"Todo el mundo dice que Jin Fengchen es muy formidable, pero no creo que sea necesariamente así. ¿No lo tengo ahora en la palma de mi mano?".

En cuanto terminó de hablar, Jiang Nuannuan soltó una risa ligeramente loca.

"¿Qué quieres decir?". Jiang Sese levantó de repente la cabeza. Sus instintos le decían que había un significado oculto en estas palabras.

Jiang Sese cuestionó: "Jiang Nuannuan, ¿qué le hiciste a Fengchen?".

"No hace falta que sepas lo que le he hecho. Jiang Sese, ¡muérete!".

Estiró bruscamente su mano y apretó el cuello de Jiang Sese. La siniestra mirada de sus ojos era aterradora.

Mientras miraba a Jiang Sese luchando, esbozó una sonrisa cruel.

¡Por fin podría acabar con esta mujer a la que había odiado durante mucho tiempo!

¡Había esperado mucho tiempo ese día!

Mientras Jiang Sese estuviera muerta, ella podría obtener todo lo que deseaba.

Hombres, dinero y poder, todo estaría y debería estar en sus manos. En las de Jiang Nuannuan.

Al pensar en esto, Jiang N