El silencio que se arma tras esas palabras es abrumante. Su mirada refleja un poco de angustia, pero yo no sé como surtirme al respecto. No me doy cuenta, pero ya hemos llegado a casa. Su mirada, su jodida mirada. Podría decir que nunca dejó de encartarme. — ¿C-cómo que me has buscado? — Me refiero a una persona con tu experiencia —dice rápido— Esperé a que Arnold me comunicara sobre el cierre solo para poder ofrecerte trabajo. Lo sigo mirando, pero ahora como la tonta que soy. Me emocioné. Que tonta soy, no debí pensar que me buscó después de nuestro encuentro. Él podía llamarme, le deje mi numero en ese papel… el no me buscó, jamás lo intentó. (…) El trabajo ha sido bueno para mantener mi mente despejada, mañana llega mi hijo y estoy emocionada con ello. Después de aquel día, ninguno de los dos nos hemos visto. Los reportes que debo entregarle han sido enviados. La reunión semanal fue cancelada, también. Todos los días puedo escucharlo, solo tenemos una pared que nos separa. P
La noche fue demasiada larga. No pude dormir nada bien, mi mente me estaba traicionado mas de lo que pensé que jamás lo haría. Mi casa se sentía demasiado vacía durante la madrugada. No puedo creer que esté enamorada de mi jefe y padre de mi hijo. Siento que me han roto el corazón. El rechazo es inminente. Después de tomar un café soluble y puro, escuché el auto llegar. Su voz. Su voz. Me levanté de golpe. Salí básicamente corriendo de mi casa, viendo su sonrisa hacerse mas ancha conforme ve que su madre corre en su dirección, aunque se que no le gusta, me corresponde con un pequeño abrazo. Su pequeño cuerpo parece poder abrazar todo mi dolor, solo eso me recuerda que todo este camino que ha sido difícil para los dos, es por él. Por Klaus. — Mami te ha extrañado mucho —le suelto— ¿Klaus, tu no? — Si Rebecca sale después, se queda observando un poco el lugar. — Entra a casa, busca tu nueva habitación, pequeño —le indico. — ¡Si! Rebecca y yo nos quedamos observando como corre a
7 años antesMi padre ya tiene una edad muy avanzada, se que está temiendo de que su imperio no pueda crecer más. Mi hermano me dijo que esto iba a pasar, mi padre es un hombre muy inteligente, nunca se queda estancado mucho tiempo en un mismo lugar.Algo que le admiro mucho es verlo vetar sus sentimientos dependiendo de lo que se amerite. Yo no sé si pueda hacerlo, menos con lo que me está diciendo ahora mismo.Esa chica ni siquiera es de mi gusto, ni para poder tomarla en la cama. Sé que, si acepto, debo tener un hijo de inmediato, para poder asegurar después otro contrato en una boda, no puedo aceptar esto.Me creo lo suficientemente capaz de poder llevar esto a lo mas alto. Mi primo Arnold y mi tío, han podido escalar sin ayuda de mi padre, eso habla mucho de ellos y de lo que se puede hacer con poco.— No puedo hacer eso, no quiero solamente unirme a alguien por hacer una fortaleza que en cualquier momento puede derrumbarse. No quiero estar atado a una unión de forma obligatoria.
cinco años atrásCada mujer que pasó por mi vida estos años, solo son recuerdos y comparaciones de lo que pasé con esa chica. Ganarme el odio de mi hermano por eso... creo que vale la m*****a pena siempre.Todo lo que hablamos esa única noche, se repiten en mi mente como pequeños sueños que tengo. A veces me pierdo en ellos, quisiera mandar al diablo a Aldo, ese idiota no la tiene y solo me hizo perderla. Según lo que él se ha encargado de contarme. — ¿Siempre será ella? —Katerina está molesta, yo también lo estaría en su lugar. — Yo siempre te repetí que no me interesas, mi padre fue el encargado de este acuerdo, no yo. — Tu hermano lo puede romper, Jamie. Yo en realidad creo que eres de esos hombres a los cuales les gusta que les rueguen, les levanta el ego. — A mi hermano le conviene tenerme atado de esta forma, Katerina. Será la última vez que te pida que me llames James, no Jamie. No quiero muestras de cariño, no quiero que nadie piense que somos cercanos, romperé este compro
Esa mañana cundo abrí los ojos, de forma inmediata pude sentir la fría brisa amenazando con seguir aumentando el frío. La temperatura ha bajado considerablemente. Mi alarma estaba a punto de sonar así que solo la desactive.Mi rutina ya había sido dada, todos los días temprano hacia lo mismo. Solo que ahora pasaba a ver a Klaus antes de meterme a dar una ducha caliente.Klaus suele levantarse temprano, pero debido al cambio de horario, aún sigue plácidamente dormido. Al igual que Rebecca.Antes de irme a trabajar, le dejé una nota a Rebecca, diciéndole donde guarde el desayuno de los dos y si podía ayudarme visitando algunas escuelas para Klaus. Deje un poco de dinero y salí. Cuando salí vi la camioneta de James pasar, pero al estar polarizada no pude ver quien conducía allí.Cuando llegué a la empresa, pude notar a la prensa alborotada. ¿Qué está pasando?Con cuidado de no lastimar a nadie, pude pasar. Un guardia de seguridad me alcanzó, es un lindo chico joven que se ha encargado de
— Parece que me odias, Claire. Ojalá pudiera hacerlo con la misma intensidad con la que puedo admitir que lo he extrañado todo este maldito tiempo que ha pasado. Parece demasiado lejos todos esos días que Maya me ayudó buscando un chico que estuvo a lado del barman de la fiesta, cosa que nadie supo. Todas esas noches que pase llorando por no saber si podía hacerlo sola, si podía encontrarlo, si recibiría su ayuda, si nos amaría como… yo pensé que lo haría, si lo hubiese encontrado en ese año que sucedió todo. — Te tengo aprecio, solo eso. No puedo admitir mis sentimientos por él, no puedo hacerlo. Muchas noches las pasé pidiéndole a dios que me diera una señal si buscarlo o no… Si podía seguir guardándolo en mis pensamientos o si alguna vez olvidaría su tacto o sus palabras… Al no darme ninguna señal, lo comprendí, me estaba obsesionando con un fantasma que nadie mas pudo ver. No era lo mas sano seguir pensando en ese hombre. Me lo tuve que sacar de la cabeza con mucha fuerza, no
Tomo mi bolsa y casi corro a la salida. Debo irme, debo dejar de ver su rostro, debo respirar aire fresco, debo dejar de sentir esta tensión sexual que está en toda la oficina.— Pasaré por ti a las ocho —suelta antes de que salga— Será una cena de beneficencia para apoyo a las familias que sufrieron con el clima en el país. Es de gala, puedes irte a casa —suelta lo último como una orden.— ¿Es una orden? —preguntó sin mirarlo— Tómalo como quieras, Claire.Pasé mas de dos horas buscando un vestido de gala para esta noche, no me podía elegir por ninguno. Eso hasta que llegue a una tienda muy hogareña con unos buenos vestidos y a increíbles precios, no pude desaprovechar esa oferta. Así que me terminé llevando un vestido largo en color azul rey. El hermoso vestido tiene mucho detalle en transparencias y flores. Además la mujer que me atendía, me dijo que ese color se me ve muy bien, así que no pude esperar más y lo compré. Conducí lo mas serena posible a casa. Anteriormente le he man
Cuando estoy por verme al espejo para ver como quedó todo, mi celular se enciende con un mensaje privado de un algún numero local. “Estoy por llegar” — Parece que quieres impresionar, jamás te vi con tantas ganas de verte brillante —se burla Rebe — Es una gala, nunca había asistido a un evento donde solo van personas con mucho dinero. — Te ves muy hermosa, por cierto… — Gracias, Rebeca —tomo el pequeño bolso— Llegaré lo antes posible para salir con Klaus, por supuesto que estás invitada o si quieres tomar la noche de descanso, nos podemos ir solos… — Lo pensaré, ten cuidado. Paso para ver a Klaus, para despedirme, aunque el entiende que es mi trabajo, aún así me duele cuando debo pasar mas horas fuera por el que con mi hijo. Odio cuando hay horas extras, pero también me gusta cuando el dinero hace falta. Es un amor con odio. Después de unos minutos me llega otro mensaje de este número de hace un rato. “Estoy fuera, Claire” Al salir, veo su auto estacionado a lado del que yo u