Inicio / Hombre lobo / La venganza de la omega / Capítulo 21 - Capítulo 22
Todos los capítulos de La venganza de la omega: Capítulo 21 - Capítulo 22
22 chapters
Capitulo:18 ...
SOLEDAD:Acaricio algo muy suave y escucho un ronroneo que me hace suspirar y abrir los ojos lentamente.—Buenos días, bella durmiente.Susurra esa voz grave y yo me quedo mirándolo por algunos segundos.—¿Qué está pasando Meli? ¿Por qué me siento tan extraña?Le comunico por medio de nuestro link y ella suspira muy ilusionada.—Que guapo es nuestro lobo Soledad…Ella vuelve a suspirar y el lobo frente a mí sonríe mostrando todos sus dientes.—¿Qué pasa? No me vengas que no te acuerdas de nada Soledad.Murmura y siento como un escalofrío recorre todo mi cuerpo.—¿De qué debo acordarme? E… Esto es extraño…Susurro sin despegar mis ojos de él y el lobo besa castamente mis labios.—Debemos continuar, ya nos hemos retrasado demasiado.Ossian se levanta mostrando todo su cuerpo desnudo y yo desvío la mirada con mi rostro completamente rojo.—Vaya, ahora te avergüenzas de mírame.Dice en un tono burlón mientras escucho como comienza a colocarse la ropa.Lo miro de reojo y algo en su cuello
Leer más
Capitulo:19 pequeño sol
Luego de la ducha y algo más… Salimos del lago y el lobo no deja de mirarme en todo momento.—Deja de mirarme, me pones nerviosa.—No puedo evitarlo, eres tan hermosa.Se acerca para dejar un dulce beso en mis labios mientras no aparta su rostro del mío.—Me alegra haberte encontrado Soledad.Susurra con la voz muy grave haciendo que vuelva a sentir cosas y él sonríe bajando su mirada por todo mi cuerpo.—Estás excitada con solo unas palabras… No sabía qué eres tan susceptible a mí.Tapo mi rostro con mis manos y me giro para buscar mi ropa y cubrir mi cuerpo mientras siento mi rostro completamente rojo.—Que linda eres.Escucho cómo murmura, pero yo solo me dedico a vestirme.Cuándo termino, él está sentado a medio vestir comiendo de las frutas que recolectó y yo lo acompaño, pero me siento a un poco de distancia de él.—¿Por qué tan lejos? No voy a comerte, a menos que quieras, por supuesto.Finjo que no lo escuché y comienzo a comer con la mirada fija en las frutas.—Sol…Levanto l
Leer más
Escanea el código para leer en la APP