Inicio / Romance / Amor y Mafia / Sombra de Muerte
Sombra de Muerte

 

Salomón González, intervino inmediatamente para advertir y así mismo hacerle saber a Rubí que ellos se encontrarían presentes y al pendiente de ella, era más que obvio que la preocupación por lo que podría sucederle a Rubí, era más que inminente.

 

— Si por algún motivo llegarás a sufrir complicaciones, no dudes en pedir auxilio, para eso nos encontramos en este lugar, el hecho que se te encomendará que acabarás con la vida de ese cerdo desgraciado, no quiere decir que tú sola vas a correr todo el riesgo, debes estar muy atenta y no permitir que se te escape y mucho menos que te tome como rehén, recuerda que es muy astuto y no tan fácilmente se ha dejado agarrar en otras ocasiones.

 

— Claro eso lo comprendo muy bien, pero sabes que el mismo David me ha entrenado.

 

 — Ciertamente y contamos con la ventaja que eres una hermosa mujer y que no te conoce, hoy es el día de tu graduación Rubí, hoy es el día que le demostrarás al patrón y al mundo quién es la princesa digna de ser coronada como la reina de la mafia, solo necesitas coronar esta vuelta y ya verás cómo el mundo cae a tus pies después de esto.

 

— ¡Estoy más que preparada para el asunto Salomón! solo hazme el favor de enviarme a la habitación una botella de aguardiente el más fuerte que tengan, porque antes de acabar con su vida necesito arrancarme unos sentimientos pendientes.

 

 

Rubí Echeverri estaba más que preparada para lo que iba acontecer esa noche, el fuego se encendió en su interior ese sentimiento que su alma comenzó a experimentar después de encontrarse con Ariel y afirmando que sería su última experiencia con el hombre del cual se había enamorado, deseaba ahogar su pena y su dolor en unos tragos de alcohol, se imaginó por breves instantes la manera en la que en esa noche podría llegar a morir si todo llega va a resultar en su contra ¡Si de pronto las circunstancias no salieran como se habían planeado a un principio!

 

Rubí estaba completamente segura de lo que iba hacer ella con el chaparro, más no estaba completamente segura de lo que a ella le podría llegar a suceder al momento de intentar acabar con la vida del chaparro, parecía ser que era un arma de dos filos, pero que de igual manera en cualquiera de las dos circunstancias el chaparro no saldría con vida de ese lugar, ya que si todo llegaba a complicarse, Salomón estaba más que al pendiente de cualquier movimiento extraño o imprudente que llegara a suceder.

 

Al instante que Rubí le solicitó la botella de aguardiente para intentar ahogar la pena de su corazón, Salomón intentó persuadirla de no consumir una sola gota de alcohol hasta no acabar el trabajo para que su mente estuviese completamente lucida por el trabajo que debía de hacer y no titubeara por un solo instante el objetivo final de esa noche, la misma tensa y oscura noche que se estaba apoderando del lugar como de La habitación donde se encontraba Ariel, ella sabía expresamente que todos corrían riesgo esa noche, porque no era un personaje cualquiera al que ella tendría que liquidar ese día, sino que sería uno de los más importantes distribuidores de su patrón en ese país del norte.

 

— ¿Pero Rubí cómo vas a beber en estos instantes tienes que estar completamente concentrada, pueda ser que tu juicio se vea un tanto perjudicado al momento que intentes realizar tu trabajo, no sería mejor que bebieras después del trabajo?

 

— ¿Seguramente? lo que sucede es que intento no sólo arrancarme unos sentimientos de mi piel, sino que también intentó tomar un poco de valor, porque la verdad ¡Me urge encontrar un poco de valentía para tener que dejarme acariciar y tocar por ese cerdo asqueroso del chaparro! así que no importa si me tomo uno o dos, pero lo importante es que al menos pruebe una copa de aguardiente para sentirme mejor.

 

—¡Bueno en ese sentido sí tienes razón, lamento mucho que te sientas en esta posición, pero el trabajo es trabajo y no importa lo que se tenga que hacer para alcanzar la gloria! Por favor no falles Rubí, se certera apunta directo a la cabeza y no permitas que se te escape, para evitar complicaciones y no mencionar nada sobre que has estado con Ariel esta noche, sabes de antemano que siempre me has atraído, que siempre me has llenado de insatisfacción por no fijarte en mi persona, pero después de todo siento y considero que en el corazón no se manda, así que si después de esto llegas a salir con vida déjame decirte que te prometo qué voy a intentar en la medida posible renunciar a ti sin importar lo que eso me cueste ¡Es una promesa!

 

Salomón en ese instante, estaba un tanto aturdido por la situación, no queriendo prácticamente demostrar que se sentía preocupado por lo que llegaría a suceder esa noche, pero de alguna manera era casi que evidente que el peligro era muy latente y nadie estaba a salvo ¡Incluso aunque Ariel estuviese por dentro de esa habitación donde aparentemente no tendría por qué ocurrir peligro alguno! aún en esa situación la vida de Ariel corría peligro, pero no había marcha atrás el plan estaba trazado y se estaba acercando el momento en el cual el chaparro ya se encontraba dentro del bar solo que no había ingresado al área ejecutiva del mismo.

 

Regularmente enviaba a todos sus hombres a que revisaran cada uno de los lugares más recónditos del lugar para estar completamente seguro que no corría peligro alguno, era una situación un tanto incómoda la que se estaba viviendo en el lugar, las personas que se encontraban sabían que se trataba de un personaje importante, por lo tanto muchos clientes comenzaron a abandonar el sitio de una manera en la cual el chaparro no se percatara que algunos eran sacados por parte de los guardaespaldas de Salomón, para que nadie ajeno a esa noche saliera herido sin embargo no todos iban a correr con la misma suerte.

 

Al momento que le fue entregada la botella de aguardiente a Rubí en La habitación, se le informó que el chaparro ya estaba presente en el lugar, no mostró ningún tipo de nervios estaba completamente segura de lo que iba a suceder simplemente se despojó de todo aquello que la hacía sentirse mal por haber abandonado al que consideraba que era el amor de su vida, ¡Mas bien el deseo de su vida! pero que de igual manera se trataban de sentimientos profundos.

 

El chaparro tras asegurarse que aparentemente no existía nada raro en el lugar, motivó su ingreso al área ejecutiva del bar, sus escoltas no lo abandonaron por un segundo hasta llevarlo exactamente a la habitación donde Rubí se encontraba esperándolo, mientras caminaba hacia la habitación el dueño del lugar no dejó de mencionar.

 

— ¡Es usted con nosotros nuevamente señor, espero que no haya encontrado algún tipo de inconvenientes en su llegada y que todo esté perfectamente en su visita! La mujer que hoy nos ingresó ya se encuentra en la habitación esperándolo, está como usted la solicitó, no se le ha entregado a nadie más ¡Hasta nos aseguraron que era virgen esa hermosa mujer!

 

— ¿Enserio es virgen? siempre he tenido la curiosidad de estar con una de ellas porque me han contado que son fuego puro, me imagino que al fin se me hizo y esta es mi noche, sólo déjame anunciarte ¿Qué si esa mujer no es virgen como dices? tú serás el primero en mi lista y al parecer me quedaré con un negocio nuevo.

 

— ¡No señor cómo se le ocurre que le voy a estar mintiendo! estoy seguro que la mujer es virgen, además de eso quiero decirle que usted tiene el privilegio de ser el primer hombre en su vida y del primer cliente que estará con ella en este lugar, pero así mismo en base a su fidelidad y así mismo a su preferencia esta noche corre por nuestra cuenta todos los gastos que incurra estar con esta mujer.

 

— ¡De eso me encargo yo, le mostraré lo que es un verdadero hombre y si me gusta hasta pueda que me la lleve! no me importa lo que tenga que pagar si en verdad es virgen y me complace como yo lo quiero.

 

El chaparro se retiró inmediatamente del lugar para llegar hasta La Habitación, Rubí se encontraba por detrás de esa puerta, en lo absoluto estaba nerviosa ella sólo espero el momento en el cual el chaparro atravesará la puerta para cambiar de actitud y comportarse como se le había advertido que debía de hacerlo, para convencer al chaparro que ella era una mujer sumisa y virgen.

Al ingresar a La Habitación con la luz un tanto tenue de colores rojos y marrones, el chaparro exclamó queriéndose escuchar como todo un varón de voz gruesa, pero que más que ser un verdadero hombre no era más que un simple y vagabundo distribuidor de drogas.

 

— ¡Así que tú eres la morenita que me ofrecieron para desvirgar esta noche! no te preocupes aquí te voy a enseñar lo que es estar con un hombre de verdad, sólo tienes que ser muy obediente no quejarte en nada porque hoy aprenderás lo que es el arte del amar, me gusta lo que estoy viendo, aunque creí de alguna manera que eras un tanto más baja de estatura, porque para ser muy honesto las chaparritas me atraen más.

 

A lo que a Rubí en su mente exclamó...

 

— ¿Cómo no le van a gustar las mujeres chaparras si el hijo de puta es un chaparro cerote?

 

El cliente que sería sacrificado esa noche, entonces continuo con su discurso de hombre barato y para nada congraciado.

 

Pero no importa lo importante aquí es que por fin voy a cumplir mi fantasía y serás la primera en probar de este cuerpo qué te hará sentir mujer cuantas veces así lo quieras, ya verás que después de la primera vez no vas a desear que deje de hacer lo que te voy a enseñar que hagas, ¿Estas preparada?

 

En ese instante Rubí no debía mostrar miedo alguno, no tanto porque en verdad sintiera miedo directamente en actuar, sino más bien en ser callada y obediente ¡Algo que definitivamente no estaba acordé a su carácter! así que ella queriendo esquivar la mirada directamente, se acercó para que el chaparro comenzará a tocar su cuerpo, con una mirada lujuriosa que asimismo causaba repugnancia en la mente de Rubí, no dejó de tocar principalmente sus senos para dirigirse a su cintura y queriendo ir más abajo inmediatamente, pero ella no soportando el hecho directamente que ese hombre estuviese tocando de esa manera su cuerpo, se abstuvo por un instante colocando sus manos sobre las del chaparro, exclamando en ese mismo instante antes que continuara.

 

— ¡Disculpe mi inocencia señor! la verdad es que nunca he estado con alguien así y me causa mucha pena y vergüenza, ¿Podría de alguna manera ir un poco más lento? De alguna manera sentirme cómoda y no sentirme tan nerviosa como estoy ahora, si gusta le puedo ofrecer un trago, mientras tanto le aseguro que es el mejor aguardiente que venden acá.

 

—¡Tranquila mi amor, yo sé que es tu primera vez, pero no por eso tienes que tener tanta timidez sólo recuerda que esto sólo sucede una vez y este momento hay que disfrutarlo como si estuviéramos comiendo una nuez! No ya en serio, aquí no estamos en una escuela, así que vete preparando porque lo que viene es para que aprendas de una buena vez a complacer a un hombre, sí llegara a gustar como te mueves, te vas conmigo y si no haces lo que te digo entonces simplemente te voy a usar como un objeto, porque no estoy con la paciencia que tú creas que he venido, estoy más que urgido por satisfacer mis deseos más bajos, vas a cumplir con eso ¡Me has entendido!

 

Rubí en ese instante sintió que la situación se podría complicar definitiva y totalmente, podría decirse que ya no estaba en control de la situación, que en cualquier momento todo se podría salir de razón y ella tendría que actuar de una manera inmediata, lo cierto es que la sombra de la muerte estaba presente en el lugar, sólo que aún no decidía quién sería la víctima esa noche ¿Cómo bien podría ser directamente el chaparro como a lo mejor podría ser solamente a Rubí? ¿Pero y entonces qué pasaría con Ariel? definitivamente todos estaban en peligro y el comienzo de esa interacción entre Rubí y el chaparro definitivamente no era ni estaba saliendo como lo pensado y planeado, ya que se decía que el chaparro prefería que las mujeres lo dominarán en la intimidad ¡Pero al parecer no estaba funcionando de esa forma!

 

El chaparro con desesperación y dando órdenes, exclamo.

 

— ¡Ven mujer! bájame los pantalones, pero con la boca, mientras lo haces sírveme un trago y me lo das con tus labios, esta noche sabrás quién es él chaparro y no porque mi apodo sea ese quiere decir que lo que tengo para darte sea igual, aquí se te acabo tu buena inocencia, aquí se acabó lo que era tu vida antes de esto ¿Cómo es que te llamas?

 

— ¡Rubí es mi nombre! Recuerde muy bien mi nombre señor.

Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo