Me avergüenzo de lo que dice hasta que llegamos a la empresa, pero, no puedo decirle algo al respecto, porque eso parece divertirle. Como también le divierte tocar mi pierna mientras conduce. Algo que me ruboriza y según percibo, aumenta el olor que se desprende de mi cuerpo.—Creo que las cosas van a funcionar, esposa— dice Jareth.—Sí, gracias a tu ayuda en mantener el aroma con mucha fuerza— digo con sarcasmo.—No tienes que agradecerme, me tomo en serio mi papel como tu esposo y hombre con el que te has vinculado— dice Jareth ignorando mi sarcasmo.Suspiro profundo, mientras bajamos del auto. Los flashes de las cámaras, hacen que me aturda un poco. Pero, no puedo retroceder, no cuando hay tanto en juego. Por lo que, respiro profundo y me preparo para salir, pero, Jareth toma mi mano impidiendo que lo haga.—¿Sucede algo? — pregunto confundida.—Lo siento— dice Jareth y yo suspiro profundo.—Ya hemos hablado de esto——No, te estoy pidiendo disculpas por tomar al principio esto como

Llegamos a la tarima y no me asusto por el ruido y los flashes, porque estoy concentrada en la mirada cargada de mucho deseo de mi esposo. Se ve fuerte, grande e intimidante para todos el que este así, pero, a mí me derrite. Porque sé que puedo hacer para que esa mirada tenga la satisfacción que exige. Sonrío en complicidad porque sé que está pensando lo mismo que yo y rompo nuestro contacto visual, para mirar a los periodistas.—Entiendo porque están tan desesperados, sabemos lo que han dicho de nosotros y quiero aclarar varias cosas importantes. Primero, yo no soy una mujer violenta. Aunque Allison este embarazada y asegure que es de mi esposo, eso no debe ser motivo para que yo la ataque o alguien más— digo seria, mientras la mano de Jareth se posa en una de mis caderas, abrazándome de esa forma.—Entonces, asegura que sabía de ese embarazo fuera del matrimonio, &iq

Algo estaba pasando, lo que no comprendía era que y mucho menos, porque Jareth, el hombre más elocuente y conversador del mundo, en estos momentos estaba petrificado. No podía comprender que era lo que paralizaba a Jareth, pero, algo era seguro, estaba relacionado conmigo.—Si tienes algo que decir, adelante. Es claro que no estas conforme con mi relación con Jareth, así que, tienes exactamente dos minutos para convencerme de que él está conmigo por culpa o que guarda un secreto contigo. — Digo con firmeza. —Bueno… ¿Quieres que lo sepa? — pregunta Allison y Jareth se acerca más a mí.—Terminemos esto por hoy— pide Jareth y yo le sonrío para que las cámaras no noten lo que yo ya he notado.‘Ellos comparten un secreto’ me digo mentalmente.Intento calmar esos pensamientos alimentados por los malos comentarios de mi he

El caos que ya estaba en el salón, se hace más grande después del comentario de Allison y eso hace que su padre, la suelte con enojo, mientras los periodistas me hacen muchas preguntas a la vez.Niego al ver que Jareth no me dice algo, después de todo, me resulta ilógico que yo haya estado embarazada y que tuviera un aborto sin darme cuenta. Eso es imposible. Sé que no sé muchas cosas de mi propia especie e incluso soy despistada en muchas cosas. Pero, ¿soy así de despistada?No existe la posibilidad de que algo así haya sucedido sin que yo lo notara, no puede ser posible y es mucho menos posible que Allison sepa eso y yo no. Eso sería un secreto que no debería mantener con la madre de su hijo.—Jareth…—Mi esposo lleva sus manos a la cabeza, moviéndose de un lado al otro, la desesperación de aquella vez, vuelven a verse en sus ojos y yo retrocedo

No sé cuánto tiempo nos quedamos abrazados llorando, no sé qué pasa a nuestro alrededor, solo sé que Jareth esta destruido y que yo me estoy rompiendo a pedazos. No hay preguntas, no escucho las cámaras hacer el clic de fotografías.Solo puedo escuchar el corazón acelerado de Jareth y su llanto que se mezcla con el ruido de mis lágrimas. El dolor es evidente, tanto así que, nos separamos y seguimos llorando. Su mirada roja por tanto llorar y sus mejillas húmedas, mostraban que una cascada había salido de sus ojos ante el dolor que siente.Y no era para menos, hemos perdido nuestro hijo. Nuestro primer bebé que no tenía la culpa de mi imprudencia y desconfianza hacia Jareth, pero, que esta le había costado la vida. una que no volverá.—Estaremos bien. Duele al punto que me cuesta respirar, pero, estaremos bien, porque nos tenemos mutuamente. Ahora, vaya

Sabiendo que debemos alejarnos, nos marchamos dejando a la prensa con más preguntas que las hechas inicialmente. Por lo que, terminamos detrás del salón respirando profundo porque muchas cosas de las afuera dichas, habían sido planeadas.—Te daré espacio para procesar esto. Es cierto que esto es difícil para ti, así que, te daré espacio. Si deseas vivir lejos de tus padres, puedo darte un lugar para descansar y que después hablemos de esto— le digo y Allison asiente.—Quédate un poco en la empresa, enviaré un médico para que los revisen— dice Jareth.—¿Por qué son tan buenos conmigo? Fui mala con los dos— dice Allison.—Haber hecho cosas erróneas, no te define como una mala persona. Eres más que eso y por eso, hemos decidido darnos una oportunidad contigo. Que volvamos a empezar sin presiones o intervenciones de

Todos aplauden con fuerzas, cuando nos acercamos a ellos, muchas palabras se escuchan al unísono, pero, varias puedo identificar y son buenas. En mi pasado, no era una mujer con amigas, pero, ahora ellas me sonreían y decían cosas tan buenas de mí y de mi relación que mis ojos se nublan.Me siento querida y vaya que escuchar que alguien te quiere, es increíble. Es una forma de querer, un poco efímera, porque si algo sucedía, quizás me odiarían como lo estaban haciendo al no saber la verdad de Allison y nosotros, pero, estos breves segundos siendo bien recibida, era increíble.—¿Cómo es posible que estén aquí en tan poco tiempo y que hayan tenido tiempo incluso de hacer carteles de apoyo? — pregunto confundida.—¡Te amamos, Adhara! — grita alguien en el megáfono y yo abro mis ojos sorprendida al ver a dos personas conocidas entre

No dejo que la tentación me domine y por ello, alejó mi mirada del hombre que tanto he empezado a amar. Saber de mi aborto, me hizo entender cosas que en su momento, no comprendía. Pero, no podía olvidar que me habían ocultado algo importante. —Debiste odiarme cuando sucedió. — susurro. —Adhara…——Aun así, me cuidaste. Dijiste que mi cuerpo estaba débil y por eso, no permitías que fuera a trabajar. Hiciste tanto para que me recuperará de la pérdida, sin decirme realmente porque lo hacías, pero, eso no me ayuda a entender porque ella lo sabía y yo no. — susurro.—Pocas personas supieron ello. Mis padres, Jackson, Charlie, el doctor con su equipo médico con quien hizo el procedimiento y solo dos personas del servicio doméstico. Sé que mis padres y los chicos no serían capaces de decir alg

Debo hacerlo, por si hay un bebé en mi interior o si debo prepararme para la llegada de uno. No importa el motivo, pero, debía prepararme bien, no puedo fallar una segunda vez por cobarde o descuidada.‘Pero da mucho miedo’ me digo preocupada.—Su cuerpo parece reaccionar demasiado a las hormonas de los demás. — dice el médico.—Me he vinculado con mi esposo, eso ya no debe ser un problema. — susurro y el doctor asiente complacido.—Eso ayuda mucho, sin embargo, para confirmar, lo mejor es que se hagan todos los estudios pertinentes. — dice mi doctor y yo gimoteo.No me agrada siquiera un poco hacerme todos estos estudios. Pero, era necesario. Debía hacerlo. Por lo que, suspiro profundo.—Está bien, saque la sangre. Pero, hágalo rápido, no quiero gritar y lo haré si demora más de dos minutos. — le advierto con manos tembloros

Era evidente que no hay manera de persuadirlo, cuando disfruta mucho de eso. Por lo que, dejo que me ayude a vestir y con una camilla rota, esperamos al doctor. Sin embargo, nadie pude entrar por el olor y es por ello, que abrimos las pequeñas ventanas con el fin de que el olor no se concentre.Jareth está en el teléfono y yo miro hacia la camilla, donde no encuentro una solución para arreglar la camilla completamente aplastada por mi peso. Algo que me avergüenza mucho y por ello, solo sonrío negando.—No lo notará, tranquila. — Dice Jareth pendiente en su teléfono.—¿Qué no va a notar? — pregunto curiosa.—La camilla. — —¿Hablas de la camilla doblada en dos? — pregunto aturdida.—Sí, es justo esa. — Dice y yo trago duro.No pienso sobre eso, porque sé que tendrá acceso a eso. Por lo que, solo dejo mi mente en blanco, intentando no regañarlo por algo que es obvio. Algo que apenas entra el doctor, se queda mirando la camilla que parece haber sido moldeada de una forma sorprendente.—L