Tras ver a Chloe entrar en el hotel, Luna le dijo al chófer: —Volvemos a la Mansión Díaz.

—Bueno.

Luna se recostó en el asiento trasero, pensando en Chloe.

La persona que quería hacer daño a Cloe, sin tener que preguntar, sería alguien de la familia Fisher.

Las únicas personas que realmente querían que Chloe se convirtiera en la cabeza de familia eran probablemente Sandra y los parientes colaterales.

La sucesora anterior fue Giselle, pero ella no era una verdadera descendiente de la familia Fisher, así que los parientes colaterales no podrían querer que ella se hiciera cargo de la familia.

Si Chole tampoco era capaz de asumir el cargo, las hijas de las líneas laterales tendrían que hacer planes por su cuenta.

Luna creía que era la familia de Chloe la que estaba detrás de todo esto. Era posible que los de la línea lateral lo supieran, pero no lo impidieran.

Aunque Chloe era hija biológica de Sandra, no creció con su madre y no tuvo ningún vínculo con nadie de la familia. A los parientes