”Este camino no ha sido fácil para ninguno de los dos. He soportado sufrimientos que están más allá de su imaginación para protegerlo. Asimismo, para protegerme, el contraataque que él propinó también fue algo más allá de mi imaginación como madre. Sebastian ya se ha ganado muchos enemigos para estar donde está hoy. Si él se enterara de que yo anhelaba la tierra de la antigua Residencia Ford, él me dejaría mudarme a toda costa. No quiero que él haga un gran escándalo por mí”. El tono de Grace sonaba arrepentido, pero era más exacto decir que sentía lástima por su hijo.Sin embargo, Sabrina escuchó la solitaria vida de la mujer.Grace nunca se había puesto un vestido de novia y nunca fue reconocida por la Familia Ford en su vida. Ella todavía no podía cumplir su deseo porque tenía muchas preocupaciones a pesar de que su hijo tenía el control de todo ahora.¿Cuán similar podría ser el destino de Grace y Sabrina?Ambas quedaron embarazadas fuera del matrimonio.Grace había estado sol
Selene estaba sentada en el taburete redondo y miraba a Sebastian con admiración. La forma en que Sebastian se veía mientras colocaba un brazo en el borde del sofá, cruzaba sus largas piernas y agarraba un cigarro encendido en su mano, daba una impresión fría y despiadada.La mesa de café entre los dos tenía varios postres exquisitos sobre ella.Macarrones, suflés, crumble de chocolate y tortas Sacher. Cada uno era pequeño y se podían comer en un solo bocado.Sin embargo, cada uno de ellos costaba de diez a veinte dólares por pieza.El favorito de Selene era el pudín de melocotón. Sabrina nunca había comido postres tan delicados y encantadores, pero reconocía la mayoría de ellos.Cuando ella solía vivir con la Familia Lynn, a menudo veía a Selene comiéndolos.Selene creció con una buena vida desde muy pequeña. Si Selene quería algo, Lincoln y Jade la satisfacían. Ahora, tenía un novio rico y poderoso como Sebastian, que también le compraba todo para que ella pudiera comer y esc
Sabrina no le respondió a Selene, sino que se limitó a mirar tranquilamente a Sebastian. “Dejaré mi bolso adentro y luego me iré de inmediato. Volveré dentro de tres o cuatro horas. Ustedes… continúen”.Ella no resopló ni sonrió, su expresión era extremadamente tranquila.Sin embargo, Sebastian sintió una especie de desapego, indiferencia, determinación y una autoprotección desamparada y desoladora.Sintió el deseo de conquistarla.Él sabía que ella ya había confesado sus intenciones, engañó deliberadamente a su madre y llevaba un b*stardo en el vientre, engañándolo, pero él aún se sentía atraído por ellaLa expresión del hombre inicialmente no era demasiado buena, pero se volvió extremadamente dura y severa como si estuviera reprimiendo su irritación.Sabrina entró a su habitación y dejó su bolso, contó los pocos billetes que tenía, sacó cinco dólares y salió de nuevo. Ella ni siquiera miró a Sebastian o a Selene.La puerta se cerró con un estruendo.Selene dijo con resentim
Sabrina se sorprendió.Se concentró en adaptarse a la oscuridad y se dio cuenta de que Sebastian estaba sentado solo en el sofá. Tenía un cigarro sin encender entre los labios y ambas manos en las rodillas. Tenía el ceño ligeramente fruncido y estaba examinando a Sabrina con sus profundos ojos negros.“Tú…”. Sabrina iba a preguntarle a Sebastian. ¿Por qué seguía despierto? Además, ¿dónde estaba Selene?Sin embargo, ella no preguntó.Estaba sorprendida por la expresión de Sebastian.‘’¡Ven aquí!’’. Las palabras de él fueron como una orden imperial, y a Sabrina no se le permitía resistirse. Ella se sentía como la amante de Sebastian que había perdido su afecto, era miserable y había cometido un error. Sebastian le pidió que se acercara, y ella no se atrevió a desafiarlo.Se mordió los labios y se acercó a Sebastian. “¿Hay algo…?”.Su tono era tranquilo y natural.Sebastian, por otro lado, se burló en sus adentros.Después de que Sabrina se fuera, él echó a Selene. Aunque
Ella no tenía capacidad para luchar en ese entorno. La trataban como a un juguete, una hormiga y un trozo de pasto. Sabrina no tenía un centavo, no tenía nada a lo que recurrir y estaba exhausta.No quería pelear más.Si la volvían a humillar hoy, acabaría con su vida.Lo único que la haría feliz sería si pudiera llevar a su bebé a reunirse con su madre.El hombre se levantó de repente después de mirar a la obediente Sabrina. Su mirada hacia Sabrina era aun más despectiva que antes.“¡Ninguna mujer con la que yo, Sebastian Ford, quisiera meterme en la cama se resiste! ¡Tú, por el otro lado, no eres digna!”, continuó con frialdad: “¡Escúchame bien! Si bien todavía tienes una relación matrimonial conmigo por un mes más o menos, ¡será mejor que cumplas con el deber de una esposa y no te metas con ningún hombre! ¡Solo te estoy dando esta única oportunidad como advertencia!”.El hombre la dejó caer y se levantó para irse después de decir eso.Sabrina se quedó sin palabras.¿Ella j
Había otro hombre en el coche de Nigel.Sabrina sacudió la cabeza, antes de responder: “Gracias, Amo Nigel, pero creo que tomaré el autobús”.“No mordemos. ¡Este es mi mejor amigo Zayn! ¡Entra ya!”. El tono de Nigel no ofrecía lugar para la negociación y sonaba más como una orden: “Sé que tienes mucho trabajo que hacer todos los días, así es para todos los empleados nuevos, te irá mejor luego. Sube, ¡te llevaré!”.Sabrina se mordió el labio vacilante y finalmente cedió.El otro hombre en el coche, Zayn, parecía modesto y educado. Miró a Sabrina con respeto y la saludó: “Joven Señora Ford, he oído mucho sobre usted”.Sabrina sonrió gentilmente e inclinó la cabeza. Los dos hombres sentados frente a ella provenían de entornos adinerados, el tipo de persona con la que nunca antes ella había tratado. Ella no tenía ni idea de cómo interactuar con ellos, por no mencionar cómo agradarles. Por lo tanto, decidió que lo mejor para ella era permanecer en silencio.“¿De regreso a casa de mi p
Ella necesitaba desesperadamente el dinero en ese momento.Nigel parecía haber visto a través de ella y dijo con una actitud arrogante: “Lo que te he dado no puede ser más de tres mil dólares. ¿Qué pasa? ¿Tienes miedo de que estuviera tratando de comprar una noche de tu tiempo con eso? ¡Relájate! ¡No estoy interesado en ti! Solo pensé que una campesina como tú era demasiado patética. Considera esto como una obra de caridad. Si realmente no pudieras aceptarlo como es, puedes pagarme devuelta a cuotas en el futuro, cada vez que recibas tu pago’’. “Gracias”. Las mejillas de Sabrina se sonrojaron cuando sostuvo el dinero en sus manos.“¡Además! Mi tiempo es demasiado valioso. Deja de hacerme perder mi tiempo. La próxima vez que te diga que te voy a llevar, debes subir al coche inmediatamente”, dijo Nigel con picardía mientras miraba el reflejo de una Sabrina sonrojada desde el espejo retrovisor de su coche.“Está bien”. Ella asintió obedientemente y se dio vuelta para mirar por la ven
Sebastian miró en silencio mientras el coche de Nigel se alejaba.Kingston preguntó: “Amo Sebastian, el coche de ahora… Parece que pertenece al Amo Nigel, ¿estaba aquí para visitar a la Señora?”. Kingston estaba ocupado estacionando el coche y se perdió la escena en la que Sabrina salió del coche de Nigel y le sonrió dulcemente.“Nigel no considera a mi madre como su tía. La única razón por la que se dirigió a ella como su tía fue simplemente por miedo hacia mí”, dijo Sebastian en voz baja, antes de bajarse del coche y al hospital solo.‘Mi madre se ha mostrado muy enérgica últimamente, por lo que parece mentira que solo le quedaba un mes de vida’, pensó Sebastian.Sebastian sabía que era la constante compañía de Sabrina lo que había elevado el espíritu de su madre y la había hecho sentirse un poco mejor a pesar de su condición.Tenía que admitir que Sabrina era ingeniosa. Ella permanecía fría y distante ante su presencia como si no quisiera tener nada que ver con él.Sin embargo