Ema.Han pasado semanas ya desde la última plática que tuve con Josh, desde ese día nos volvimos mas cercanos, quería tratarlo con más frecuencia, cuando estaba al lado de Josh nada dolía, nada me preocupaba. Estaba empezando a dejar de compararlo con Eliot.-Estas serán unas largas vacaciones- brincó Helaena sobre mí, al mismo tiempo que me abrazaba- ¿Qué tienes planeado hacer Ema?-Quiero ir con mis padres de campamento- ¿Fuera del país?-No, no creo. A mi padre no le ha ido muy bien en sus negocios- exclamé- ¿y tú? ¿Harás algo con tus padres?-No, no lo creo. Ellos están demasiados ocupados fortaleciendo nuestro patrimonio- dijo como si no fuera algo importante.Helaena era el tipo de persona que aparentaba que no sucedía nada, ni yo que soy su amiga sabe lo que siente.La miraba despreocupada todo el tiempo, aunque siempre fue muy responsable desde pequeña, supongo que ante la ausencia de sus padres se tuvo que educar sola.-Mi pobre Helaena, yo no te dejaré sola- le jugueteé su
EmaEl tiempo pasó rápidamente, las heridas parecían cicatrizar, la nieve se fue derritiendo y el calor gentil anunció la primavera. Dejé atrás muchas cosas como aquellas amistades que creí tener, traté de dejar en el olvido esos sentimientos hirientes y seguí con mi vida.Aunque Jules abogó por Eliot confesando que fue ella quien tuvo la culpa, eso no cambia el echo de que me haya engañado y mentido.El amor de Eliot solo fue una corriente de aire frio que me sacudió e hizo perder mis ramas. Hoy llegó la hora de dejarlo ir para poder aceptar los sentimientos de Josh quien a se a ganado mi cariño sin presionarme. Que mejor manera de abandonar un viejo amor que escribirle una última carta.Saqué un bolígrafo y mi viejo diario para narrar mis sentimientos que esta vez quedarían completamente en el pasado.A mi primer y viejo amor.Ya casi cumple seis meses desde tu partida. Ya no te extraño tanto como solía hacerlo en el principio. Eh aprendido que hay amores que se quedan grabados en e
Catherine.Ayer dormí en el departamento de Zack, hoy que estamos en casa puedo ver la pintura que Zack mandó hacer para mí, en la sala. - Wow ¿A qué hora la mandaste a traer? - Ayer por la mañana- confiesa- si no te gusta podemos cambiarlo de lugar-No, está perfecto, pero ¿Sabes que sería aún más perfecto? - ¿Qué?- Una pintura de nosotros dos- Tienes razón, sería genial... Por cierto, me tomé el atrevimiento de hacer algo en tu patio trasero. Me toma de la mano- Ven, acompáñame. Caminamos hacia mi lugar favorito.- Recuerdo que me dijiste que querías un columpio cuando eras pequeña.- Sí- sonreí tímida. - Bueno, pues ya no tendrás que desearlo más, aquí lo tienes. Había un gran árbol con ramas gruesas y en el se encontraba un columpio. - Zack- dije emocionada, dejándolo atrás- Zack, esto es... ¿Puedo usarlo ya? Él se apresuró para ayudarme a subir. - ¡Dios! Hace tiempo que deseaba esto. Zack se colocó detrás de mí y comenzó a empujar el columpio con cuidadoSentí el vi
Era una tarde de otoño, las ráfagas de viento golpeaban sutilmente las ventanas dejando el frio en las calles y las hojas de los grandes árboles caían con gentileza, bajo el gran árbol de roble viejo de la cuidad me encontraba con el chico de los hermosos ojos azules que jamás nadie ha visto, el pelo castaño lacio caía sutilmente por su frente, no solo era el chico mas guapo de la cuidad, sino que además era gentil y caballeroso, la mezcla perfecta. Me encontraba recostada en sus piernas y no hacía nada más que admirar su belleza mientras me cuestionaba el hecho de como una persona puede mirarse tan atractiva sin siquiera hacer nada, no cabe duda que Dios tiene a sus favoritos. Cuando estábamos juntos solo pedía que el tiempo de detuviera, así permanecería en sus brazos siempre, no quería que eso terminara, como todos a sus 17 años- ¿te quedaras a mi lado cuando tenga 100 años? - le pregunté de repenteSu mirada que en ese momento se hallaba perdida admirando los árboles que se había
Mamá tenía listo el desayuno y me llamó para poder estar en familia, aun no estaba lista, tuve que planchar mi falda tableada gris que estaba bastante arrugada, afortunadamente mi camisa estaba lista sin ninguna imperfección, el saco del mismo color de la falda era lo que más me gustaba de mi uniforme, finalmente me puse las medias negras con los zapatos bien voleados, mi madre no paraba de llamarme así que mientras iba bajando por los escalones me fui poniendo la corbata Ella me miró con cariño y se acercó acomodarme el pelo- ¿esta vez no te pusiste un lazo? - dijo moviendo el pelo suelto hacia atrás-preferí llevarlo sin ningún accesorioMi padre quien leía el periódico lo abandonó sobre la mesa, se puso de pie y se me acercó -bien hecho hija, por fin puedo verte mas relajada- dijo dándome un abrazo Fui demasiado egoísta, solo pensé en mi dolor y no pensé en cómo se sentirían mis padres y mis amigos al estarlos evadiéndolos Terminado de almorzar el autobús escolar me recogió pa
Mi carta habia sido devuelta ElliottEl tiempo pasa rápido y tu ausencia es aún más notable cada día, cada lugar que recorro me recuerda a ti, todavía conservo el suéter que me regalaste porque me había gustado ¿lo recuerdas? Jamás me lo quise poner porque quería mantener tu esencia intacta, tenerlo me hace recordarteAun me pregunto el porque me dejaste sin decirme nada, todo estaba tan bien entre nosotros, no entiendo., creo que jamás te entendí sin embargo quiero arreglar las cosas, aun no es tarde, por favor vuelve, te necesito Fue eso lo que estaba escrito, nunca pensé que me trataría así. Limpié mis lagrimas nuevamente, no quería que mi madre me viera llorando otra vez. Una notificación llegó a mi computadora, por mera casualidad me asomé y lo que me encontré fue lo que me terminó matando "Elliott ah publicado una foto nueva" En aquella foto estaba muy sonriente con una chica a su lado, ella lo tenia abrazado ambos estaban parados frente a una librería Él ya estaba feliz sin
La tarde llegó pronto así que Josh tuvo que irse, hacía tiempo que no hablaba con él, ahora que lo pienso con detenimiento no nos hablamos desde que comencé andar con Elliott. Lo acompañé a la salida mientras le daba las gracias por haberme ayudado, al abrir la puerta nos encontramos con Helaena quien sostenía chocolates en sus manos, parecía sorprendida al ver que Josh estaba conmigo-Josh ¿Qué haces aquí? - interrogóHelaena y Josh son mellizos y tienen características similares como es el color de los ojos y el color escarlata de su pelo, aunque claro, Josh es mas alto que su hermana-Vino a saber como estaba y a ayudarme con unos pendientes- respondí en su lugar-ya veo- dijo poco convencida-Nos vemos en otra ocasión Ema- de despidió Josh-no espere que vinieras. Pasa.-no te eh visto en la escuela como es de costumbre así que decidí venir a tu casa a ver una película ¿te parece?-claro, deja le aviso a mi mamá que subiremos a mi cuartoHelaena me miró curiosa- ¿ahora le pides p
Emmallevaba los libros hacia la biblioteca como un encargo de mi profesora así que no pude negarme, estos eran demasiados, una fila de ellos que apenas podía ver el camino y por si fuera poco mis cordones estaban sueltos, una pisada y estaría besando el suelo- ¿Ema? - preguntó una voz tratando de ver mi rostro a través de los libros-oh Josh- exclamé sonrienteSin decirme nada se inclinó para sujetar mis cordones, creí que no lo notaria en verdad estaba apenada-no…no tenías que hacerlo- dije avergonzada-un mal paso y caerías con esa…montaña de libro- miró la multitud- déjame ayudarte- tomó todos-gracias Josh, pero en verdad no tienes que hacer, me quedaré con la mitad- sugeríCaminamos por los largos pasillos hablando sobre cosas simples, al llegar a la biblioteca dejamos los libros sobre la mesa de la bibliotecaria- ¿Qué clases tienes después?-de echo esta fue mi última clase-oh tus clases terminan antes que las de Helaena-si, es lamentable que nuestros horarios no se topen