Después de que terminó de hablar, Charlotte arrojó una pila de documentos hacia Kourtney.

Kourtney miró inexpresivamente la pila de documentos.

Antes de que pudiera preguntar algo, Charlotte dijo con frialdad: “Aquí están los registros de transferencia y alguna otra evidencia que demuestra que tú robaste el dinero del Señor Barkley. Consulté con un abogado y tengo derecho a que me devuelvan mi dinero. Te daré dos días para que consigas el dinero y me lo devuelvas. De lo contrario, te llevaré a la corte”.

Después de decir eso, se dio la vuelta y se fue.

“¡Carlie, espera!”.

La voz de Kourtney estalló a espaldas de Charlotte.

Charlotte inicialmente tuvo la intención de despedirse fríamente sin vacilar, pero en ese momento, sus pies se pegaron al suelo como si estuvieran llenos de plomo, y no pudo dar un paso más.

¡Carlie!

¡Kourtney acababa de llamarla “Carlie”!

En el pasado, Kourtney solo la había tratado como a un tumor y no quería nada más que sacarla de su cuerpo. Cada vez qu