Te puedo hacer una pregunta y me gustaría que me respondas y me digas la verdad — pregunta Naty.

— A ver si adivine, lo que me vas a preguntar — dice Germán.

— A ver qué adivinaste — dice Naty.

— Pregunta y te digo si es lo que yo pienso — responde Germán sonriendo.

— Si no fuera tu hermana y Germán la interrumpe — Te casarías conmigo, viste que sabía lo que me ibas a preguntar — dice Germán y le levanta el mentor.

Si obvio, si me enamoré de vos como un tonto, no llores porque me pones muy mal.

Sabes el día que fuimos con mis amigos al club, era para festejar que volvía a ser libre de nuevo y ni loco pensaba enamorarme otra vez.

Después de lo mal que lo pasé el último año de mi matrimonio, dije nunca más una mujer, las quiero lejos hasta que te vi y me volviste loco, pero de verdad literal me volví loco cuando te vi y más cuando yo creía que te acostabas con otros hombres y no entendía porque conmigo no.

¿A ese es el tipo que se iba con vos no? Todas las noches del club — pregunta Germ