CONTRATO; INFIERNO TENTADOR CAPÍTULO 96; Derrotado —HARRISON——¿Qué acaban de decir? Julio y Claudia no me responden, solo están callados, mirándome. —Julio, te pregunté muchas veces sobre quién me había disparado y me decías que todavía no sabías quién era, pero me mentiste —mascullo con enojo—. Y tú, Claudia, lo sabías.—Cálmate, por favor, yo fui la que le pedí que no te dijera nada, no quería que sufrieras.—¡Cómo demonios no voy a sufrir sabiendo que mi propio padre me quiso matar! —le doy un golpe a la pared—. Los dos tenían que decirme la verdad, no tenían derecho a ocultármelo. —Si te vas a enojar que sea conmigo, yo fui el primero en saber la verdad y me quedé callado. Lo hice porque sabía que te iba a doler.—Es mi problema si me duele o no, tú no sabes de dolor porque creciste en una familia perfecta, yo no, yo tuve que vivir con un hombre que me maltrataba cada vez que podía —intento hacerme el fuerte, pero mis ojos se llenan de lágrimas—. Fui yo quien creció con un p
CONTRATO; INFIERNO TENTADOR CAPÍTULO 97; Palabras sinceras—HARRISON—En medio de mi enojo no medí lo que hacía, pero es que nunca pensé que Julio iba a llegar, y menos en el preciso momento donde se escapó la bala. Todavía estoy enojado con él, pero no podía permitir que le pasara algo. Me asusté en cuanto lo vi tan débil por la sangre que había perdido, lo bueno fue que Maya tiene conocimientos sobre medicina y vino a ayudarnos, le pudo sacar la bala y le dio medicamentos para que pudiera dormir. Estaba tan nervioso que me sudaba todo el cuerpo y Claudia tuvo que tomarse un calmante para dormir porque al ver la sangre se alteró. —¿Te piensas quedar toda la tarde con él? No va a despertar hasta mañana —Maya se me acerca. Estoy cuidando a Julio.—No quiero dejarlo solo, aunque esté enojado con él, ha estado para mí siempre, no puedo dejarlo ahora.Se sienta a mi lado.—¿Qué sucedió? —suaviza su voz.No quiero recordar nada de lo que está pasando, siento que cada vez que lo recuerdo
CONTRATO; INFIERNO TENTADOR CAPÍTULO 98; Frustración —Especial Julio—Me estoy quedando dormido cuando siento que se sientan en la cama, abro un ojo para ver quién es, sonrío viendo que es Maya. Es tan bonita.—¿Cómo te sientes? —Como si me hubieran herido con una bala —bromeo para que se ría y solo hace mala cara, pero sé que quiere reírse—. Siento fastidio en la herida.—Es normal, la molestia irá pasando con los días.—Gracias por ayudarme, y por quedarte, Harrison me dijo que estabas en la habitación del lado.—No sabe guardar secretos por lo que veo. Nos quedamos callados, la veo jugar con sus manos, cuando está nerviosa siempre hace eso, suelo observarla cuando está distraída. Es muy guapa.—¿Qué tanto me miras? Me pones nerviosa —se levanta para tener unos centímetros de distancia—. Mejor me voy, ya vi que estás bien.—No, quédate. ¿Quieres que sigamos como hasta ahora o que seamos una pareja de verdad? Le pregunto sin rodeos y se tensa.—Prefiero como hasta ahora, cuando
CONTRATO; INFIERNO TENTADOR CAPÍTULO 99; Amigos —CLAUDIA—Es fastidioso tener que caminar con un dolor en el vientre, he pasado días sintiéndome incómoda y he sangrado, fui al ginecólogo porque me preocupé, pero solo me dijo que debo estar en reposo y me mandó unos medicamentos. He tenido tantas impresiones estos días que tal vez ha sido lo que causó mi sangrado.Harrison todavía no me habla, sigue enojado conmigo y no me habla a menos que sea necesario. Odio que esté enojado conmigo, quiero estar con él y es incómodo verle su mala cara las poquitas veces que está. Quise contarle que ya han empezado a construir mi proyecto de la maqueta y el edificio que será el más grande de la ciudad, pero me detuve, lo veo tan ocupado con cosas de la empresa que no quise ser un estorbo.—Señorita, sus amigos han llegado, ¿qué quiere que les diga? —me comunica la señora de la cocina.—Ya salgo. Gracias.Me recojo el cabello y me miro en el espejo, ya se me ha empezado a notar la barriga, en unos m
CONTRATO; INFIERNO TENTADOR CAPÍTULO 100; Aprende a jugar —CLAUDIA——Harrison —lo muevo. Ayer vino muy tarde y se acostó a dormir enseguida. Mañana sale de la ciudad para ver lo de los almacenes y quiero que estemos juntos hoy. Lo merecemos—. Cariño.—Mmm, amor —abre sus ojos y sonríe al verme, me lleva hacia él para darme un abrazo y un beso en la frente—. Me encanta despertar y verte, y si estás en pijama mejor. Es sexy.—No puedo estar sexy, ya se me nota la barriga, en unos meses estaré más gorda —me quejo—. Te hice desayuno, levántate, lávate los dientes y bajas.—¿Tú eres el postre? Dime que sí para levantarme más feliz.Suelto una risita. —Harrison, me vas a excitar, y me cumples.Con una sonrisa pone su mano en mi pierna y la empieza a subir, la detiene antes de llegar a los bordes de mi short de pijama. Me da un pequeño beso en los labios y se levanta.—Iré a lavarme los dientes.—¡No seas cruel, para qué me provocas! —Date un bañito de agua fría, se te pasará —se ríe de m
CONTRATO; INFIERNO TENTADORCAPÍTULO 101; ¿Se conocen?—CLAUDIA—La sensación de desear a alguien es algo que no podemos controlar, es como si nuestras hormonas jugaran con cada parte de nuestro cuerpo y como si todo se intensificara. Podría buscar un montón de palabras para describir lo que uno siente cuando la persona que deseamos nos toca, sin embargo, mi cuerpo sabe que todo lo que siento es placer. Tal vez, para algunas personas es exagerado el hecho de que con ver podemos excitarnos, para otras es una realidad, porque lo siente. Por ejemplo, yo, siempre deseo a Harrison, basta con verlo para que mi piel, mi corazón y todo mi cuerpo sepan que está cerca. Al comienzo no quería aceptar lo que me causa, pero ahora es lo que menos me importa. Acabamos de hacerlo, y no cabe duda que nadie podrá reemplazarlo, sus caricias son tatuajes en mi piel. Sus dedos recorren mi abdomen mientras yo lo miro con una sonrisa.—Gracias —dejo salir las palabras antes de que reaccione.—¿Gracias por
CONTRATO; INFIERNO TENTADOR CAPÍTULO 102; Rubí —HARRISON—Estoy acostumbrado a despertarme temprano, sin embargo, odio los viajes que son tan temprano, siento que todo se hace corriendo y que el tiempo corre más rápido. Debo salir de la ciudad, es mi obligación ir a revisar que los demás almacenes estén funcionando de manera correcta. No quiero dejar a Claudia sola, se la encargué a Maya porque sé que estará pendiente de ella, no se ha sentido bien, y quiero que tenga a alguien que si necesita algo esté para ella.No quiero que se sienta sola en su embarazo y el miedo que tiene se haga más grande, quiero que sienta que estoy para ella, aunque esté lejos. Le prometí que iba a estar en todo el embarazo, y debo cumplir la promesa.—Te voy a extrañar —Claudia pone sus brazos en mi cuello—. Tienes que llamarme cada vez que puedas, por favor. —Solo serán dos días, y te llamaré todo el tiempo. Lo prometo —beso sus labios.—Confío en ti —me abraza—. ¿Sabes que tenemos que hablar sobre lo q
CONTRATO; INFIERNO TENTADOR CAPÍTULO 103; Mi venganza —HARRISON—Un brazo en mi cara me hace abrir los ojos, reacciono saliendo de la cama cuando veo que Rubí está en la cama, ella está en ropa interior. Me miro y solo llevo mi pantalón, ni siquiera la camisa. ¿Qué hice? No recuerdo nada, solo que ayer los amigos de Rubí empezaron a repartir ron y era muy fuerte, al rato de probarlo ya me sentía borracho. «Dios, no pude fallarle a Claudia».Me empiezo a cambiar con rapidez y rubí se levanta.—¿Huyendo? —¿Qué pasó anoche? No recuerdo nada, no sé por qué estábamos en la misma cama y tú estás en ropa interior.Se sienta en la cama y se recoge el cabello.—Cálmate, no pasó nada entre nosotros. Estoy en ropa interior porque hacía calor, así que me bañé y me dormí en poca ropa. Y tú estás sin la camisa porque te la quité, estabas sudando.—¡Arg! Debías llevarme a mi habitación.—No sé cuál es, por eso te traje a la mía.Me pongo mis zapatos.—Tienes cara de horror, estabas borracho y te