Jiang Sese no sabía qué le pasaba. Cada vez que se calmaba, ella esperaba que pudiera mantener su distancia de Jin Fengchen. Sin embargo, su corazón daba un vuelco cada vez que lo veía.

¿Se había enamorado realmente de él?

Jiang Sese se quedó pensando en eso por un tiempo antes de quedarse dormida.

…

Al día siguiente, los tres estaban sentados alrededor de la mesa para desayunar.

Las escenas de anoche todavía estaban en la mente de Jiang Sese. Ella estaba un poco avergonzada y no podía evitar mirar a Jin Fengchen.

Sin embargo, el hombre no parecía que le hubiera pasado nada, y comía su comida elegantemente como siempre.

Jiang Sese no podía evitar maldecirse por ser tan inútil. “Fue solo un beso. ¿Por qué estás pensando tanto en él?”.

Ella había tomado mucho la última vez y esta vez también.

Era el fin de semana. Después del desayuno, Xiaobao no tenía que ir a clases. En cambio, Jiang Sese todavía tenía asuntos del trabajo que atender, así que Jin Fengchen la llevó de r