Germán no tolera ver a Naty con otro hombre y verla besarse con Agustín lo enloqueció.

Toma un trago, tras otro, sin medida, hasta que el bar tender no quiere venderle más alcohol del que ya bebió, por su bien, pero este se enfurece.

—¿Qué crees que no tengo dinero?, imbécil toma y ahora dame otro trago.

— Señor no está en condiciones de seguir bebiendo, guarde su dinero, porque no va a su casa a descansar dice el joven de la barra del bar.

— No puedo sabes porque, me enamora de una mujer perdidamente, pero es un amor prohibido y ahora está con mi mejor amigo y Germán al recordar ese beso toma su vaso y lo tira pegándole a la pared y este estalla en mil pedazos por el aire.

— Señor cálmese por favor y Germán sale del bar hecho una furia para ir a reclamarle a Agustín por estar con Naty.

Se sube a su auto y sale acelerando y a una velocidad prohibida.

Es tal la mala suerte que tiene que se cruza de carril y choca con un camión, destruyendo todo el auto y su cuerpo.

Fue tan fuerte el imp