Punto de vista de Manuel:La siniestra sombra se había convertido en una presencia inquietante en nuestras vidas, apareciendo sin falta a la misma hora todos los días. Florida y yo pasamos innumerables noches discutiendo su propósito y origen, pero las respuestas seguían siendo difíciles de alcanzar.Una tarde, mientras el sol se hundía en el horizonte, proyectando largas sombras sobre nuestra casa, la siniestra figura se materializó una vez más entre nosotros. Se deslizó dentro de la habitación, sus movimientos sinuosos y amenazadores.No pude evitar sentir una mezcla de miedo y frustración mientras lo veía tomar forma. Había quedado claro que esta sombra quería algo de nosotros, pero sus mensajes crípticos y su espeluznante presencia nos dejaron en la oscuridad.—¿Quién eres?— Pregunté, mi voz estaba llena de irritación. —¿Qué quiere de nosotros?—La sombra permaneció en silencio, su forma cambiando y ondulando como si se burlara de mis preguntas. Era como si se deleitara con nuestr
Florida no podía explicar la atracción magnética que sentía hacia Alpha Roger. Era como si una fuerza invisible tirara de su corazón, instándola a buscarlo. Ella había tratado de resistirse, de mantenerse alejada de su enigmática presencia, pero cada día que pasaba hacía más difícil negar la extraña conexión que compartían.Una tarde, mientras el sol se hundía en el horizonte, Florida se encontró caminando hacia la casa de Alpha Roger, casi en trance. Sus pasos estaban guiados por un impulso irresistible, como si el destino mismo hubiera predeterminado este encuentro.Llegó a su cabaña y dudó por un momento, con el corazón latiéndole con fuerza en el pecho. Florida sabía que este encuentro podría cambiarlo todo, pero no podía dar marcha atrás. Levantó la mano y llamó a la puerta.Momentos después, Alpha Roger abrió la puerta y sus ojos se clavaron en los de ella con una intensidad que le provocó escalofríos. —Florida—, dijo en voz baja e hipnótica. —Te estaba esperando.—Florida sinti
POV de ManuelMe paré en el umbral de nuestra casa compartida, el peso de mi decisión presionándome como un pesado manto. Florida estaba frente a mí, con sus ojos llenos de una mezcla de tristeza y comprensión. Habíamos pasado por muchas cosas juntos, enfrentado pruebas y tribulaciones que habían puesto a prueba el núcleo mismo de nuestra relación. Pero ahora había tomado una decisión que cambiaría todo.La voz de Florida tembló mientras hablaba, su vulnerabilidad atravesó mi corazón. "Manuel, ¿estás seguro de esto? ¿No podemos encontrar una manera de solucionar nuestros problemas?"Respiré profundamente, tratando de calmar mis emociones. "Florida, no es que no te ame. Pero el dolor, las dudas, se han vuelto demasiado. Necesito encontrar algo de claridad, algo de paz".Ella asintió, sus ojos brillaban con lágrimas no derramadas. "Entiendo, Manuel. Sólo espero que encuentres lo que estás buscando".Di un paso adelante y tomé suavemente su mejilla, mi pulgar secó una lágrima. "Yo tambié
POV de ManuelLos días sin Florida parecieron una eternidad. Por mucho que intenté convencerme de que había tomado la decisión correcta, el dolor de mi corazón se negaba a disminuir. Paty era una compañera dulce y leal, pero no era Florida. Cada sonrisa, cada risa que compartíamos, se sentía como un mero eco de lo que tuve con Florida.En cuanto a Florida, no pude evitar preguntarme si ella sentía lo mismo. La noche que me fui, vi las lágrimas en sus ojos, el dolor grabado en su rostro. ¿Me extrañaba tanto como yo a ella? ¿O había encontrado consuelo y felicidad con el mago Alpha Roger?La verdad era que no podía soportar la idea de estar en Florida con otra persona. Los celos me carcomían, un recordatorio constante de aquello de lo que me había alejado. Pero no me atrevía a volver con ella, todavía no. El orgullo y la terquedad me mantuvieron alejado, incluso cuando mi corazón la anhelaba.Mientras tanto, la vida en Florida había tomado un rumbo diferente. Ella había buscado refugio
POV de ManuelLa nota era un eco doloroso de las emociones que se habían ido acumulando entre Paty y yo. Decía:"Manuel,No puedo seguir así. He esperado, esperado y anhelado tu amor y atención, pero está claro que tu corazón pertenece a otro. No puedo ser la segunda mejor, no cuando estoy embarazada de nuestro hijo.He decidido dejar Harold's Pack y encontrar un nuevo hogar donde pueda criar a nuestro bebé sin el recordatorio constante de que no soy yo a quien amas de verdad. Es desgarrador, pero es lo que necesito hacer por mi propio bienestar y por el futuro de nuestro hijo.Te deseo felicidad, Manuel, y espero que encuentres el amor que buscas. Puede que nuestros caminos se hayan separado, pero siempre llevaré un pedazo de ti conmigo en nuestro hijo.Cuidarse,Paty"Mientras leía esas palabras, un gran peso se instaló en mi pecho. Paty había sido una fuente de consuelo y consuelo durante un momento tumultuoso de mi vida, y ahora ya no estaba. No pude evitar sentir una abrumadora s
Punto de vista de FloridaRegresar a la vida humana fue como entrar en un mundo que casi había olvidado. Las bulliciosas calles, el aroma del café que flotaba en los cafés cercanos y la charla de la gente que se ocupaba de su vida cotidiana me parecían extrañamente extraños después de mi estancia en la naturaleza.Mientras volvía a mi antigua rutina, no pude evitar sentir una sensación de nostalgia por la simplicidad de mi vida anterior. Las responsabilidades de liderar una manada, aunque satisfactorias, lo consumían todo. Ahora tuve la oportunidad de redescubrir las alegrías de la existencia humana.Una de las primeras cosas que hice fue volver a conectar con mis antiguos compañeros del mundo del periodismo. Me recibieron con los brazos abiertos y agradecí su apoyo. Escribir siempre había sido una de mis pasiones y estaba ansioso por compartir mis experiencias y conocimientos con un público más amplio.Mi primer artículo fue una reflexión sobre las lecciones que había aprendido duran
POV de ManuelEn la tranquila soledad de nuestro hogar, Paty y yo nos encontramos frente a un momento desgarrador, uno que cambiaría para siempre el curso de nuestras vidas. Nos enteramos de que estaba embarazada de gemelos, una alegre revelación que nos llenó de sueños de una familia en crecimiento. Pero el destino quiso que esos sueños fueran reemplazados por una pérdida profunda y dolorosa.Paty siempre había cargado con el peso de un pasado difícil, que la había dejado huérfana y vulnerable desde muy joven. A pesar de las dificultades que la vida le había presentado, había surgido como una mujer resistente y compasiva, y yo admiraba su fuerza todos los días.La noticia de su embarazo nos había traído a ambos una inmensa alegría. Fue un nuevo comienzo, una oportunidad para que Paty experimentara el amor y la estabilidad de los que había sido privada cuando era niña. Habíamos imaginado una vida llena de risas, sueños compartidos y la calidez de una familia amorosa.A medida que pasa
Florida estaba sentada sola en su acogedora cabaña, con sus pensamientos tan turbulentos como un mar tormentoso. El crepitante fuego de la chimenea proyectaba sombras danzantes por toda la habitación, y su calidez no lograba penetrar los zarcillos helados de soledad que se apoderaban de su corazón.Desde que Manuel la dejó, ella había estado en un constante estado de tristeza e incertidumbre. El vacío de sus días pesaba mucho sobre ella y se encontró anhelando su contacto, su risa y el amor que habían compartido.Justo cuando Florida se perdía en su melancólico ensueño, un suave golpe resonó en la cabina. Sorprendida, se levantó de la silla y se acercó a la puerta con cautela. ¿Quién podría ser a esta hora?Cuando abrió la puerta, se le cortó el aliento en la garganta. Allí, de pie a la luz de la luna, estaba Alpha Roger, con su presencia imponente y regia. Sus rasgos cincelados se suavizaron con el brillo de la noche, y en sus manos sostenía un ramo de las flores más exquisitas que F