— ¡Si mi amor dime que sucede!— ¡Estaba escuchando que vamos a necesitar algo de dinero para solventar esta situación! — Si mi amor, pero creo que también he hablado contigo al respecto y no deseo que te involucres en ese sentido, es tu dinero y aunque no cuento con millones como David, pero algo nos va a servir.— Sé positivamente que cuentas con las caletas que sacamos de esa residencia, el asunto mi amor es que también quiero aportar algo a esta causa, porque sé que literalmente todo esto tiene que ver conmigo y que aunque tú no deseas o no desees directamente hacerme responsable de esta situación, te he dicho de que no me obligaste a tomar esta decisión ¿Acaso me apuntaste como un arma para aceptar tu propuesta? — Ciertamente que no, pero le apunto a tu corazón para que decidieras estar a mi lado.— Obvio que no es así Rubí, por lo que de alguna manera también es mi responsabilidad no solamente cuidar de mi vida sino también y especialmente de la tuya, a lo que quiero llegar es
— No puedes mencionarlo de esa manera Ariel, es injusto para ti que desees vengar a una persona que ni siquiera has conocido en tu vida.— Ciertamente no conocí a tu padre, pero ha dejado en esta vida a la mujer más hermosa y maravillosa que jamás en la vida podrá existir, así que le debo mi respeto y admiración a tu padre, porque esta vida me permitió estar contigo y no importa a donde el camino me lleve a tu lado.No menciono media palabra al respecto, pero su llanto y esos besos fueron más que suficiente para creer que ella se encontraba más que agradecida o feliz de mis palabras, abrazándonos hasta caer recostados en esa recamara, nos dedicamos a consentirnos con caricias sin llegar esta noche a la pasión, creo que después de todo también hacia el amor con Rubí, solo con acariciar su piel y besar sus labios hasta que nuestros ojos se cerraron y descansar hasta el día siguiente.Logramos descansar en la residencia de seguridad donde nos encontrábamos juntamente con Alejandra, tamb
Rubí se encontraba negociando aparentemente con el Duque, respecto a lo de la vuelta que se tendría que hacer en cuanto recoger el dinero que Anesha debía enviarme, era un tanto arriesgado en ese momento que con Rubí saliéramos de la residencia, pero aun así necesitaba conversar con Anesha, necesitaba encontrarme una vez más con la única familia en la cual confiaba en hacerle conocer mis más bajos deseos y problemas, por lo que si esta sería la única oportunidad que tendría para estrechar su mano, ¡No deseaba perderme la oportunidad!Intervine en ese momento de la conversación para dar mi punto de vista y dejar en claro mis motivos, mas no la desconfianza que el Duque podría llegar a pensar al respecto.— Agradezco que desees ayudarnos sin cobrar un solo centavo, pero te prometo que tendrán su recompensa, lo cierto es que necesito ir con ustedes al punto de entrega con Anesha, necesito estrechar su mano, así sea por última vez, espero entiendas mi situación.Rubí asimilo en ese momen
Obviamente de mi parte no deseaba separarme de Rubí bajo ninguna circunstancia, pero de momento analizando la situación, sabía que no contradecir al Duque era más que apropiado y coherente, no me encontraba en la situación de decidir de alguna manera o dar mis condiciones, debido a que los favores que el Duque nos estaba brindando, eran de lo más desinteresadamente posible, así que debía agradecer su generosidad y continuar con lo que se estaba estableciendo en ese instante, lo que también me imaginaba es que seguramente Alejandra no se quedaría callada en todo el camino hacia la frontera con México, imagine en ese momento que ella deseaba preguntar o recomendarme algo de Rubí, así que el momento se prestó para eso y lo que saldría de ese viaje, también marcaria nuestro futuro con Rubí.El Duque antes de salir de la habitación nos entregó indicaciones y puntos de parada que debíamos realizar sin excusa alguna, era muy necesario para la seguridad del viaje y del cargamento a recoger, s
El sentimiento confuso de la frustración con el enojo y el deseo de venganza, llenaron mi espíritu en ese momento, ¡Ese desgraciado se atrevió a tocar a uno de mi familia! En ese momento no lo tome directamente de esa manera, pero mucho después entendí que Rubí atravesaba por los mismo sentimientos que me rodearon al enterarme de la muerte de Anesha de esa manera despiadada y cruel, el único hermano y primo que de verdad comprendía lo que era mi vida, el único que me apoyaba sin importar mis decisiones, el único que merecía ser llamado mi familia.— Amor, entiendo tu dolor, posiblemente en tu cabeza se encuentre mucha basura en este momento en contra de Salomón, pero como me has hecho entender, ¡Todo a su tiempo es maravilloso! Juro por mi vida que vengaremos la vida de tu primo.Las palabras de Rubí en ese momento sonaron como en un bosque muy profundo que se fueron perdiendo en cuanto ingresaron a mis oídos, solo escuchaba el ruido de mis pensamientos y la malicia que existía en mi
Sin saber de los planes que se formulaban en nuestra contra desde Guatemala en el cártel de David, nos encontrábamos en constante movimiento en los hoteles en Panamá, en algunas ocasiones durante los últimos seis meses, nos trasladamos a Colombia y Ecuador para desviar cualquier investigación que se encontrara en nuestra contra, pero era demasiado agotador a pesar que contábamos con todas las facilidades y comodidades para viajar. Alejandra nos enviaba nuestros pasaportes falsos en cada ocasión para viajar desapercibidos y conseguir nuestro objetivo de vivir plácidamente, aunque de momento era o consideramos que se estaba comenzando a presentar el momento para estacionarnos en un país y tratar la manera de comenzar a vivir sin miedo a ser encontrados, por lo que el Duque nos envió las coordenadas de un excelente lugar para habitar por fuera de cualquier radar de David. A nuestra llegada al mencionado lugar en Costa Rica, se trataba de un residencia modesta, sin mayores lujos y no l
Cada segundo que se consumía dentro de su garganta, era un segundo de deseo reprimido que estaba sufriendo por bajar a su entre pierna y saborear el exquisito manjar de su cuerpo, deseaba fervientemente en derramarme, pero por más que lo intentaba eso no sucedía como tal, no era por falta de excitación, era por el simple y ambicioso deseo de continuar recibiendo esas caricias de sus labios y esa parte en la que la punta del miembro lograba tocar el fondo de su boca y transcurría por su garganta, era insaciable ese sentimiento y deseo que corría por todo mi ser, era choques eléctricos que me atormentaba y explotaban de placer.Las gotas de lluvia comenzaban a caer con más frecuencia, eso indicaba que en cualquier momento el aguacero nos caería encima, ¿Sera posible que nos empapemos de esa lluvia antes que empape su garganta con mi elixir? Me pregunte con desesperación, seguramente ella no pensaba en otra situación o sensación más que la me estaba haciendo sentir en ese momento, entonc
Al observar la espalda de Rubí y su tatuaje de dragón con alas que recorrían sus brazos, me imagine precisamente volando montado en la espalda de una dragona que lanzaba llamaradas de pasión por el éxtasis de amarnos de esa manera. Me perdí por unos instantes en su espalda, admirando su belleza y como sus brazos fuertes y apoyados sobre la mesa, no flaqueaban en el acto, era sin duda la mujer perfecta para mis emociones y deseos.Se incorporó hasta quedar completamente sentada sobre mi vientre bajo y presionando al máximo mi herramienta, que tras dar unos suspiros de excitación, se levantó para entonces estar frente a mi mirada de pie y con sus dedos tocando cada parte de su cuerpo, me incitaba a levantarme para tomarla y llevarla contra la pared frente a nosotros, pero entonces ella coloco su pie derecho sobre mi abdomen, era una clara señal de dominación y no era el momento de levantarme de mi posición.— ¿A dónde cree que va señor Montes? Aún no he acabado con usted y no se levanta