El trayecto a la mansión fue incómodo; al entrar intenté dirigirme a mi habitación. Pero el sonido de la voz de mi padre me detuvo, me giré en mis talones intrigada por lo que iba a decir. – Las reglas en la casa han cambiado para ti, desde mañana asistirás a la escuela y volverás a la casa, no tienes permitido salir sin mi explícita aprobación y además a partir de ahora tendrás un grupo de mi confianza para acompañarte, cuando las clases termines, decidiré que haré contigo, mientras tanto concéntrate únicamente en tus estudios. – Quería manifestar mi disgusto, pero estaba segura que no cambiaría mi situación. Al día siguiente desperté con grandes ojeras, fue imposible calmar mi mente esa noche, los recuerdos llegaban como tsunamis de emociones que no sabía controlar. Después de mi rutina matutina, salí de la habitación y me encontré a 3 Sigmas que pertenecían a la custodia de mi padre, esperándome en el pasillo. Esto ya se había salido de control, no me había tomado sus palabras ens
Me acerqué de forma tímida y le pregunté – Hola, ¿quién eres tú?, [agarrando el dobladillo del buzo oversizer], perdón por las molestias, te prometo que te lo compensaré. Se acercó a ella, la levantó como sino pesara y la colocó sobre la encimera de la cocina. Mirandola a los ojos le dijo – Bonita, no tengas miedo soy Vladímir. No tienes nada que compensar, no fue ninguna molestia traerte aquí- Le dijo mientras untaba una tostada con mermelada de arándanos. Luna preguntó que había pasado esa noche, se sentía tan avergonzada. El burlándose le contestó - no te preocupes, por mi parte mantuve tu pureza- [guiñando un ojo]. Ella estaba sorprendida por lo irreverente de este joven, como se atrevía hablarle con tal confianza si no la conocía. Él sonrió y dijo -solo estoy jugando, te vez muy tensa, está bien prometo que me portaré bien, pero quiero verte sonreír-. Sinceramente tiene un aura tan calmada y relajada que me hace sentir tan cómoda. – bueno, en realidad, no tengo mucho para c
La noche helada era testigo silencioso del destino que me habían impuesto. De pie frente al altar, sentí la mirada de cientos de ojos clavándose en mi. La tela blanca del vestido pesaba como una sentencia. - Jura lealtad a la manada.Mi madre me miró fijamente, su expresión impasible. Todos esperaban mi respuesta. Aunque la sensación del frío seco, hace que mi cuerpo se erice un poco ya que llevo un ceñido vestido de color blanco con detalles bordados con hilos de oro, entre la trama se mezclan pequeñas perlas con un color nacarado, el vestido es lo suficientemente revelador sin llegar a lo vulgar; claro no fue una elección mía, ese vestido que solo de verlo denota el estatus de la familia a la que pertenece este insignificante maniquí; gracias a la Diosa Luna, le otorgo una exquisita figura y una belleza delicada y simple. Horas antes, cuando trataba de encontrar una forma de escapar, mi madre irrumpío en mi habitación. Su vestido impecable, su porte imponente, su mirada helada.
2- Mírame.Luego de una última mira a la imagen que me devolvía el espejo, le pregunte a Hera ¿lista? ella con la seguridad que la caracterizaba lanzo una carcajada y contesto – Nací lista.Hera es completamente lo opuesto a lo que soy, en realidad le molesta mucho la forma en que la mantengo oculta, ella es orgullosa y cada vez que soy agraviada, su voz resuena en mi cabeza incitándome a dejarla tomar el control y dejar en claro a todo este grupo de pusilánimes, que al más pequeño incidente tiene que correr tras las faldas de su amado Alfa Alejandro, quien en realidad manda. Pero a pesar de ser una loba con aura dominante y de muy mal carácter, ella siempre respeta mi lugar y nunca toma el control por si misma.Después de nuestra pequeña conversación con Hera, tomé una bocana de aire y me decidí a bajar las escaleras de mi hogar. Mientras lo hacía pensaba, cuáles serán las consecuencias de la decisión que terminaba de tomar.Nunca creí ser muy importante o que mi presencia podría mod
Como todos los días me desperté cerca al mediodía, aunque no había podido dormir bien esa noche. Mi mente se la paso dando vuelta de con lo pasaría esa noche en el Ritual del Claro de Luna. Sinceramente creo que nadie recuerda quien es la persona que presentara su lobo, pero para mi esa persona es la más importante en mi vida. Voy a contarles un poco de mí, soy Alfa Alejandro, soy el hijo mayor del Alfa Reynaldo líder de la manada “Claro de Luna”. Soy todo lo que se espera de su sucesor fuerte, inteligente y con un ferviente autosacrificio por todos los que pertenecen a mi manada, pero lo que nadie sabe es que el peso de todas expectativas son una carga que en el fondo de mi alma pesan más de lo que me gustaría aceptar. Cuando era pequeño siempre fui muy popular, todos morían por estar cerca porque quien se atrevería a lastimar a un amigo del Alfa Alejandro, sinceramente en lo profundo sabía que ese aprecio y admiración que todos enarbolaban no era más que una mezcla de interés y n
Después de sentir el desprecio de mi padre, decidí hacer lo que mejor me salía, fingir que nada me afectaba y que no tenia sentimiento alguno. Hera estaba disgustada con la situación, se hacia la fuerte, pero ella también quería el reconocimiento de ese hombre lobo. En su conexión empezaron a recordar un recuerdo de cuando por primera vez pudo conocer el mundo exterior. Hasta los 5 años estuve confinada a mi hogar, no me permitían salir de este lugar, mi relación con mis padres era casi nula; mi padre me ignoraba y mi madre solo me miraba con un desprecio que siempre me hizo sospechar que tal vez no sería su hija. Los que se encargaban de cuidarme eran un grupo de viejas Omegas que intentaron hacer lo posible para que no me sienta tan mal las noches que lloraba hasta quedarme dormida en sus regazos, Margarita fue la encargada de criarme era una Omega, pero su personalidad firme y a pesar de su débil estatus en la manada nunca se dejo pisotearse por nadie. Hasta mi padre y el Alfa Rey
5- Consecuencias.Benjamín observaba cada movimiento de su hijita, era un padre que le negaba cualquier tipo de afecto y nunca podía mirar sus ojitos cuando ella insistía en obtener algo de amor. El como Beta del Alfa Reynaldo tenia muy clara su posición, y aunque en el fondo sentía un profundo amor por esa pequeña, solo pocas personas sabían de su verdadero origen, ella fue el fruto de un capricho del destino, la Diosa Luna puede ser tan cruel y misericordiosa a la vez.Recuerdo de Benjamín antes del nacimiento de Luna: Hace 6 años mi vida era lo que se creía la perfección, al cumplir 20 años encontré a mi pareja predestinada una Kappa llamada Lisa, todo marchaba según lo establecido en las reglas de la manada, eso fue en el solsticio de verano, aunque me hubiera gustado ser emparejado con alguien de mi mismo estatus social, no pude rechazarla las decisiones de la Diosa tienen siempre un propósito mayor. Viendo a la distancia nuestro vinculo nunca debió ser, las cosas continuaron el
Me encontraba en mi elemento al ser la esposa del Beta de la manada, podía ser el centro de atención del lugar, era una simple reunión de inicio de clases. Aunque no me interesa nada que tenga que ver con esa maldita bastarda, tengo que reconocer que agrada ser incluida en este día donde todas las parejas que dicen ser felices se reúnen para afianzar su lugar como miembros de alto nivel, además últimamente estoy siendo responsable de todos los actos protocolares a los que nuestra Luna no puede asistir, claramente es algo que para mí se da naturalmente, muchos dirían que solo soy una Kappa con suerte, pero quiero dejar en claro algo; a veces tanto a la suerte como el destino se pueden moldear a tus objetivos.Recuerdos de Lisa:Hace 7 años conocí a la persona adecuada y aunque el precio que me toco pagar fue alto, no me arrepiento. Al ser una Kappa es muy difícil acceder por medios propios a la élite de la manada. Cuando cumplí mis 18 años encontré en que uno de los Omegas que trabajab