacer eso? Ese hombre. Se estaba convirtiendo en un experto en alardear de su relación amorosa en público. El viaje a Isla Estrella valió la pena. Parecía que Holden, que se había
Minerva guardó silencio. Está era la primera vez en su vida que alguien la llamaba hermosa. La mancha oscura que siempre había estado en su corazón se encogió considerablemente. Su sonrisa se volvió mucho más dulce que antes. "Gracias por el cumplido. Usted también es muy guapo. Debió verse muy elegante mientras salvaba a esas personas". Mientras hablaba, Minerva se sonrojó de repente. "Es solo que... Es demasiado mayor para mí. Por lo que creo, es más de diez años mayor que yo. Puedo dirigirme a usted como tío. Si no, lo habría perseguido". Nigel no dijo nada. Desde que se acercó a Sebastian, estaba mucho más animado y optimista que antes. Quería empezar una nueva vida, quería volver a Ciudad del Sur y ayudar a sus padres a gestionar el Grupo Connor. Si tenía suerte, podría conocer a una chica agradable con una buena personalidad como Sabrina, casarse con ella y formar una familia. Nigel tenía planes de casarse, pero nunca pensó en conseguir una esposa adolescente que tuvi
Sabrina sonrió ligeramente en dirección a Nigel, y luego se dio la vuelta para alejarse de él. No sentía ni un poco de amor hacia él. Solo amistad. El amor familiar que sentía por Zayn era mucho más fuerte que la amistad que compartía con Nigel. Sin embargo, había un sentimiento de gratitud de su parte ahora, pero no había nada más que esto. En ese momento, Sabrina centró toda su atención en su esposo. Él había capturado la casa de Selene y sus padres. La ironía es que de tantas vueltas ahora se encontraban con sus enemigos vivitos y coleando junto a ellos. Además, estaban a punto de volver a pisar este pedazo de tierra, sanos y salvos. Todo ello gracias al todopoderoso e influyente abuelo de Selene. El mismo viejo que intentó por todos los medios matarla hace seis años. Sabrina dejó escapar una risa despreciable al pensar en el Viejo Amo Shaw. Se sintió asqueada, como si estuviera a punto de vomitar. Sin embargo, no tuvo más remedio que enfrentarse a él. Se preguntaba cuál era e
"¡¿Qué?!". Sebastian estaba increíblemente sorprendido. Sabrina estaba igualmente sorprendida. Sabrina y Sebastian hicieron varias predicciones sobre el gran secreto que guardaba el Viejo Amo Shaw durante el viaje a la casa club. Sin embargo, no podían haber adivinado que Sebastian tenía un hermano menor que compartía el mismo padre y la misma madre que él. Un hermano menor. Un hombre tan tranquilo y sereno como Sebastian no pudo evitarlo y miró con los ojos muy abiertos al Viejo Amo Shaw. ¿Tenía un hermano menor? Compartían los mismos padres. ¿Significaba esto que su hermano también llevaba el apellido Ford? Durante una fracción de segundo no supo lo que sentía, quizás era emoción o quizás algo más. Le costaba quedarse quieto ahora. Sabrina tomó su mano y, solo entonces, consiguió calmarse. En ese momento, tuvo un fuerte presentimiento. Casi podía adivinar... Con un movimiento de sus ojos, se dio cuenta de que Sabrina también lo miraba. Obviamente, ella pare