Zenios ya había sufrido bastante.

Por lo tanto, ella dejaría de lado estas palabras aún más hirientes para otro día cuando él estuviera de mejor humor.

“Zenios, algunas cosas, una vez dichas, dejarán una herida grave. Pero eres un hombre inteligente, así que piensa en lo que te he dicho y lo entenderás".

Charlotte le dió unas palmadas a Zenios en la cabeza para consolarlo y sonrió tímidamente.

"Lo siento, pero eso es todo por hoy. Tengo que irme."

Era como si Zenios se hubiera convertido en piedra.

Con cada palabra que decía Charlotte, sentía como si le hubieran echado cubos de agua fría, uno tras otro en sucesión. Estaba helado.

Sin embargo, independientemente de lo horrible que se sintió cuando Charlotte le sonrió, él no pudo evitar devolverle la sonrisa. Reunió todas sus fuerzas y levantó las comisuras de sus labios helados para esbozar una sonrisa.

Charlotte salió por la puerta.

Mientras tanto, Zachary estaba apoyado contra la puerta de su coche con un cigarrillo entre sus