En el infierno Lucifer llegaba con Mey –

Mey, vamos a tu habitación, necesito ir con Adam.

¿Puedo ir? – Lucifer sonrió y la abrazó –

¿Quieres ir?

Quiero acompañarte y ayudarte, en lo que pueda. – Lucifer la sostuvo de su cintura y se hundió en su cuello dejando un beso luego reclamó sus labios –

Está bien, lo que ordene mi diosa, vamos. – Lucifer llegó donde Adam.

Señor…

Hola Adam, tengo buenas noticias.

¿Podrá ayudarme?

Así es, ven vamos a tu cabaña – Los tres entraron a la cabaña de Adam – vamos a tu cama, necesito que te recuestes – Adam obedeció y Lucifer pasó sus manos por sobre su cuerpo, de su cabeza sacó algo, de su corazón otra cosa, en sus manos empezaron a resplandecer con una luz cegadora, poco a poco, la luz tomó forma humana, Lucifer estaba totalmente concentrado hasta que dejó descansar la luz dentro del cuerpo de Adam, el cual empezó a resplandecer, Lucifer empezó a entregar su energía a Adam – Adam repite conmigo… yo Adam acepto a dios Samael como mi único padre y crea