Capitulo 04

Laila Carter

Desperté con unas náuseas impresionantes, así que corrí directamente al baño y comencé a vomitar todo lo que había ingerido en la noche.

Odiaba esto

Odiaba cómo me sentía.

Esta era la sensación más fea del mundo.

Suspiré.

Una vez que terminé de vomitar me levanté lavé mi boca se pegué mis dientes decidí darme una ducha una vez que estuve lista salí del cuarto de baño.

No tenía ni la menor idea qué hora era, así que apenas me entré al clóset busqué el reloj eran las 6:30 aún tenía bastante tiempo para arreglarme y llegar al trabajo.

Tenía tantas cosas que hacer, me encantaría quedarme en la cama acostada todo el día descansando y tratando de tomar una decisión de qué hacer con este bebé sin embargo no podía hacerlo tenía que sacar adelante la empresa tenía que evitar que el banco me la quitará.

Era tan frustrante ver como todo mi trabajo se iba al piso.

Suspiré.

Una vez que me coloqué una falda de tubo y una camisa con su respectivo blazer unos tacones pequeños supe que estaba lista, presente frente al vanity para acomodarme un poco, no pude evitar mirarme bien al espejo.

Me imagine a mi misma con una enorme barriga, podría tener a este bebé que crecía dentro de mí, es cierto que no tenía ni la menor y idea de quien realmente era su padre porque no conocía su maximiliano era una buena persona o no.

No estaba en mis planes y sinceramente no se que es lo que yo pueda ofrecerte, no sé si yo pueda ser una buena madre, tengo miedo de fallarte.

Toque mi abdomen y lo acaricie suavemente, aquí estás pero no sé que es lo mejor para los dos.

No sé si tendré la valentía para interrumpir este embarazo, quizás y solo quizás pueda irme lejos de aquí y así te tengo sola pero y mi empresa no puedo simplemente abandonar todo por lo que he trabajado.

Mis ojos se cristalizaron, tenía tantos sentimientos encontrados en este momento, me sentía tan estúpida.

Una vez más centre mi atención en mi yo que estaba frente al espejo, tomé asintiendo y me mire con detenimiento, me veía pálida y tenía unas ojeras enormes, traté de ocultar aquellas ojeras con algo de maquillaje pero realmente se me hizo imposible, ya no te iba más tiempo para seguir aquí pensando y torturándome a mis misma.

Lo mejor que podía hacer era salir y trata de que mi empresa no se fuera a la basura, ya vería que hacer con este pequeño ser que crece en mi, tomé mi cartera y estaba más que lista para salir de la habitación de mi carro era la empresa pero comencé a escuchar ruidos abajo así que me asusté pensé que algún animal había logrado entrar a la casa aunque parecía absurdo ya que nunca había tenido este tipo de problemas.

No sabía si bajar me daba miedo busqué mi teléfono e intenté llamar a la policía pero por alguna extraña razón mi teléfono parecía no funcionar.

Algo estaba mal.

Me escondí en el clóset muerta del miedo, mientras colocaba mi mano en mi vientre pensando en que no quería que esté pequeño ser fuese dañado.

Quizas no quería perderlo como tanto intentaba convencerme a mi misma.

Trate de buscar algún escondite en el clóset en dónde no pudieran dar conmigo sin embargo antes de que pudiera encontrarlo la puerta de mi clóset se abrió, había un hombre muy alto, piel morena, cabello castaño y se veía furioso mientras me miraba como si quisiera asesinarme.

¿Por qué?

¿Quién era él y qué hacía aquí?

¿Por que había entrado a mi casa de esa manera?

Yo no había hecho nada!!

Me alejé de lo más que pude, intenté que no pudiera tocarme o escapar de él.

— lárgate de mi casa— Grite con la voz temblando —ya llamé a la policía viene en camino — mentí aunque el hombre tampoco pareció creer mucho mis palabras de hecho se acercó a mí y tomó mi brazo sin decir absolutamente nada me obligó a levantarme lo hice mientras gritaba que por favor me soltara— qué es lo que quieres de mí, no tengo familia adinerada— le dije, quizás se había confundido pero la zona pero había ahorrado demasiado para poder vivir aquí — Seguro te equivocaste de personas, si quieres dinero las personas que tienen dinero no vivirían aquí — chille.

— ¿crees que quiere el dinero de tu m*****a familia?— preguntó hablando por primera vez, su voz era ronca y muy intimidante sus ojos marrones me miraban con tanto odio como si yo lo hubiese hecho lo peor que un ser humano puede hacerle a otro pero ni siquiera lo conozco, yo no le hice nada ¿Cómo era posible que me mirara con tanto odio? — no quiero absolutamente nada de tu familia más que exterminarlos— ¿Que?! Exterminar a mi familia ¿Por qué?— Son una basura en el mundo

—si te deben dinero o te han hecho algo malo te prometo que yo no tengo nada que ver con ellos, hace muchísimo tiempo que me alejé porque sé que son malas personas, por favor no me hagas daño yo soy inocente— te dije mientras intentaba resistirme a irme con él pero el hombre tenía muchísima más fuerza que yo así que me hacía moverme fácilmente pero aún así jamás dejé de intentarlo

— no eres inocente si llevas esa m*****a sangra asquerosa en tus venas eres igual de culpable que ellos!!— Exclamó —eres igual de asquerosa y repugnante que cada miembro de tu familia y si no puedo hacerlos pagar a ellos te haré pagar a ti, al menos hasta que me digas qué fue lo que hicieron y cómo revertirlo y luego así te mataré, podrás ser libre de todas las torturas que pienso ejercer en ti— ¿Tortura? M****a!! ¿En dónde me estaba metiendo?!

— creo que te equivocaste de personas te prometo que yo no soy esa que buscas— le dije con pánico luego de escuchar sus palabras

Yo no había hecho nada, yo ni siquiera sabía de que estaba hablando el, yo no había hecho nada ¿Que tanto mal pudo haber hecho mi familia como para que alguien quiera torturarme?!

— claro que lo eres ¿Crees que me vas a engañar?!— Gritó — ¿Acaso me crees estúpido?!— No sé si era el miedo pero juro que podía ver como sus ojos pasaban de marrones a rojos levemente lo que me aterró aún mas

Mis ojos se cristalizaron estaba aterrada, iban a secuestrarme, iban a matarme ¿Era eso? ¿Iba a morir? Mientras caminaba no dejaba de pensar en lo que había sido mi vida, en todo lo que había trabajado y en que no había podido disfrutar de mi vida.

Me sacaron de casa y me hicieron entrar en una camioneta gris, me mantuve en silencio porque me daba miedo hablar, me daba miedo que me hiciera daño, mantuve mis brazos en mi vientre.

No sé cuánto tiempo paso pero solo estuve llorando en silencio, intente pensar como escapar pero en todas las posibilidades terminaba muerta o herida.

Cuando él auto se detuvieran las puertas se abrieron, me bajaron a empujones haciendo que cayera al suelo, cuando logré levantarme note que parecíamos estar en un bosque ¿Que es esto?!

¿Que m****a era esto?!

¿Acaso iban a matarme aquí?

¿Por qué en un bosque?!

¿Acaso era lo más lejano que encontraron?

Me sentía tan confundida y aterrada al mismo tiempo ¿Era eso normal?

— ¿Dónde estoy?— pregunté con la voz casi temblando, sabía que no debía hacer preguntas y lo confirme cuando apretaron tan fuerte mi brazo que chille del dolor.

— Camina y cállate, hoy te vamos a mostrar lo que tú y tu familia ocasionaron— ¿Que fue aquello tan grave que pudo hacer  mi familia? — Y más te vale que pueda solucionarlo

Me hicieron adentrarme a lo que parecía ser una especie de aldea o un pequeño pueblo

¿Que tan lejos estoy de mi casa?

Jamás supe que había un pueblo tan pequeño cerca, mientras caminaba no pude evitar pensar en que si me pasa algo nadie se va a dar cuenta que desapareci, quizás mi secretaria pero nadie más, tal vez maximiliano cuando busque desesperadamente a su hijo.

Su hijo...

Lo siento bebé, creo que al final si naces o no, no va hacer mi decisión.

Mientras caminaba podía darme cuenta que las personas comenzaban a salir, vestían muy casual ¿Aquí vivían? Todos me miraban con odio

— Ayuda por favor, me secuestraron — Les dije a los presente sin embargo ellos parecían no interesarles lo que yo les estaba diciendo — Por favor — Susurre mirándolos rogando que me ayudarán, una carcajadas hizo que mirara al hombre que me hacía caminar

— ¿crees que ellos te van a ayudar? Ellos te odian tanto como yo— Me dijo muy seguro de sus palabras — Eres la escoria que nos maldijo

¿Que?

Yo?!

No!!

Definitivamente se equivocaron de personas, estaba por decirle que yo no hice eso cuando escuché una voz gruesa y conocida.

— Más te vale que la sueltes — Me giré cuando él hombre que me tenía lo hizo, ahí estaba el papá de mi bebé, ahí estaba max.

Oh por Dios!!

El iba a sacarme de aquí ¿No?

Cómo sabía dónde estaba? No es momento de eso Laila, lo importante es que te saquen de aquí ya tendrás tiempo para hacer preguntas

— Al fin encontramos la descendencia de Roberto ¿Por qué debería soltarla?— Preguntó el hombre junto a mi con una pequeña sonrisa en su rostro en modo de burla hacia maximiliano.

Entonces era por mi abuelo

¿Por el yo estaba aquí?

¿Que es lo que había hecho mi abuelo?

Maximiliano parecía estar sorprendido ante las palabras de él hombre junto a mi, eso quería decir que el también sabía de lo que estaban hablando, el sabía que era eso que había hecho mi abuelo

Quería saber de qué era lo que me estaban acusando pero no estaba segura de hablar.

— ¿De que hablas?— Preguntó maximiliano— Creo que te equivocaste de persona ella es Laila, ella es loba como nosotros

Loba? Yo?! Sigue el con eso?!

Este no es el momento indicado para seguir con su estupideces de lobos!!!

Este es un maldito momento serio!!

Me querían matar y tortura!!

— ¿No me digas qué no sabes alpha Maximiliano? — pregunto aún con aquella sonrisa ¿Alpha? Entiendo por eso que este hombre junto a mi estaba igual de loco que maximiliano, de no ser así no le encuentro otra explicación —no sabías que la mujer por la que viniste a abogar es la descendientes de Roberto, ella y su familia nos maldijo y será ella quien nos de la solución para nuestros problemas

— Eso es cierto Laila tu abuelo es Roberto Carter?— Preguntó asentí sabiendo que era absurdo mentir, esperaba que ser sincera no me jugará en contra, esperaba que el siguiera insistiendo para sacarle de aquí— Entonces eso solo quiere decir que podemos usarla para revertir lo que el nos hizo — entonces si lo sabe!! — le dijo, me sentía como estúpida, escuchar que hablaban tantas cosas que para mí solo parecían incoherencias, por más que intentaba buscarle lógica a sus palabras —Puedo ayudar, podemos encontrar a las personas indicadas que nos ayuden para eso— Aseguro.

— No!! Ella se queda aquí!— Gritó — Ella es MIA porque YO la encontré, YO la caze y ella no sale de MI manada

— Alpha Esteban — Alpha? Otra vez eso de alpha? No sé supone que el era el supuesto alpha! Entonces hay más de un Alpha?— No puede quedarse aquí porque Laila está embarazada y lleva en su vientre a mi cachorro, lo estoy diciendo solo para que sepas, no comience algo que no vas a poder terminar Esteban

— La embarazaste?! — Exclamó, parecía sorprendido ante aquella declaración, pero su rostro cambio derrepente como si hubiese encontrado la solución a todos sus problemas — Estás loco si crees que te la voy a dejar, no me interesan tus amenazas ella no sale de aquí y mucho menos ese maldito bastardo dentro de su vientre, ambos van a morir— Y solo eso basto para que el hombre frente a mí dejara de ser un hombre para convertirse en un lobo enorme, grite asusta e intenté correr lejos buscando protegerme a mi y a mi bebé sin embargo el agarre en mi brazo me detuvo.

Grite asustada, el lobo me miró y cuando él hombre se distrajo el lobo le arranco la cabeza grite cuando la sangre me salpicó, el lobo intentó acercarse a mí pero yo comencé a correr con el corazón latiendo a mil por hora.

tenía que salir de aquí ahora!!

iban a matarme!!

Ya no había humanos por ninguno lado todos parecían ser lobos, dos lobos marrones se posicionaron frente a mí, retrocedi con la intensión de correr al otro lado pero habían otros dos lobos, estaba segura que saltarían encima de mi y me matarían este sería mi fin

Sigue leyendo en Buenovela
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Escanea el código para leer en la APP