Capítulo 61 !Me las pagarás!Ricardo abrió la puerta del despacho, el niño que Pandora abandono a los 10 años, creció y se convirtió en un hombre adulto y en estos momentos era un reconocido magnate de la industria hotelera, la prensa lo catalogaba como insensible y arrogante aunque verdaderamente honesto, poseía la imagen elegante y sobria que debe tener un hombre de negocios, estando siempre atento en los pequeños detalles tanto en su apariencia como en los negocios.Pandora lo observo, reconocía que Ricardo Wash heredo la elegancia del despiadado Daniel Wash, también su físico perfecto del cual se enamoró y sus perturbadores ojos, esos ojos que en estos momentos la miraban con odio y burlaNo le importaba eso para nada, podía odiarla lo que quisiera, pero necesitaba dinero, estatus y poder, y lo iba a conseguir, ella y su hijo se lo merecían, fueron muchos años de sufrimiento, esperando una dádiva del inconmovible Guillermo Brown, fueron años de miseria hasta que huyo del lado de
Capítulo 62 Le daría una oportunidad—Mañana te darán el alta médica abuelo—le informo a su abuelo—Eso espero, o me iré yo mismo aunque sea caminando, y sin esperar esa dichosa alta médica—Renato lleva a Arabella a descansar, me quedaré esta noche con el abuelo—Así lo haré, Señor Wash— ¿Ya cenaron?—Lo hicimos—respondió Arabella, mientras hablaban Ricardo tenía sujeta a Arabella de la cintura, y con la otra mano le acariciaba las mejillas, y recostaba su cabeza en ella, esto no escapo de los ojos del abuelo Brown, en medio del desastre en que se había transformado sus vidas, esta chica se había convertido en el salvavidas de su muchacho, tenía que buscar el modo de protegerlos antes de morir, tanto a ellos como a los gemelos, no permitiría que Pandora volviera a hacerle daño—No tienes que quedarte muchacho, vete a descansar, no puedes seguir así, yo estoy bien—Ya mañana dormiré, cuando estés con nosotros — ¡Quiero ir a mi casa!—No podremos descansar si te vas a tu casa abuelo
Capítulo 63 ¡Mamá me debes una explicación! James sentía que era necesario hacerse entender por estas personas, mas allá de su orgullo y vanidad lo importante era mantener el estatus. Jacobo Ross y Emily Ross debían comprender que su mejor oportunidad de éxito consistía en apelar al sentimiento de culpa en Ricardo Wash, con el único propósito de lograr que invierta un capital considerable en los negocios de la familia, y de esa manera evitar sufrir pérdidas mayores.Jacobo Ross padecía de una cantidad industrial de orgullo y vanidad, eso no le serviría de nada a medida que siguieran los problemas de escasez de capital y disminuyan los lujos y comodidades de su amada hijaEn lo que respecta a Emily, ella solo derrochaba el dinero en la compra de objetos de lujo, prenda de vestir, automóviles, adquisición de mansiones en los sitios de veraneo, viajes superfluos, y lugares vacacionales, entre otros. Todo esto, bajo la falsa apariencia de que se esforzaba trabajando y poseía un am
Capítulo 64 Trabajaré en lo que sea necesarioPandora observó con inquietud como su querido hijo, se dirigía hacia la cocina . Stephen fue el hijo del amor, del agradecimiento que sentía por su esposo Alfonso, de un nuevo comienzo, Alfonso, ya era un hombre un poco mayor cuando se encontraron y la protegio.Lo encontró en el momento de mayor desesperación en su vida, acababa de huir del hospital, donde la habían tratado por intento de suicidio, huyo porque solo deseaba huir del terror, su miedo y desesperación y al huir lo encontró a él… su salvación.Él cuido de ella, la protegió, vivieron juntos y con el tiempo le propuso matrimonio, eran dos almas desesperadas, él era también un solitario, su ex esposa le fue infiel y lo abandono, desde ese instante pasaron muchos años para que Alfonso volviera a mirar a otra mujer.Al entrar en confianza, ella le confeso a él la tragedia vivida, y en ese entonces lloraba mucho cada vez que recordaba su vida pasaba, él la consoló, la guio con amor,
Capítulo 65 Ricardo lo observo sorprendido, por un momento se conmovió, pero solo por un momento, no deseaba nada que viniera de Pandora o estuviera cerca de ella. El solo verlo allí, le provocaba un gran dolor en el alma, era su hijo, el hijo que mantuvo a su lado, el que cuido, el hijo elegido. No quiso seguir pensando en eso, esa idea lo atormentaba. Escucho tocar a la puerta —Señor lo busca la señorita Ross— Pensó «¿Otra vez ella?»— —¿Tiene cita? —Humm, no señor Wash —Bueno, hágala pasar —Buenas tardes, Ricardo—camino lentamente como si llevara el mundo a sus espalda —Hola Emily, por favor siéntate—la observo con pesar, su actitud fue muy diferente a la última vez, pensaba que ya no la vería más y en verdad le gustaría que así fuese —He venido a disculparme, me avergüenzo de mi actitud de la última vez, lo lamento Ricardo—comenzó a llorar compungida—no cometió el error de sentarse, se quedó parada cerca de la puerta del despacho que ya había cerrado la secretaria — No sé q
Capítulo 66 ¡Quiero conocer al otro muchacho!—No odies a Henri, es mi trabajo—Tenemos que hablar sobre la compra de una casa —Me gusta aquí, es grande y además íntimo, solo necesitamos a Renato—En la nueva casa, podrías tener un invernadero con muchas plantas exóticas como el del abuelo—Eso me podría convencer—le dijo mientras se levantaba completamente desnuda dejando expuesto su cuerpo y su vientre ya crecido mientras se iba corriendo rápido al baño, eso no basto, él la siguió al baño—Epa ¿Qué haces aquí?—Si haces esa pregunta es porque eres muy inocente, somos una pareja, debemos compartir el baño—. A través de la puerta cerrada solo se escucharon muchas palabras susurradas, las protestas de Arabella porque llegaría tarde, y sonido de besos y algo más…Un poco mas tarde y durante el desayuno, el abuelo Brown, pensó que ya era tiempo de informarle a su nieto lo que venía pensando— ¡Quiero conocer al otro muchacho!— ¿Por qué?—le pregunto Ricardo mal encarado—Porque sí, por
Capítulo 67 Una disculpa, una amenaza o una advertenciaLos tres hombres vestidos de traje se quedaron en el salón, ninguno sabía por dónde comenzar, no lejos de allí en la puerta de la cocina tanto Renato como Arabella, se quedaron escuchando. El grupo de tres hombres ya llevaban más de 10 minutos sin decir nada, Arabella y Renato se hacían señas con las manos y hablaban con un tono de voz bajito — ¿Cuándo comenzarán a hablar? —pregunto Arabella—No tengo la menor idea—, le respondió Renato— ¿No tienen nada de qué hablar? —murmuró ella.—Quizás tienen mucho y no saben por dónde comenzar, silencio el abuelo Brown hizo una preguntaStephen escuchó la pregunta del abuelo, parecía intimidado, y respiro con calma— ¿Mi trabajo? Me va bien, estoy aprendiendo muchoNuevamente, privo el silencio, hasta que el abuelo volvió a preguntar— ¿Tienes algo que preguntarme?— ¿Cómo está su salud, abuelo?—He estado bien—de pronto llego Renato con café y té —esperaron que colocara las jarras y mient
Capítulo 68 ¡Solo son negocios! Arabella entró con Renato al vestíbulo del apartamento luego pasó al baño que había cerca para dejar el paraguas húmedo, ya que había estado lloviendo, secarse los brazos y peinarse un poco.Una preocupación rondaba por su mente desde que Emily Ross fue a la empresa a hablar con ella, en verdad le gustaría mucho que todas esas mujeres, la dejaran en paz, hoy más que nunca le hacía mucha falta Amelia, pero ella vivía ocupada, cada vez que la llamaba ponía una excusa y no se atrevía a llegar de repente al apartamento de ella, temía encontrar allí a ese hombre, su jefeAl ver al abuelo sentado en el sofá de la sala leyendo, trato de escabullirse sin que él se diera cuenta, pero fue demasiado tarde ya la había visto.—Yo… —intentó sonreír—Buenas tardes, Señor Brown, estoy un poco cansada, me voy al dormitorio, buenas noches— ¡Alto allí! ¿No piensa cenar?—Saldré dentro de un rato y comeré algo—Ustedes me invitaron a venir aquí, así que no me dejaran solo