Tres días han pasado desde el accidente de mi hijo, me encuentro demasiado estresada por todo lo que debo pensar. EL trabajo está a nada de terminarse, estoy con los últimos detalles, Klaus está mal, en serio mal, parece que todo lo estresa en estos momentos, no he podido averiguar que es lo que le causa problemas. Por otro lado, James actúa raro, sale por las madrugadas y debo fingir que no lo sé, para ver si el me llega a decir la verdad.

— ¿Puedes explicarme todo?

Maya ha venido hoy a acompañar a su madre, de paso se vino para visitarme un rato.

— Klaus está mal, creo que necesita un respiro. Creo que pensé que estaba ya bien, que no le seguí poniendo la atención realmente necesaria. Creo que ha sido mi culpa, Maya.

— No puedes culparte por todo lo que pase, ahora ya está su padre también, que la culpa no recaiga solo en ti. Pero, te conozco, Claire, eso no es todo lo que pasa, te ves demasiado enferma, me está comenzando a preocupar.

— Es que… James se queda a dormir con nosotros