El Beta Kai fue muy atento, junto a los otros me llevó a un estudio que contenía las máquinas más modernas para entrenar, eran impresionante los estantes de armas.
-Toma Alana, este será tu teléfono, localizador y las tarjetas de crédito.
-Porque necesitaría esto… _lo mira confundida, sin dejar de ver las tarjetas negras sobre mi mano.
-como Beta necesitas estar preparada para todo, eres la mano derecha del alfa… tu deber es proteger a todos los humanos y miembros de la manada Jade.
Las acepté con recelo, no quería discutir en mi primer día y menos con mi simpático jefe. No sé en qué tipo de manicomio estoy, pero me siento aliviada que el alfa no esté ahí, aunque se me hace un nudo en el es
Ser parte del escuadrón Elite no será fácil para Alana y menos para el Alfa Isaac que lucha por darle sus atenciones pero ella lo rechaza.
Dentro del bosque se sentía bien correr libremente, los otros pasaban entre los árboles sin dificultad, mi hermana iba al mando... La adrenalina comenzó a subir por mis venas desde los pies hasta la cabeza, se sentía bien, quería más de esa sensación... deseaba liberar mi loba.Percibo a mi hermana colocarse a mi lado, con su ceño fruncido me obliga a detenerme, pero estoy tan excitada de emoción que solo me río y continuó corriendo, mi loba agudizaba más sus sentidos.Las dos corremos a la par hasta llegar al río, donde nos detenemos derrapando sobre las piedras que se levantan con una nube polvo.—estás loca... Alana... En qué estabas pensando. _ me grita Misi con
Cuando el cierra después de pocas palabras, pero no me preocupo porque Kai es un lobo encantador, no anda con muchos rodeó. No tardó mucho en llegar, él estaba junto al alfa en la entrada, su semblante cambió en cuanto me vio llegar. El alfa tenía una cara no sé si era de desprecio o enfado... Pero estaba segura que yo era la razón de su malestar. Bajo del auto y me acercó, una vez frente a ellos me petrifico... Kai era una brisa fresca para mí, pero el alfa Isaac es un soplete que calienta mi sangre... Ambos me miran y más el alfa como si esperara algo... si piensa que le daré las gracias se equivoca, nadie lo mandó estar ahí. —Alana, no seas irrespetuosa y saluda al alfa. -Kai me hace el llamado de atención, odio el hecho de tener que inclinarme siempre al verlo. Recibo una llamada del Beta Kai, lo único que me distrae de esta amargura es su voz,Cuelgo observando el horizonte, ese Alfa Isaac se vuelve tan detestable para mí... Aprieto el celular para calmar las inmensas ganas que tengo de mandar todo al carajo.Con paso firme caminó hasta llegar a mi auto, pateó la llanta, después reviso a mi alrededor que nadie haya visto mi rabieta. Cuando Kai me dice que me retiré, jamás me iba a imaginar que ese idiota me dejara ahí sola, no tiene ningún respeto con las personas.De a milagro puedo concentrarme en la calle, quiero gritarle sus verdades a la cara sin importar que sea el alfa.Piso el freno lo más rápidoCapítulo 15 - Mi piel desnuda
“Cuando tengas un conflicto”, me dijo mi gran amigo Bruce, “no se lo des al ego para que lo resuelva”... me siento extraña, es como una pena que te vacía por dentro y te deja pensando en todo y en nada a la vez. –Auch!! Grito por el golpe que me di al caer en el suelo, veo a mi hermana parada justo enfrente, su carácter iracundo era imposible de ocultar. –No se cuales son tus insinuaciones con el Alfa, pero te advierto una cosa, que no permitiré que te acerques a él… tu turno de ser luna ya pasó… para que lo tengas claro, el Alfa y yo tenemos mucho en común. Se fue dejándome ver solo su espalda desde ahí en el suelo, trague fuerte, pero el amargo de sus palabras me dejaron un mal sabor… al
No permitiré que sus palabras me ofendan, tengo demasiado en mi cabeza como para prestarle atención a esa engreída. Con una leve reverencia salí de ese despacho, me sentía humillada, esa mujer con su particular elegancia desbordaba soberbia, ella y su hermano son iguales. En el área de entrenamiento estaban todos los Elite, libere todo lo malo de mi mente, en cuanto visualice la sonrisa del encantador Beta... Fui hacia él para esperar alguna orden que me sacara de ese lugar. Vi como la señora Kisha, se va con Misi, las miradas de complicidad de ellas me inquietan. Pasar la tarde con el Beta Kai, definitivamente me ayudó a calmar la tensión que tengo por todo mi cuerpo… recibir su atención es una sensación muy dulce, él me manda para la casa temprano. Quería olvidarme d
Quiero estar solo, si ella se fue con otro hombre será su problema… salgo del palacio por algo de ira… mi lobo me atraganta para dejarlo salir, pero tal vez mi hermana tenga razón y no debo ir detrás ella. No me ha dejado acercarme, pero si se va con un lobo rebelde que no logra encajar en mi manada Jade.Mi lobo me está volviendo loco, debo hacer algo… debo demostrarle que esa chica no es la indicada… mis ojos cruzan con los de Kai, al instante que dejo salir mi lobo… todo se ve claro y brillante a pesar que es de noche, mis sentidos se agudizan un cien por ciento. sin dudarlo un segundo más me adentro al bosque… en busca de Alana… Será ella quien me diga en persona que no quiere estar a mi lado.Narra Alana
Narra el Alfa IsaacRápidamente Kai se recuesta a su lado para escuchar sus latidos y con un gesto me hace saber que todo está bien…él la sube a mi lomo y corro lo más rápido que su cuerpo inconsciente me lo permite.No quiero lastimarla, ya ha tenido suficiente… en mi cabeza rueda sus palabras, como la hare entender que cuando llegue a rescatar a ese idiota, ya la bestia se lo estaba comiendo. por ahora solo quiero llegar y sanarla.todos hacen una reverencia al verme entrar a la enfermería. me ayudan a colocarla en la camilla, pero no puedo evitar sentirme incómodo al ver tantas personas alrededor de ella… mi hermana entra y se coloca a mi lado, midiendo mis reacciones.&n
Mis días de recuperación fueron muy aburridos en casa, lo único que me levantaba el ánimo era recordar la caricia del Beta más lindo de toda la manada Jade. Aparte de eso solo pensaba en marcharme lejos.Pero ver la mirada de tristeza de mi madre me hace dudar, tengo que buscar una buena razón para irme… además aquí estoy más segura de esos cazadores, a pesar que ese Alfa es un rufián.Ya me sentía mejor, han sido días de agonía con ese dolor, podía moverme sin vendajes… al bajar de mi habitación la casa estaba repleta de regalos, arreglos de flores, comida que llegaba todo los días… medicamentos y médicos que rechazaba de inmediato. solo aceptaba la visita de Beyota.