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Omnisciente

Mientras Elisa miraba la tarjeta que le había entregado una mujer en el centro de asistencia de mujeres agredidas, recordaba lo sucedido tres días antes y como su tía lloraba amargamente.

Elisa, había sido víctima de violencia de género por parte de su primo pero había estado demasiado asustada para poner la denuncia. Porque éste trabajaba como médico en un prestigioso hospital y desde niña siempre la llevaba a que la atendieran porque decía que era una pequeña muy torpe y nadie nunca cuestionaba la palabra del hombre.

Había uno de sus alumnos, uno que siempre la miraba un poco más que los demás, no era muy antiguo en el hospital y en algunas ocasiones aprovechaba a que estuviesen a solas para preguntarle si realmente se habí

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