CAPÍTULO 52: UNA HORRIBLE PESADILLANikolaiLa lucha encarnada y feroz contra los maldit0s lobos de Sunwood no me da tregua. Corto, desgarro y muerdo a diestra y siniestra, acabando con cada uno de los que se cruzan en mi camino, pero aparecen como cucarachas y no me dan la oportunidad de alejarme del castillo. En mi corazón puedo sentir la angustia y el dolor de Gaia, sé que algo anda mal, pero aunque quiera ir a su lado, no puedo hacerlo. Solo me queda confiar en que Karine y Parisa puedan ayudarla. «Ella estará bien», repito en mi mente, pero no sé si eso sea verdad.Avanzo hasta la entrada del castillo, donde detecto al lobo principal, el comandante que está dirigiendo al resto del ejército. Si consigo asesinarlo, podré poner fin a este ataque vil. Rujo con fuerza, llamando a mis lobos al ataque.Observo a la comandante Rowen, a mi Beta Darryl y a los gemelos liderando la lucha contra todos ellos.Los Alfas de los clanes también pelean a mi lado y mi padre está luchando a muerte
CAPÍTULO 53: LA CONFIRMACIÓN DE MI PEOR MIEDONikolai “Gaia está…”—¡No! ¡No lo digas! —exclamo con las manos cubriendo mi rostro. Contengo las lágrimas en mi garganta, esto no puede estar pasando. “Nikolai, si no podemos sentirla, o rompió el vínculo o murió, y es evidente por lo que vemos que no es lo primero”, refuta Maheegan.—Basta, ¡Basta! Ella no puede estar muerta.El vacío en mi corazón amenaza con ahogarme, la furia que me recorre el cuerpo es asesina, podría ir ahora mismo a matar a Stefano sin dudarlo. Me transformo en lobo y salgo disparado de vuelta al palacio, mis patas golpean el suelo levantando tierra y ramas a su paso, la noche sin luna ya se ha levantado en el firmamento y el frío helado congela mi pelaje, pero esas sensaciones son insignificantes comparadas con lo que llevo por dentro.Si Gaia está muerta yo… moriré con ella… pero primero debo matarlos a todos. A todos los responsables de su muerte.El camino hacia el palacio se me hace eterno, alcanzo la entrad
CAPÍTULO 54: PRISIONERA EN SUNWOODGaiaUna fuerte sacudida me despierta de mi letargo. Abro los ojos con lentitud y observo todo a mi alrededor con una mezcla de miedo y confusión. Poco a poco los recuerdos llegan a mi mente y un fuerte nudo en mi garganta amenaza con hacerme llorar. Intento incorporarme y solo en ese momento me doy cuenta de que sigo en mi forma lobuna. El viento mece mi pelaje con suavidad y un frío eriza mi piel por debajo. Comienzo a tomar conciencia del mundo a mi alrededor, estoy en un lugar lleno de nieve blanca, como la de mis sueños con Tala. Enseguida escucho la voz gutural de los lobos que me habían capturado, y entonces recuerdo que Karine venía conmigo. Me levanto con dificultad, las patas me duelen como si me las hubieran roto, ella sigue a mi lado, inconsciente, pero, por algún milagro, todavía respira.—¡Quieta ahí, loba! —advierte uno de ellos, me empuja contra los barrotes de la jaula haciéndome caer.No puedo evitar aullar de dolor, la sensación
CAPÍTULO 55: LA VERDAD DE MI PASADOGaia¿Por qué el Rey Stefano conoce el nombre de mi madre?Me pongo de pie con dificultad. Mis huesos han sanado, pero todavía estoy adolorida. Me acerco lentamente a los barrotes de la celda que nos separan mientras él no deja de mirarme atónito. —No… no puedes ser ella —susurra. —¿Majestad? —pregunta Draven—, ¿conoce a esta loba? —Sáquenla de ahí ahora mismo, necesito verla en la luz. Los hombres abren la celda y me llevan de los brazos de nuevo hacia afuera. Mis ojos ya se habían acostumbrado a la oscuridad, así que los cierro involuntariamente cuando la luz del día vuelve a pegar en mi rostro. Me conducen hasta una especie de habitación, allí me dejan de pie solo cubierta con esa manta y todas las miradas sobre mí.Siento con más intensidad al Rey rodeándome, evaluando cada parte de mí como si yo fuese un fantasma.—¿Cuál es tu nombre? —pregunta.Me quedo callada, mis ojos se clavan en los suyos, ¿será que sabe quién soy? —¿No escuchaste? T
CAPÍTULO 56: UN MUNDO SIN ELLANikolaiNo hay suficientes árboles para destrozar, no hay suficientes objetos en el palacio que puedan contener mi furia y lo peor de todo es que debo disimular ante todos que no acabo de perder a la otra mitad de mi alma. Nadie sabe que Gaia seguía viva, nadie sabe que ella era mi Mate y por supuesto, nadie puede comprender el dolor que estoy sintiendo en este momento.Maheegan no para de aullar todas las noches sufriendo la pérdida que nos aqueja a ambos. Lo di todo por sentado, estaba tan seguro de que tendría a Gaia para siempre cerca de mí y bajo ese pensamiento egoísta pensé que no la perdería jamás.Ahora sé que me equivoqué, sé que nunca debí dejarla sola en esa cabaña… pero ya es muy tarde para lamentarse, ella se ha ido, mi cachorro se ha ido y yo he quedado vacío por dentro.—Nikolai.Parisa aparece en el claro del bosque donde me encuentro. La luna llena es la única luz que alumbra el bosque en este momento. Su silueta se encuentra a contralu
CAPÍTULO 57: CUMPLIENDO EL PACTO DE LA BRUJAParisaCamino de un lado a otro, llena de preocupación. Mi plan salió a la perfección o al menos eso pensé hasta que Nikolai dijo que no había encontrado cuerpos en la cabaña y que estaba destruida. Tiene que haber una explicación, por supuesto, pero ninguna tiene sentido y cada cosa que se me ocurre me hunde más en la desesperación. —¿Y si Gaia sobrevivió? —cuestiono en voz alta. Wise es la única que está aquí para escucharme.—Eso no es posible, mi señora. El veneno con acónito es infalible para matar lobos, lo investigué muy bien.—¿Y entonces dónde estaban sus cuerpos? Porque sé bien que yo no los busqué. Además, la cabaña estaba destruida…—Quizá cuando ella murió la protección se fue y de verdad los lobos de Sunwood las encontraron.—¿Para qué destruirían una cabaña abandonada? Y más aún, ¿para qué se llevarían sus cuerpos? —No lo sé, mi señora, pero yo no creo que ellas estén vivas, si fuese así, ya Gaia estaría aquí cortando su…
CAPÍTULO 58: LA LEGÍTIMA HEREDERAGaiaEl Rey Stefano manda a traer ropa para mí, sus Omegas llegan con bandejas de comida y pone una habitación inmensa a mi disposición. Todavía no ha revisado mi espalda, estoy muy sucia y adolorida como para que eso ocurra.—Puedes relajarte aquí, Gaia, cuando estés lista, baja a la sala de descanso —dice con amabilidad.—Pero antes… —le detengo—… ¿podría saber cómo está Karine? Ella me salvó, fue la única amiga que tuve en Stormwolf.—Enviaré a mis lobos a averiguar por ella.Asiento haciéndole una reverencia al Rey Stefano. Después de eso se retira y me quedo sola en ese bello e inmenso lugar.Me dejo caer en la cama, mis músculos se relajan por primera vez en lo que parece una eternidad. El aroma de la comida llena la habitación y mi estómago ruge en respuesta, pero antes de atender a mi hambre, necesito asearme. Me levanto con esfuerzo y camino hacia el baño adjunto. El agua caliente es un lujo que me permito disfrutar, sintiendo cómo la sucieda
CAPÍTULO 59: MI VERDADERO DESTINOGaia—¿Legítima heredera? Yo no puedo ser una reina… —¿Por qué no, mi niña? La forma paternal en la que él me habla hace que mi corazón se caliente con una felicidad que pensé que no volvería a experimentar.—No tienes idea de todo lo que he pasado, además… mi única ambición es destruir a Nikolai —digo con los puños apretados.La sonrisa de mi padre se desdibuja, vuelve a tomar asiento y me toma de las manos para que lo acompañe. —Gaia, sé que has pasado por mucho, y quiero que sepas que estás a salvo aquí. Pero necesito entender más sobre lo que ha ocurrido en Stormwolf, y sobre Nikolai.Respiro hondo, preparándome para contarle todo lo que me ocurrió. No puedo permitirme guardar secretos si quiero su confianza y la oportunidad de salvar a mi hijo. Además, necesito desahogarme, ¿y quién mejor que mi padre para hacerlo? —Está bien, Rey Stefano. Le contaré todo.—Por favor, dime solo Stefano o padre —dice con una sonrisa cálida—, sé que para ti deb