Anabel.

La cara de mi querida suegra Gloria es todo un poema al enterarse de mi embarazo sus ojos están abiertos y perdidos en el suelo, su boca está ligeramente abierta y sus brazos caen a los lados como si pesaran una tonelada no puedo evitar que una sonrisa se forme en mi rostro.

-Hay Anabel te felicito mucho pero te dijo que soy muy joven para ser abuelo.

Dmitry me da una fuerte abrazo que corresponde con justo.

-Te felicito Anabel espero que nascan muy sanos y descuida cuando salga de su impresión te hará mil preguntas y cada una de ellas será más incómoda de que la anterior

Mi suegro me dice eso con una leve sonrisa después mira a Nikolay el cual no le sostiene la mirada.

-Nikolay podemos hablar en privado.

-Sí padre, vuelvo en unos minutos amor.

Nikolay y su padre se van a uno de los pasillos me da un poco de lastima el regaño que se llevará Nikolay pero mejor que sea el y no yo me escucho cruel pero es por el bien de mis bebés, Dmitry me da una sonrisa tonta.

-Y bien son niño