Capítulo 22 ¡Él me pertenece!Regresaron al apartamento y Renato los recibió con su alegría acostumbrada, en cuanto a Ricardo Wash cambio su humor después de las llamadas, su cara sombría no presagiaba nada bueno, después de hacer sus llamadas, se volvió callado y pensativo, y condujo sin detenerse, al llegar solo le dijo—Descansa un poco, te veo en la cena—y se fue a su despacho donde siempre se encerraba para trabajar—Está bien, tranquilo— ¿Qué pasa? Renato, ¿Sabes algo?—Uno de los mejores hoteles de los Brown se enfrenta a unas demanda de clientes insatisfechos que dicen haber sufrido lesiones o daños a su seguridad personal, mientras se hospedaban en el hotel… eso de alguna forma va a incidir en la buena reputación de ese hotel… además ese tipo de demanda de varios clientes es costosa y perjudicial—Eso es malo, muy malo…me iré a mi habitación Renato, si puedo ayudar en algo me avisas—No te preocupes, mi jefe sabe cómo enfrentar eso...antes quiero saber… ¿Cómo les fue? —le pre
Capítulo 23 Ella salía con Ricardo WashA su llegada a la empresa, Ricardo se despidió y la dejo con su asistente, al mismo tiempo recibió una llamada del Señor Medina, y de mala gana le atendió, sabía de sobra que tenía razón en sus quejas, últimamente no había sido una buena empleada, pero con anterioridad se portó de lo mejor, hacía horas extras, tenía más de 10 clientes a la vez, y apoyaba a sus compañeros en los proyectos de publicidad física, lo que podría considerarse como sobreexplotación en un empleo como ese, a veces casi ni dormía, e incluso tenía que asistir a algún evento en representación de la empresa y ver que todo estuviera bien, en realidad merecía mas comprensión de parte de él, o bien que le permitiera explicarse.—Arabella, ya no tienes empleo, no acepto más tus excusas, ni te moleste en renunciar, estás despedida, si quieres buenas referencias, pasa una lista de todos los proyectos de marketing digital que manejas y el estado actual de los mismos y luego te larg
Capítulo 24, ¿Te has enamorado de él?—Ellos salieron Ara, que yo sepa varias veces, y nunca supe que terminaran, aunque hace tiempo no veo noticias de ellos, o que hayan asistido a algún evento juntos—Ellos salieron… esa mujer tan hermosa y distinguida salió con Ricardo Wash—Si antes de eso, ella salió muy poco con otros hombres solo sus compañeros de la novela, últimamente no los he visto en ningún evento ¿Crees que están saliendo todavía?— ¿Cómo voy a saber eso Amelia? Te dije que no me gustan las telenovelas y ahora menos—le dijo enfurecida—Noto algo raro en ti ¿Sientes algo por él? — en este punto Amelia ya se sentía bastante preocupada—No sé qué decirte, él siempre me ha atraído, incluso antes de aquella noche, pero ahora mismo no sé qué decirte—Ara, ese hombre es de alto perfil, solo sale con mujeres glamorosas no es nuestro tipo de hombres, somos mujeres sencillas, claro queremos un príncipe azul, pero de allí a tenerlo es difícil—Lo se—Ara, ¿Te has enamorado de él?—N
Capítulo 25 No tendrás que pelear por mi custodia— ¿De qué hablas?—No quiero volver, no puede obligarme—su voz apenas se escuchaba, había perdido esa animosidad que la caracterizaba—Hablemos, dime que ha pasado ¿Por qué piensas así?—Eso no importa, no quiero volver allá, quiero quedarme aquí, si me obliga puede causarle mal a los niños, debería olvidarse de nosotros, cuando sea el momento del parto le puedo avisar—Voy para allá en este momento—No es necesario, Amelia ya está dormida y yo voy a dormir, estoy muy cansada, solo quería decirle eso—Hablaremos mañana, descansa no tomes decisiones en este momento—No quiero hablar más con usted, mi vida actual no me gusta para nada, tanto estrés no le hará bien a mis hijos, hablaremos más adelante cuando nazcan los niños, le hará la prueba de paternidad y una vez que se les haga, volveremos a hablar y se hará lo que usted decida como siempre lo ha hecho—Escucha Arabella…al menos deberíamos hablar de que fue lo que paso en el trascur
Capítulo 26 Nos acostamos juntos Arabella sonrió—Renato no tienes que hacer eso y no tengo con que pagarte tu sueldo —Eso no me importa, me lo pagará el bruto del señor Wash, lo tienen que hacer por sus gemelos y si no bueno trabajare gratis, llevo muchos años trabajando con el señor Wash y gasto muy poco, tengo mucho ahorrado, más de lo que necesito, así que no te preocupes ¿Dónde está la cocina? Te traje algo de ropa y también me traje un vehículo, así que iremos adonde digas —Renato, dos cosas buenas salieron de conocer a Wash, tú y mis hijos… —Es la pura verdad Arabella, la pura verdad, dime si quieres comer algo especial —Prepara una de tus delicias, mi apetito ha mejorado —Ya verás, te prepararé algo rico, y ahorita te traigo fruta picadita, esos bebes nacerán gorditos Arabella le sonrió y Renato se fue hacia la cocina, en verdad fue grato verlo, su ánimo de pronto cambio un poco, así que se dispuso a revisar sus proyectos en línea, tenía que esforzarse más para rendir su
Capítulo 27 Voy a trabajar con élRicardo Wash vio que se abría la puerta y entro rápidamente Annie llorando, él se levantó de su silla y se colocó delante de su escritorio, detrás de Annie venía una de sus secretarias y desde la puerta le dijo—Lo siento señor Wash, no pude impedir que entrara—Está bien—Ricardo por favor, permíteme abrazarte, solo eso abrazarte, lo necesito para estar bien, sé que debo seguir adelante, pero me es difícil, solo déjame apoyarme en ti, por favor—al decir esto, Annie puso las manos alrededor de su cintura con fuerza y su cabeza en el pecho de él, este gesto de esta mujer, le recordó nuevamente a otra mujer lamentable de hace muchos años, así que él solo pudo quedarse mirándola y nada más, unos segundos más tarde reacciono con sequedad, apartándola de golpe— ¿Qué te pasa Annie? ¿Hasta cuando con lo mismo? ¿Por qué sigues haciendo esto? ¿No ves que no es normal? No vuelvas o tendré que denunciarte por acoso, y eso dañará tu imagen pública—Lo siento, Ri
Capítulo 28 Acuerdos y Desacuerdos — ¿Trabajarás con ese hombre a pesar de que me opongo? —se levantó de la silla donde estaba sentado —Ya lo hablamos quiero tomar mis propias decisiones y en estos momentos no me siento cómoda trabajando con usted, además no creo en ese empleo, ya he estado allí dos veces y no ha salido bien—su estatura resultaba imponente, así que también ella se levantó y quedo frente a él —Solo volveré a su empresa, si el señor Scott me dice que no puedo trabajar por el embarazo, si me acepta trabajaré hasta el último día antes de tener a mis niños—esto se lo dijo con los ojos llenos de ira — ¿Cuál es tu empeño en aceptar otro empleo y llevarme la contraria? —No es por llevarle la contraria, es por tomar mis propias decisiones, quiero tener la capacidad de decidir — ¿Aunque estés equivocada? — ¿Y si me equivoco qué? Tengo derecho a cometer mis propios errores —le replicó —Si por tu terquedad le pasa algo a los niños, ¿Podrás vivir con eso? —No soy la únic
Capítulo 29 Regresa a nuestro apartamento— ¿Cómo llegamos a esto? —Arabella lo siguió a la habitación—No sé decirte, al parecer estás haciendo lo que quieres, así que yo también hago lo que quiero y en estos momentos me quiero quedar—anuncio con voz firme —No se puede quedar aquí, no le parece que está muy viejo para la gracia, simplemente no se puede quedar aquí—Entonces regresa a nuestro apartamento—Arabella lo miro con extrañeza, desde cuando ese era “nuestro” apartamento—Ya le explique, por ahora me quedaré aquí, quiero calmarme un poco, pensar bien las cosas, actuamos apresurado, más bien usted actuó apresurado—se lo dijo en buen tono para demostrar que podían hablar calmadamente y llegar a un consenso, esto ya se le estaba saliendo de las manos— ¿Te reunirás mañana con ese hombre?—le pregunto en forma muy brusca.—Me reuniré con él para explicarle que estoy embarazada y necesito un empleo, eso es todo, solo quiero un empleo— !Muy bien, hazle saber que estás casada! ¿Pode