CONTRATO; INFIERNO TENTADOR

CAPÍTULO 35; Risas

—HARRISON—

Estiro mi cuerpo y me muevo con rapidez cuando veo que Claudia no está, ayer nos quedamos hablando hasta tarde y nos quedamos a dormir en la torre, me levanto para ver dónde está y la veo en la playa, su vestido blanco se mueve demasiado rápido por la brisa y ella parece concentrada en el mar.

Es la primera vez que nos quedamos a dormir en el mismo espacio y ahora no sé si siempre va a ser así o al regresar al departamento ella seguirá durmiendo en su habitación y yo en la mía. El día que estaba borracha no cuenta, ella ni siquiera se acuerda de todo lo que me dijo.

Quiero que esto funcione, quiero que me permita quedarme en su vida, pero todo es tan incierto con Claudia que no sé lo que puede pasar. No sé cómo vamos a terminar, los dos somos un caos, podemos herirnos.

Bajo las escaleras y me acerco a ella, me mira con una diminuta sonrisa y hago lo mismo. «Esta chica me encanta».

—Despertaste, no quise llamarte cuando te vi