Mundo ficciónIniciar sesión
Capítulos relacionados
Capítulo 191 Todo eso se debió a su esfuerzo
Al oír eso, tanto Jonathan como Caín se rieron como si hubieran escuchado un chiste.—¡Qué interesante es la rama mayor del primer hijo! ¿Acaso están tan ansiosos que recurren a cualquier persona? En este momento, depositan la esperanza en un inútil. ¡Qué ridículo! Además de nosotros, ahora los demás también están presentes. Al menos, tengan en cuenta la dignidad de nuestro hermano mayor. Cuentan con él, ¿pero han preguntado a él? —dijo Jonathan mientras miraba a Claus, con un obvio desprecio. —Así es, tía. No puedes tratar a Claus con preferencia y a nosotros con desdén, ya que en cierto modo también somos tus sobrinos. En el futuro, te beneficiarás de la empresa. En cuanto a nuestro hermano mayor, te aconsejo que no deposites tu esperanza en él para evitar decepciones. —Las palabras de Caín contenían un poco de intención para ganar el favor de Yune.Aunque Yune era la tía de Claus, ante la actual situación de la rama mayor del primer hijo, necesitaba apoyarse en alguien más para est
Capítulo 192 Eso es solo tu imaginación
Cuando Yune terminó de hablar, toda la sala de reuniones quedó en silencio por un momento. Luego, surgieron inmediatamente voces de incredulidad. Preferían creer que estos asuntos fueron llevados a cabo por Rosalía en lugar de Claus, quien consideraban un inútil. La reacción de la rama familiar del segundo y tercer hijo fue aún más violenta, considerando que esos no eran más que los méritos que la rama del primer hijo imponía sobre Claus para que pudieran mantener el puesto de director. —Gerente Yune, si quieres mentir, tienes que considerar la realidad. Inventar cosas que no existen y engañar a todos no tienen sentido. —Así es, tía. Sé que siempre has valorado al hermano mayor, pero no es necesario que exageres tanto. Probablemente, eso es solo tu imaginación —agregó Jonathan, su cara se crispó como si estuviera reprimiendo una risa. Lo hizo a propósito para burlarse de que la rama del primer hijo no sabía hacer nada. Sus actitudes le dieron a Yune aún más escalofrío. Sonrió fríam
Capítulo 193 No era posible recuperarse
Después de terminar la conversación con Alberto, Claus comenzó a hablar directamente con otras dos multinacionales a través de video. Aunque no querían creerlo, esto era un hecho palpable, como si fuera una bofetada para aquellos que no veían a Claus con buenos ojos, especialmente el Segundo y Tercer Tío Abuelo.Cuánto más despreciaban a Claus antes, más avergonzados se sentían ahora. Los argumentos que Claus presentaba parecían estar pisoteando sus caras en el suelo. Después de que todo terminó, todos los accionistas se quedaron callados y nadie habló. No tenían la cara para decir nada, sintiéndose como payasos saltando y haciendo tonterías ante Claus, quien resultaría el verdadero jefe. Yune se levantó directamente y manifestó:—La prosperidad de nuestra empresa durante tantos años se debió a la manipulación de Claus, y no tenía nada que ver con la directora. Ahora que la directora ya está en una edad adecuada para retirarse, es la hora de que Claus vuelva a su puesto original. En
Capítulo 194 Sin fallar nunca
Yune sabía que todos tenían dudas sobre esto. No ocultó la verdad, sino que se lo confesó a todos sin rodeos:—En aquel entonces, después de que mi hermano y mi cuñada fallecieran, Claus recibió una serie de misteriosos ataques. Durante esos años, han podido recibir dividendos sin preocupación. Todo esto se debe al esfuerzo de Claus, a quien consideran como un inútil. Los accionistas se sintieron avergonzados por todas las palabras hirientes que dijeron y por todas las acciones despectivas que hicieron hacia Claus. Todos los accionistas eran avispados y se inclinaban naturalmente hacia aquellos que podrían traerles beneficios, por lo que no se opusieron a que Claus tomara el control de la empresa. Ese mismo día, Claus dirigió formalmente la empresa, pasando de la sombra a la luz. Pero Claus no tenía interés en el puesto de director. Así que asumió el puesto de presidente, convirtiéndose en el máximo ejecutivo de la empresa. Los empleados de la empresa actuaron de inmediato y le pro
Capítulo 195 ¿Cómo podía aceptar esta realidad?
Después de la Junta General de Accionistas, el Segundo y Tercer Tío Abuelo regresaron a casa del Segundo Tío Abuelo con gestos sombríos. —Hermano, ¿sus piernas son reales o falsas? —preguntó el Tercer Tío Abuelo frunciendo el ceño, aunque lo que realmente quería preguntar era si Burgos había recordado algo. —Ahora puede caminar, ¿cómo podrían ser falsas? Lo subestimé. Con su poder actual, Claus podía ocultarnos la verdad muy fácilmente. —El Segundo Tío Abuelo mostró una expresión fría. Nunca había imaginado que la rama familiar del hijo mayor tendría una carta escondida bajo la manga. Estuvo a punto de conseguir lo que siempre había querido, ¡pero se le había escapado de las manos! La rama familiar del hijo mayor tenía buena suerte. ¿Cómo era posible que siempre coincidieran las cosas de esta manera? Parecía que lo hacían para molestarlos a propósito. Pero si lo pensaba bien, era verdad que no se llevaban bien con ellos. Cuando el hermano mayor estaba vivo, les abrumaba. Después de
Capítulo 196 Era realmente odioso
Claus ya había comenzado a encargarse de los asuntos de la empresa, eliminando a los elementos corruptos en la compañía y tomando el control formalmente. Durante ese periodo, el Segundo y Tercer Tío Abuelo no habían causado problemas, sino que se habían mantenido tranquilos. Por fin, este asunto había llegado a una conclusión definitiva. Yune se sintió muy satisfecha con el resultado y dijo:—El Segundo y Tercer Tío Abuelo son prudentes. ¡Ahora nadie se atreve a hablar mal de ti!Después de haber estado reprimida durante tanto tiempo, finalmente podía respirar aliviada. Al ver la cara de frustración de esos dos viejos, Yune sintió una enorme satisfacción. Finalmente, la rama del hijo mayor tenía a alguien que podía controlar a los hermanos menores de la familia.Cuando Claus vio lo alegre que estaba Yune, también se sintió contento. Pero, no podían relajarse tan pronto. —Tía, no debemos bajar la guardia demasiado pronto. Hay quienes no se rinden tan fácilmente. La rama familiar del
Capítulo 197 No necesitaba ser tan ostentoso
Aunque el asunto sobre Claus se había revelado y estaba expuesto ante los ojos de todos, él seguía yendo a la empresa como de costumbre, tres días pescando y dos días descansando, como si no le importaran los asuntos empresariales. Pero la empresa ya estaba funcionando perfectamente y no había sufrido ningún impacto, lo que demostraba indirectamente que él había sido quien administraba la empresa antes. De lo contrario, no habría sido posible que tomara el mando tan rápidamente. Muchos accionistas vinieron a la antigua residencia de la familia Burgos para visitar a Rosalía. Pero en realidad, la mayoría de ellos albergaban la intención de adular a Claus. Antes, hablaban mal de él. Ahora, Claus tenía el control total de la empresa. Si quería vengarse de ellos, ¿no estarían perjudicándose a sí mismos?Lo que buscaban era poner a prueba la actitud de Claus. Además, querían establecer una relación amistosa con él. Como ahora Claus tenía una gran influencia, hacerse amigos de él no les tra
Capítulo 198 Realizar su deseo
Mientras tanto, Javier había utilizado todas sus conexiones en el extranjero, pero no podía encontrar al profesor Brian ni el antídoto. La situación de Rosalía permanecía en un estado de incertidumbre y Javier estaba extremadamente ansioso.Por otro lado, en el centro de investigación de Estrella, estaban avanzando más rápido que el progreso de Javier. Una vez que Estrella tenía tiempo libre, se sumergía en el centro y su asistente, Héctor, también. No era justo que el jefe estuviera trabajando mientras su personal descansaba, ¿verdad?—Jefa, ¡lo hemos conseguido! —dijo emocionado Héctor mientras salía corriendo, con voz temblorosa. Como había dedicado días y noches a la investigación, a Estrella le faltaba mucho el sueño. En este momento, estaba tumbada en el sofá para recuperar el sueño perdido. La despertó la voz de Héctor, un poco ruidoso. Normalmente, si alguien la interrumpía mientras dormía, se pondría muy enojada. Pero, al oír las palabras de Héctor, no podía permitirse el luj