Ella salió de la habitación y él regresó a la habitación, mirando a Olivia, que estaba con los codos apoyados en la cama y las piernas encruzadas, balanceándose en el aire a que estaba con la férula. Ella lo miraba con una mirada divertida.— ¿No te da vergüenza decirle eso? ¿No?— Ella es mi abuela. — La menor gruñó, sin alterarse — Y sexo es algo normal. ¿Por qué tendría vergüenza?— Porque, Olivia, es algo personal! sin mencionar que es una anciana...— ¿Y qué, Diego? — Ella volteó los ojos, pero se veía por su mirada, que se estaba divirtiendo de las reacciones del otro — ¿Crees que ella no sabe lo que es sexo? ¿Que nunca tuviste sexo en su vida?— ¡Olivia! — ¿Qué? — La chica se levantó, apoyándose en la silla. Diego vino a ella, para ayudarla, pero la Omega levantó una mano — Estoy bien, hombre. No soy delicada. Yo tengo aspecto de ser delicado, pero no lo soy, ¿ok? No voy a romper, Diego. — Olivia se acercó a él, tocando sus manos en su pectoral — Oh, ya me dispararon varias ve
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