Después de que la mirara así durante un buen rato, Serenity comprendió un poco y le preguntó tímidamente.—Señor York, tú, ¿quieres que yo haga eso por ti, que te limpie la cara?

—Me pinté la cara de negro por tí.

En otras palabras, ella era la responsable.

Serenity estaba boquiabierta, con un sentimiento de que, este hombre se había convertido en un sinvergüenza.

—Bien, te limpiaré la cara, por que te pintaste la cara por mi. Deberías pintarte toda la cara de negro y ponerte un sombrero para poder jugar al Rey Baltasar.

Dijo Serenity mientras tiraba de él hacia la cocina.

Zachary la siguió y se detuvo a unos pasos, le preguntó con el ceño fruncido.—¿Por qué vamos a la cocina?

—Hay agua en la cocina. Tu habitación está prohibida para mí, nunca se me permite poner un pie, ¿cómo te lavaré la cara si no te llevo a la cocina? O puedes esperar aquí, iré a coger una toalla y la mojaré, y luego te limpiaré con ella, a ver si sirve o no.

Zachary estaba sin palabras.

Esto fue realmento llovió a