Eran tiempos difíciles mi madre se encontraba embarazada, mientras mi padre se revolcaba con alguna puta de la ciudad, claro como era un hombre rico al cuál no se le podía negar algun capricho de esas mujeres que solo buscaban quitarle unos cuantos billetes, esa vida que llevaba mi padre era el motivo por el cual nuestra empresa había caído en bancarrota las deudas ahogaban a la familia, era verano un verano muy caloroso mi madre se encontraba en la casa una casa umilde para lo que ella estaba acostumbrada, la servidumbre se había marchado por falta de pagos atrasados

 Ese verano caloroso y lleno de tristeza en mi madre fue el día en el que vine al mundo.... 

Pasaba de media noche mi madre recibió una llamada donde se le había informado que su "Esposo" se encontraba en estado de gravedad en un hospital a causa de iniciar una pelea en el bar que se encontraba con las putas que le quitaban el poco dinero que le quedaba. 

Al llegar al hospital donde mi padre se encontraba, no podía creer que fuera ~Ese hombre no es mi esposo, no puede ser el~ decía mientras veía a un hombre desfigurado sobre una cama de hospital.

Lloraba y gritaba sus gritos y gemidos se podía escuchar en todo el hospital mientras escuchaba como los doctores decían lo perdemos, después de dictar la muerte de mi padre mi madre solo lloraba desconsolada  en el piso si nadie que estuviera a su lado.

 Salió el médico de mi padre para decir lo ya era  evidente mi padre había muerto de un derrame cerebral, por la golpiza que le habían dado por pelear por una mujerzuela, mi madre se quedó sentada en la silla de aquel hospital sin llorar por un momento.

Paso aproximadamente una hora cuando derrepente sintió un fuerte dolor en su cadera, dio un tremendo grito que todos hay presente la voltearon a ver, pensando que era por la perdida de su esposo difunto, al poco rato volvió a sentir ese dolor y solo apretó los dientes soportando el dolor a si estuvo durante 40 minutos cuando sintió la necesidad de ir al baño se levantó de la silla en la que estaba y al estar de pie sintió como el mundo se movía y de repente se encontraba en el piso de rodillas sosteniendo una mano en su abultado vientre y la otra arañando el piso del dolor que sentía, una enfermera la vio y corrio a si ella con una silla de ruedas.

Fue llevada ala sala de partos, donde le decían los doctores y enfermeras que todo iba a estar bien, solo escuchaba como le decían puja, puja, puja más fuerte, una más por favor, una más.

Con sus últimas energías me dio al luz en esa noche en la que su esposo estaba a unos pasillos en una cama con una sábana cubriendo su rostro, no entiendo cómo mi madre pudo sobrevivir con todo eso después de esa noche....

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