Tal vez él la había perdonado cuando ella estaba llorando en las calles tratando de restaurar las fotos que borró.

Él simplemente estaba... demasiado asustado de perderla de nuevo. Tenía miedo de que ella lo estuviera haciendo por el bebé y no lo amaba lo suficiente.

Por eso no diría que la había "perdonado" tan fácilmente. Solo esperaba que ella pudiera molestarlo y amarlo más.

...

Por la noche, Bai Tingxin reservó una habitación privada en un restaurante antiguo pero famoso en la Ciudad J. Invitó a los padres de Qin Lianyi a cenar juntos.

Mirando la cara sonriente de su hija, el Señor y la Señora Qin finalmente se sintieron aliviados.

Tenían todo tipo de malentendidos sobre Bai Tingxin, pero su hija les había explicado todo.

El Señor Qin levantó su copa y dijo: "Tingxin, te hemos malinterpretado. Has hecho mucho por Lianyi. Lianyi pudo sobrevivir gracias a ti".

Los ojos de Bai Tingxin se oscurecieron un poco. Los eventos de ese entonces eran un dolor que no podía olvidar.

"