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De vuelta a la normalidad
El sol entraba por la ventana y Agatha estaba dormida en la cama, desnuda solo cubierta por una sabana que se enrollaba en sus piernas hasta su espalda baja, su pelo rizado caía por su espalda cubriendo la mitad, su rostro estaba enterrado en una almohada y su mano abrazada a la misma, sus respiraciones eras suaves, signo de un profundo sueño, Azzael estaba despierto sentado contra el respaldar mirándola fijamente con unas sonrisa en su rostro y sus ojos llenos de amor por ella, corrió un rizo que colgaba sobre sus ojos, Agatha se quejó y movió un poco, señal que su sueño se estaba haciendo más ligero, abrió sus ojos pestañando y sus ojos se encontraron con los de Azzael, ella sonrió al verlo – Hola amor – susurróHola princesa, como dormisteMmm, excelente – Agatha se estiró y se volvió a Azzael se sentó sobre su regazo abrazando su cuello quedando pegada a él, acurrucada contra su pecho, azzael tomó la frazada y cubrió su espalda – y tú?Bien también – Azzael sonrió mientras sus man
Has hecho tanto por nosotros, esto es lo menos que puedo hacer por tí
Mientras tanto en el infierno Lucifer está en su oficina buscando en los antiguos escritos y se abre la puerta –Miguel, que bueno que estás aquíMe llamasteSi, necesito mostrarte algo – Lucifer se pone de pie y caminan hacia un sector del infierno, es privado, solo Lucifer puede estar ahí, nadie que no esté autorizado se atreve a entrar, él llega a una puerta y la abre, entran y es una casa, con puertas, ventanas enormes y una ilusión de paisaje y luz del sol, fuera se vé pasto y una picina, además de flores y árboles, Miguel mira asombrado la belleza del lugar.Que es esto hermano, jamás pensé que podría haber algo tan hermoso en el infierno. - Lucider sonrió y miró al horizonte - Miguel, tú me ayudaste demasiado, me has apoyado, me ayudaste a traer a la vida a Agatha, me ayudaste a encontrar a mi niña, me ayudaste a recuperar su memoria, lo mínimo que puedo hacer es…. – De la habitación principal sale Lilith con su pelo mojado mirando impresionada a los dos, bajando la cabeza en
Lilith, yo te amo.
Miguel intenta buscar las palabras para poder asercarse a Ella, pero su frialdad lo cohiben, su voz tiembla mientras la mira.Como has estado - Lilith lo mira fría y distante - Como crees, encarcelada en las mazmorras, estuve de maravillas, lo disfruté mucho – Lilith le dice a Miguel, sarcásticamente –Lilith, yo, yo …. – Miguel cae de rodillas ante ella destrozado, Lilith lo mira con unos ojos grandes, jamás esperó esto de Miguel, del arcángel Miguel, el general de las huestes de dios de rodillas ante ella.¿Qué haces? ¡¡¡Párate!!!Lilith, perdón, tienes razón, fui un cobarde, solo obedecí órdenes, dejándote sola, abandonándote, era tu compañero, debí protegerte, debí irme contigo, jamás debí dejarte sola, jamás debí darte la espalda, Lilith, perdóname por ser una mala excusa de compañero, yo entiendo que jamás me perdones, pero solo quiero decirte que desde que te fuiste no ha pasado un día sin que te extrañe, a pesar de ser respondona, agresiva, rebelde , a pesar de jamás dejar qu
Mily en peligro
Amanece y yo estoy enredada en los brazos de Azzael, me abraza como si temiera que desaparecería de su lado en cualquier momento, sus piernas están entrelazadas conmigo y su brazo me aprieta contra su pecho, sonrío y miro su rostro, tan hermoso como siempre, sus labios carnosos que me invitan a reclamarlos, sus mandíbula cincelada, sus cabello largo color miel que cae aleonado contra su rostro, su rostro perfecto como un dios griego, sus pectorales musculosos y su abdomen marcado que me llamaban a pasar mis labios por ellos, vuelvo a mirar su rostro y una sonrisa aparece en sus labios mientras sus ojos aún están cerrados.¿Sabes que puedo sentir como me miras cierto? – Azzael me pregunta con su voz profunda que me hace erizar la piel, yo sonrío y paso mi dedo desde su ceja bordeando su rostro hasta su mentón –Me podrías culpar, eres tan guapo y estas desnudo, en mi cama, invitando a devorarte y saciarme con tu cuerpo – Azzael abre sus ojos y me mira con sus ojos azules profundos y un
La llegada de Aníbal
Es de mañana, Agatha viste una camisa y una falda negra, tacones y un chal negro sobre su espalda, Azzael usa una camisa negra y un pantalón de tela gris oscuro, sentados en la cocina tomando desayuno con Amelia.Mily aun no se levanta? – Pregunta Agatha.No, ella aun no ha despertado, como el funeral es en una hora quiero dejarla dormir un poco más.Hola…Agatha se gira y es Mily vestida con una calza negra, polera negra y una chaqueta de cuero, sus ojos están hinchados de tanto llorar.Como estas pequeña – Le pregunta Azzael.Triste, siento que, si voy a ese funeral, es aceptar que mi amiga no volverá jamás. Agatha se pone de pie y la abraza.Amor, tranquila, es algo que debes aceptar, tu amiga no estará físicamente contigo, pero en algún momento se juntarán otra vez, yo me quedaré un tiempo aquí para estar contigo ¿ok? – Mily asiente abrazándose a su hermana.Salen al cementerio, todos lloran, la perdida de una pequeña tan joven rompe el corazón de los adultos, la madre llora a gri
Me siento culpable
ily y Aníbal caminan por la playa, Mily va callada en sus pensamientos, Aníbal la abraza por detrás.Que es lo que te tiene tan callada mi pequeño lirio.No sé, me siento culpable por la muerte de Selene, ella era mi amiga desde jardín de niños, y no pude hacer nada, quizás debí insistir, ir a verla, acompañarla, lo último que supe es que estaba viendo al sicólogo de la preparatoria, pero … Mily empieza a dejar caer sus lágrimas… ya no la veré más, ya no habrá pijamadas para Halloween, ya no habrá viajes a la playa ni fogatas en luna llena, Bal, tengo pena.Sssshhtt – Aníbal la abraza contra su pecho – Mi pequeña, tú no podías hacer más de lo que hiciste, hablabas con ella, la acompañabas, tu puedes hacer todo lo posible por una persona, pero cuando ella no quiere dejarse ayudar, no hay nada que puedas hacer, mi hermoso lirio, no quiero que estés tan triste, sí, perdiste una amiga, pero no quiero que cargues con esa culpa, porque no es tu culpa, hey mírame – Aníbal toma su barbilla y
Él me cortará la cabeza, por favor me llevas rosas rojas.
Llegan a la casa, Agatha está abrazada con Azzael, al lado de la cocina de leña, Amelia esta sentada frente a ellos y el padre al lado de Amelia, Mily llega con Aníbal quien traen pasteles para tomar onces.Holaaaa, llegamos! – Mily sonríe saludando – Bal trajo pastelitos para tomar onces.Bal? – Pregunta Azzael levantando una ceja.Siii, Bal, asi le digo de cariño ¿algún problema cuñado? – Mily se cruza de brazos mientras le responde.No, para nada, tranquila pequeño torbellino.A ja, Papi Bal necesita hablar contigo. – Aníbal se tensa y se pone rígido, su cara se pone roja y sus manos empiezan a transpirar.Uuuuuhhhh – Azzael sonríe mientras molesta a Aníbal, Agatha le da un codazoCórtala – Azzael le susurra – Déjame disfrutarlo.Bueno muchacho, al mal paso darle prisa, vamos. – El padre de Agatha se pone de pie y camina al campo, y Aníbal lo sigue, Azzael grita¡¡Suegro!! ¡¡Si quiere el hacha me avisa yo se la llevo!!¡¡Tienes que estar atento te haré la seña!! – Le responde mi pa
Esto viene de Familia, sé lo que sientes.
Han pasado dos días, Mily se ve cada vez mejor después de la pérdida de Selene, hoy la fue a dejar Aníbal a su preparatoria, me imagino que debe haber llamado mucho la atención, él siempre ha sido guapo. Me siento al lado de mi madre con ese olor a comida preparada a leña, mi taza de leche con café y mi pedacito de kuchen está en la mesa, pero no veo a mi Azzael por ningún sitio.Mami ¿y Alejandro?Salió con tu padre muy temprano, la verdad es que no tuvo elección tu padre prácticamente lo arrastró a la camioneta iban por madera para construir el pasillo entre la pieza de Mily y la casa, estamos en verano y no ha llovido mucho, pero viene el invierno y quiere dejar todo listo.Ah entiendo. – Como mi desayuno y veo llegar a Aníbal caminando - Hola, ¿cómo va todo? Ven siéntate conmigo a tomar desayuno.Hola Aggy, gracias, bueno no muy bien, Amelia estaba preocupada porque otra de sus amigas ha presentado síntomas de depresión como Selene, están viendo al sicólogo, tiene miedo de que pa
Último capítulo