Es la primera vez que salimos del territorio juntos.El viaje es realmente largo y extenuante, casi veinte horas. Me siento cansado y extrañamente ahogado. Ella me dice que es por el mal de altura, o mal de montaña que presenta su ciudad. "3.600 metros más cerca de las estrellas" dice uno de los letreros que veo en el aeropuerto. La gente es amistosa, demasiado. Son amables y entran en confianza con mucha facilidad. Cosa a la que no estamos acostumbrados, pero ella se siente como pez en el agua.El tramo al hospital es rápido y al llegar la noto indecisa, pensativa y preocupada.No le ha hablado a su madre de nosotros y tiene dudas respecto a la reacción que pueda tener, aunque insiste en que es una mujer amable y amorosa.Pues bueno! De amable tuvo muy poco, nos insulto, juzgo y para rematar la agredió.Tuve que hacer uso de toda mi fuerza de voluntad para evitar que Máximo le arrancara la cabeza. Me sentí atado de pies y manos al ver sus lágrimas caer y el dolor que le producían s
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