Ángel
Siento su cuerpo a mi lado… mi Mae. La abrazo fuerte, no quiero dejarla ir… nunca, ella tiene que ser mía siempre.
—Ángel, me aplastas —dice pegada a mi cuello.
—Lo siento, me gusta sentirte —beso su frente, sus pequeños dedos recorren mi pecho. Me encanta tenerla para mí, desnuda y…
—En 10 minutos tenemos que estar en el gimnasio —dice Daniel detrás de la puerta de la habitación.
—Va —digo aún recostado y con Mae en mi regazo.
—Tu padre se molestará —dice sentándose en el colchón, sus abundantes senos se contornean con sus leves movimientos.
—Siempre se molesta… quiero estar contigo de nuevo —Mae vuelve su mirada hacia mi y suelta una sonrisa traviesa.
—Ya vístete —se pone de pie y miro como busca ropa en su armario. Cubre sus pechos con un top deportivo y pasa sus bragas hábilmente por sus piernas. Es cuando se gira un poco y toma mi camisa del suelo y la lanza en mi dirección aterrizando en mi rostro—.
MaeColoco los jeans en una pila de ropa y agradezco que ya haya terminado la cena para poder dedicarme a separar la ropa de invierno y verano, mis cremas de cuerpo y rostro, los libros y demás cosas para solamente ubicarlos en las cajas que Ángel traerá en poco tiempo. De hecho ya deberían de estar aquí, hace tiempo que terminaron el entrenamiento.Como invocándolos el seguro se libera y escucho a Daniel relatar su pelea.—Pero es lento, bueno… yo soy superior claramente —llega hasta donde estoy y me besa la frente para colocar su mochila y un par de tapaderas grandes—. Hola mamá, ¿necesitas ayuda?—Claramente, ¿han traído las…? —Ángel aparece con una pila de cajas de plástico.—No sé si sean suficientes —asiento divertida—No tenemos tanto… —las coloca en el suelo y v
MaeDespués del único entrenamiento del día hemos pasado a llevar nuestras cosas a la nueva casa. Me siento algo extraña por mudarme así y le sorprendió bastante al señor John que hayamos liquidado, pero que puedo decir, todo ha sido sumamente sorprendente desde que Ángel ha llegado a mi vida.Daniel y Ángel con ayuda de Lois y Martin han logrado transportar todas y cada una de nuestras cosas y colocarlas en la casa para desempacar. La odisea comenzó a la hora de desempacar y acomodar, la verdad es que apenas conseguí desempacar los utensilios de cocina para poder preparar la cena, y esto me ha llevado bastante tiempo, pero tuve mi recompensa.Los padres, Lucy y la abuela de Ángel, Maya han llegaron puntuales, se mostraron muy felices de tenernos aquí y me han hecho sentirme muy cómoda en el circulo. Uno siempre piensa que al ser madre soltera bien pueden d
MaeLas noches con Ángel resultan alucinantes, sentir el calor que emana su cuerpo me lleva al límite cada vez que estamos juntos. Los días en su compañía me hacen cada vez más feliz y me siento completa al lado de mis dos hombres.Por otro lado he experimentado cambios en mi, siento más confianza y apenas puedo creer todo eso que me hace sentir, no siento vergüenza al estar frente a él, me he vuelto mucho más experimentada en mi desempeño en la cama. Además la vida en esta casa cada vez me gusta más, hablo de que en realidad me siento realmente cómoda en este lugar, lo he vuelto mi casa.He colocado algunos de los adornos que tenía en el departamento, el jarrón de mamá, fruteros, cuadros, además Ángel me ha acompañado al centro comercial para seleccionar pinturas y un par de portarretratos para colgar en la pared con
ÁngelEl chico es realmente bueno, lo miro relatar de nuevo los movimientos que ha llevado a cabo en la pelea de hace unas horas mientras cenamos la deliciosa comida que Mae ha preparado para nosotros.Me siento entusiasmado al verlo tan entusiasmado, eso es lo que necesitamos, chicos con hambre y ganas de salir adelante, que den todo de si en el octágono y empujarlos, solo guiarlos para hacerlos crecer.—El es bueno, pero yo soy más rápido, y hace tiempo que quería pelear con él —dice y yo asiento.—Si, era el más aproximado a tu peso —digo con la boca llena y miro a Mae que esta concentrada en el florero frente a nosotros, no ha comido casi nada solamente se limita a sonreír y tomar largos suspiros.—Lo sé y me han dicho que puedo hacer retos ahora, ¿crees que sea bueno pelear en dos meses? —asiento—Jr., se encargara de
Mae He decidido invitar a comer a Stella, Maya y Lucy para anunciar que comenzaremos con los preparativos de la boda, me refiero a que, quiero que sea algo discreto aquí en casa, solo nosotros, pero Lucy me ha hecho prometer que iría conmigo a la selección del vestido.Estoy preparando una crema de cilantro con una pechuga de pollo en salsa de champiñones, pure de papa y agua de pepino con limón. Esta todo casi listo así que me libero del delantal y es cuando escucho como llaman a la entrada. Camino a paso rápido para abrir y encontrarme con las tres mujeres y sus bonitas sonrisas, nos saludamos con mucho gusto y las invito a pasar.—Nos tienes con los pelos de punta —dice Maya—¿Estás embarazada? —pregunta Lucy y yo por un momento me quedo pensando pero niego sonriendo.—No, es que les quería pedir su ayuda para iniciar los preparativos de
ÁngelMae se ve bastante feliz con las preparaciones de la boda, últimamente la he notado muy sensible, pero supongo que debe de ser todo este momento que estamos viviendo.Daniel y yo hemos seguido entrenando a pesar de que el campamento terminó. La temporada está a punto de comenzar y he hablado con Jr. Para que por lo menos mis peleas solo sean en California y en Las Vegas, no quiero volver a estar viajando para las presentaciones ni dejar a Mae sola, mucho menos después de nuestra boda.Golpeo una y otra vez el saco que está frente a mí, esto me ayuda a manejar el estrés de todo esto, del inicio de mi vida con Mae, de el inicio de temporada y del inicio de Daniel como profesional, no puedo negar que me pone un tanto nervioso porque he vivido muchas cosas en este mundo y eso que tuve la escuela de papá, y hay cosas que Daniel no quiero que viva.Sigo golpeando arriba, abajo. Falta
StellaEl día de la boda ha llegado. Tengo el estomago hecho un nudo. Stella va y viene por la casa adentrando a la gente que va a decorar el espacio, estoy sentada en el comedor mientras como un yogurt con fruta. Miro como van a y vienen y me alegro haber recibido ayuda de Stella y de Maya.—Aquí estás —dice Lucy mientras toma mi mano poniéndome de pie y tomo el tazón de yogurt.—¿Qué pasa? —digo mientras subo las escaleras a toda prisa.—Hora de comenzar a peinarte —entramos a uno de las habitaciones que están desocupadas para darme cuenta de una mujer que dice Lucy que me arreglara para el evento. Comienza a arreglar mi cabello, por lo que me parecen horas, estoy a punto de quedarme dormida.—Mae —llama Ángel y es detenido por su madre.—Hijo, no puedes verla hasta la boda.—Madre, por favor —nie
ÁngelUn idiota camina de la mano de Lucy, luce una estúpida sonrisa de don juan y me da mala espina de inmediato.—¿Qué? —escucho como mi padre maldice—. ¿Sabías algo de esto Stella?—Yo… solo están saliendo Aaron —me giro en dirección a mi madre—¿En serio, saliendo con un peleador? —lo sé lo puedo oler, el tipo es peleador y lo he visto en varias ocasiones, no es malo pero no resulta alguien sobresaliente. Tiene mala fama, de mujeriego y ahora viene de la mano de mi hermana.—Ángel, solo dale… —miro a Mae atónito.—¿Qué?, ¿Tu sabías de esto? —mi furia crece—. No puede ser.Lucy se pone frente a nosotros y el idiota nos mira sumamente tranquilo. Aprovecha esa tranquilidad porque partiré tu rostro de niño bonito.