“Estaba tan contenta, no podía creer que me pidiera matrimonio de esta manera solo pensaba en que este gran sueño se cumpliera y no volvieran a fallarme”.—Helena cerro sus ojos.

__Los felicito mis niños, estoy tan contenta de este gran paso que dieron, se que esta ves serán muy felices del uno al otro—Dijo la señora julita sonriendo de oreja a oreja—Iré por un vinito.

__ ¡Jacob! Donde le llegues hacer daño a mi hija te la veras conmigo, una ves me la hicieron sufrir y la pase, pero donde se repita no la volverás a ver, pero jamás en la vida—Josh lo miro de reojo—De todas maneras, los felicito a los dos, mis mejores deseos.

__Tranquilo señor Josh, a su hija la amo y jamás pasara por mi mente hacerle daño—Dijo Jacob abrazando a Helena.

__Te amo padre, se lo mucho que me proteges desde ese entonces, pero se que Jacob es un buen hombre. —Helena dio un suspiro.

Y así todos los invitados los felicitaban, les daban abrazos, besos y muchos deseos positivos.

Las puertas quedaron de par en par