Aquellas palabras bastaron para que Joseph se desmoronara.No lo entendía. Durante los últimos cinco años se habían amado, habían sido tan felices juntos.¿Entonces Ppor qué ella entonces ahora decía que se arrepentía?¿Decir que lo había amado significaba entonces que ya no lo amaba?Tan solo imaginar esa posibilidad le provocaba un dolor agudo.¡No! ¡Eso sí que no podía ser!Solo había pasado un mes… ¿cómo podía Elo haber dejado de amarlo tan rápido?Debía estar enojada. Si segurito era solo eso. Aún no lo había perdonado.Joseph dio un paso adelante, intentando tomar su mano para explicarse. Pero antes de tocarla, Natalia retrocedió, marcando distancia entre ellos.Al ver ese gesto, Joseph se sintió herido, pero se apresuró a explicar:—Nati, te aseguro que no tengo malas intenciones, solo quiero hablar contigo, explicarte todo.—Créeme por favor, siempre te he amado solo a ti. A Galilea nunca la amé de verdad.—¿Podrías perdonarme por lo que más quieras y volver conmigo? Te lo juro
Leer más