Su voz era calmada, casi suave.Sin embargo, ella no deseaba verlo.Aunque sabía que tenía que enfrentarlo, al final la había arrastrado hasta allí.Su corazón martillaba en su pecho, mientras sentía el nudo formándose en su garganta, el llanto que deseaba liberarse.La picazón en su nariz, que comenzaba a hormiguear, sus manos temblorosas y como todo aquello no parecía real.El pájaro debía ser una alucinación de su mente, así como las palabras de aquel lobo.- Alice, vamos a hablar.Pidió Asher.Ella estaba todavía con la espalda apoyada contra la puerta, intentando inútilmente impedir que él entrara, si aquel lobo realmente quisiera entrar, no tendría que pedir.La puerta no estaba cerrada, y su fuerza no podía igualarse a la suya.Pero por alguna razón, estaba pidiendo su permiso para entrar, y tal vez eso fue lo que la hizo sentir segura para levantarse.Ella limpió las lágrimas que habían escapado, entonces se giró lentamente y giró la manilla.Alicia miró en los ojos azules de
Leer más