Alaya MontenegroAcariciaba su cabello mientras el estaba en la bañera, se veía muy agotado, tenía ojeras poco marcadas pero notables y su piel estaba algo pálida, me preguntó que habrá sucedido mientras estaba secuestrado solo fueron horas no entiendo porque se ve tan demacrado. Tome la esponja negra que era de su uso y la pasé por su cuello y brazos con jabón líquido de durazno, mientras la esponja recorría su cuerpo me encargaba de ver si había alguna herida, aunque ya me sentía mucho más tranquila no podía evitar sentirme algo nerviosa, quería saber que había ocurrido.—Quieres dormir?—Le pregunté.— ¿Dormirás conmigo?— Pregunto de vueltaSonreí.Claro que lo haría, solo quería estar aferrada a el, muy aferrada y sentirme segura de que el estaba bien, que estaba a salvó.— Claro que sí — Le sonreí.Deje caer agua en cuerpo para que así quitar el jabón, una vez listo lo ví sonreir y se levantó, mire su desnudez, me levanté y camine hasta donde solíamos colocar las toallas, le tendí
Leer más