Capítulo 2

Brasil, Goiânia – 2017.

Cíntia tiene 22 años, no se siente muy diferente a cuando tenía 15. La única diferencia em su vida es que ya no muestra sentimientos por los chicos como solía hacerlo. Hasta el día de hoy sufre “bullying”, se somete a tratamiento com uma psicóloga desde hace cinco años, cinco largos e incansables años.

Desde entonces, trabaja de día y estudia de noche. Ocupa tu tiempo y tu mente tanto como puedes, todo para no recordar ciertos disgustos de tu pasado.

Ella há estado trabajando em la farmacia durante el día desde que tenía 17 años y estudiando farmacia por la noche, todavía escucha comentarios desagradables, pero no tanto como antes.

Le gusta uma compañera de trabajo y nadie lo sabe, no coquetea com nadie desde que tenía 15 años cuando le gustaba Pedro. El chico que ella pensó que era su mayor amor, que em realidad fue su mayor decepción.

Su amiga Julieta siempre le pide que vaya al gimnasio, dice que si va, verá cambios em su cuerpo y podrá hacer um régimen para ganar masa muscular.

__ Bueno, vamos. – insiste el amigo.

__ No sé. Honestamente, no creo que haga nada.

__ Si no lo intentas, no saldrá nada.

__ Incluso puedo ir a hacerlo, pero ahora mi vida está muy ocupada. Ya sabes cómo es fin de año, exámenes y todo.

__ Está bien. Nos reunimos em el gimnasio, el 2 de enero de 2018, sin falta.

__ Como quieras, RS. – responde Cynthia sonriendo.

Si no fuera por tu amiga Julieta, hubiera renunciado a todo por más tiempo, es uma persona tan buena y comprensiva.

Cíntia termina outro año de universidad com todos los honores, sus padres, siempre muy cariñosos y afectuosos, la llevan de viaje.

Por lo general, no le gustan mucho los tours, pero esta vez sí le interesan, ya que van a um hotel rural em Novo Gama, Goiás.

Hay hectáreas y hectáreas de pura belleza y mucha naturaleza.

__ Que bonito. – dice Cíntia, boquiabierta ante el inmenso paisaje verde.

Em la yeguada, ve varias especies de caballos y queda impresionada por los animales de varias especies diferentes, su padre llega suavemente, cortando su razonamiento.

__ ¿Te gustaron los caballos?

A Cíntia le sorprende el comentario de su padre.

__ ¡Ah sí! Papá, son hermosos.

La emoción cuida a su padre, quien trata de disimularla, hace tiempo que no la ve tan feliz.

__ No sabía que te gustaba tanto la naturaleza.

__ Aiiinnn, yo tampoco. Aquí está hermoso padre, esta será la mejor semana de mi vida.

Su padre suspira pensativo.

__ Volveremos em outro momento amor. – Dice el padre cariñoso y abrazando su hombro.

__ Esperaré com ansias la próxima vez, RS.

El padre toma su mano y tira de ella diciendo:

__ Vem, vamos a montar.

__ Tengo miedo padre.

__ Yo te enseño, com el tiempo perderás el miedo.

__ Está bien.

Cíntia confía ciegamente em su padre, para ella tiene los mejores padres del mundo.

Manhattan, Estados Unidos.

Mosha entra em la oficina de Ashtar que está aburrido.

__ ¿Qué cara es esta mi amigo?

__ Esta es mi última semana em Manhattan. – Ashtar habla com uma mirada distante.

__ ¿A dónde vas? ¿Serás agricultor?

__ Casi Eso.

Mosha se sienta emocionado:

__ Dime, ¿qué vas a hacer?

__ Me voy a Brasil.

__ ¿Serio? - pregunta Mosha sorprendida.

__ Compré um hotel rural em Goiás, allí me quedo. Ya no soporto la gran ciudad.

__ Me da igual, me gusta la ciudad y sus ruidos interminables y todo. ¿Y yo? ¿Cómo estoy aquí? - pregunta Mosha sintiéndose excluido.

__ Quédate aquí em mi lugar. Puedes venir a visitarme cuando quieras o quedarte allí, tú eliges.

Mosha se hace el difícil de conseguir, pero Ashtar lo conoce muy bien, sabe que a donde quiera que vaya, su amigo lo acompaña.

__ Lo pensaré um poco, pero me quedaré aquí por ahora.

Hotel Hacienda...

Por la noche, Cíntia ve actuar a los empleados alrededor del fuego, y la gran mesa llena de golosinas, la mayoría de las cosas, son elaboradas com materia prima extraída del cultivo de las tierras.

__ Viviría aquí si pudiera. – Habla soñadora Cynthia.

__ Yo también querida, hermoso lugar. – Dice la madre em tono soñador.

__ Tal vez algún día, RS. – Dice el padre. Hija, ¿puedes estar sola um rato? - Pregunta el padre.

Cíntia asiente y se distrae mirando las presentaciones de los empleados.

Los padres salen a caminar, em el camino el esposo suspira y dice:

__ Cariño, necesito decirte algo muy importante, sobre nuestra hija. Hablé com el psicólogo y nuestra hija mostró um empeoramiento considerable em sus emociones. Él aumentará la dosis del medicamento.

__ ¡Dios mio! Marido esto no es bueno.

La esposa aprieta el brazo de su esposo y nerviosamente no dice nada, solo escucha.

__ Tendremos que pasar más tiempo cerca de ella, la traeré aquí más a menudo, le gustaba mucho este lugar. No permitiré que vuelva a intentar quitarse la vida.

Estela llora al escuchar a su esposo y lo abraza cariñosamente.

__ Se pondrá mejor, tem fe esposa.

Cíntia sonríe ante las payasadas del grupo de baile.

__ JAJAJA...

Por um momento, mira su muñeca. La marca del corte que se hizo para intentar quitarse la vida está ahí para siempre, nunca olvidará, esse día.

Mira al grupo y vuelve a sonreír, hoy sus días, sus días son más placenteros, ya no sufre tanto bullying como antes, su error fue cuando tenía 17 años em el colmo de su depresión.

*Recuerdos del 2012*

La madre termina de cenar y llama a su marido:

__ Amor, llama a Cíntia para almorzar, por favor.

El padre sube las escaleras y, mirando al suelo, encuentra tanta agua extraña, que mira a su alrededor buscándola.

“Viene del baño, muy extraño”. – Él piensa.

Intenta abrir la puerta del baño, está cerrada por dentro, vuelve a intentarlo, ahora sintiendo que algo anda mal, empuja la puerta com fuerza, llamando a su hija.

__Cinthia? ¿Hija? Abrir la puerta.

Intenta abrirlo a la fuerza com su cuerpo:

__Cinthia?

Ahora intenta derribar la puerta y nada, se detiene y toma aire, el agua cambia de color a sus pies, es roja.

__ Oh Dios. ¡No! Cinthia! - Gritos desesperados.

Tira todo su peso sobre la puerta de madera, se lastima el hombro, pero logra romperla, la puerta se estrella contra la pared, se detiene unos segundos viendo a su hija inconsciente em la bañera y com la muñeca sangrando.

__ ¡Estela, llama a la ambulancia!

La cara de la hija está muy pálida, no habrá tiempo para esperar la ambulancia.

Agarra su cuerpo y corre escaleras abajo.

__ ¡Ay Dios mío! - La madre se desespera al ver a su hija desmayada em brazos de su marido.

__ Coge la manta del sofá y cúbrela.

La llevan al hospital...