NinaUn ultimátum. La palabra flotaba en el aire entre nosotros, como una nube de tormenta que amenazaba con estallar. Sentí que se me abrían los ojos y se me aceleraba el pulso. ¿Un ultimátum? ¿De Enzo, de todas las personas?"¿P-Por qué?". La palabra salió de mi boca antes de que pudiera formular mis propios pensamientos."Porque necesito saber que estás a salvo, Nina. Cuando no estoy aquí, no puedo protegerte", respondió Enzo, con los ojos clavados en los míos, intensos y escrutadores."Pero no puedo elegir, Enzo. Esta es mi casa. Y no es justo que me pidas que la abandone así", argumenté, sintiendo el peso de sus palabras."Mira, sé que no es justo. La vida no es justa", respondió, con la mandíbula rígida y la boca severa como únicas señales de la tormenta emocional que se desataba en su interior. "Pero si algo te pasa mientras estoy fuera por no haber tomado todas las precauciones, nunca me lo perdonaría"."¿Precaución? Esta es nuestra casa. ¿Y qué pasa con la escuela, mis r
Leer más