Adrien salió de ahí lleno de rabia y frustración, lo que había experimentado con Emely la noche anterior, le despertó emociones nunca antes vividas, y estaba seguro de que su cariño por ella trascendía más allá que una amistad y eso era algo que no estaba dispuesto a perder, así que al revisar que todavía le quedaban dos horas para su rueda de prensa, fue hasta la oficina, Emely ya se encontraba ahí.Irrumpió la puerta de su oficina rápidamente, Emely dio un salto por la impresión — Por favor, escúchame — le dijo— No hay nada que escuchar, sabía bien que desde que esa mujer entró aquí, sería indetenible — repuso ella apartándose de su lado— Por favor, cree en mí, no voy a casarme con ella— Eso dices ahora, pero cuando tu madre te acorrale, no tendrás escapatoria y tendrás que hacerlo, mira como ha logrado que hagas lo de hoy, pues así será también con la boda, lo va a lograr y no podrás hacer nada, pues ni modo que le digas que es un sacrificio por salvarme. Nadie podría creer eso

Adrien finalmente llegó al hotel, sintiendo que odiaba todo lo que le estaba pasando, pero esperaba que valiera la pena, observaba con preocupación la sala decorada elegantemente para la rueda de prensa que estaba a punto de comenzar. Su corazón latía con fuerza, una mezcla de nerviosismo y enojo bullía dentro de él. La relación falsa que había sido orquestada como parte de un juego mediático lo estaba desgastando emocionalmente, pero sabía que debía mantener su imagen ante el mundo. Frente a él estaba su madre, Lucrecia Victoria Leroy, con una sonrisa brillante que mostraba su satisfacción. La madre de Adrien era una experta en manipular la imagen pública de su familia, y esta situación no era diferente. Para ella, todo era parte de un plan maestro para fortalecer la reputación de la empresa y asegurar el estatus social de la familia. — Madre, desde ya te aclaro y espero no repetirlo de nuevo, no quiero que esto pase a más — dijo con la voz suave para no hacerla enojar — Aquí se ha

Adrien estaba furioso y agotado después de la farsa de la rueda de prensa. Sabía que su madre estaba jugando un juego peligroso al manipular su vida de esta manera, y no estaba dispuesto a seguir sus órdenes ciegamente. Después que se levantó de la mesa, Lucrecia lo siguió antes que pudiera salir del hotel — Adrien, necesitas entender que esto es lo mejor para la empresa, para nuestra familia y para ti. Valeria es una mujer excelente, y casarte con ella asegurará nuestra posición en la sociedad y el éxito continuado de New Madison —insistió Lucrecia, manteniendo su tono autoritario, mientras lo janoleaba del brazo — ¡Madre, basta! No pienso casarme con Valeria solo para satisfacer tus ambiciones y planes. Esta es mi vida, y no permitiré que me la manejes como si fuera una pieza en tu ajedrez empresarial —replicó Adrien con firmeza. — Adrien, no seas tan impulsivo. Tu padre siempre quiso lo mejor para ti, y Valeria es una elección lógica. Con su conexión con la industria de la moda y

— Adrien, he visto la rueda de prensa, ha sido noticia nacional, pero hay algo que me preocupa y debo comunicártelo, son demasiadas incongruencias entre la vida de la Valeria que sé que existe con esta que has presentado como tu novia, esto me tiene muy confundida, considero que es de urgencia que nos reunamos. Hay algo sobre la hija de Jean Paul, que debes saber, si vine a este país fue en busca de la verdad y tú puedes ayudarme — citaba el mensajeAdrien sintió que la mano le temblaba, pero sobre todo que esa información era valiosa en su investigación— Ahora no; el show mediático de esta rueda de prensa fue muy abrumador, y no puedo atenderte hoy, quizá mañana nos reunamos, puedes venir a la oficina en cualquier momento — respondió Adrien, y dejó caer el teléfono sobre el escritorio, pensando únicamente en las últimas palabras dichas por Emely, lo que menos quería es que ella se marchara de su lado, sabía que no podría soportarlo, pero ella había hablado con determinación.Renata

Adrien se quedó perplejo ante las palabras de Renata. La grabadora de su celular registraba cada palabra de la conversación, y su mente trabajaba a toda velocidad para procesar lo que estaba escuchando, entonces si la Valeria que Renata conocía no era la misma con la que él estaba tratando, quién podía ser esa modelo famosa que le había hecho tanto daño a Emely y bajo qué motivo. — Renata, ¿estás segura de lo que estás diciendo? —preguntó Adrien con una mezcla de incredulidad y preocupación. La información que acababa de recibir era abrumadora y podía cambiar por completo la vida de Emely Renata asintió con determinación y se quitó las gafas para mirar a Adrien directamente a los ojos. Sus ojos estaban llenos de tristeza y sinceridad, además las lágrimas no podía ocultarse. — Estoy completamente segura, Adrien. Conocí a Jean Paul muy íntimamente durante años, y sé quién es su hija, Valeria. La mujer que está a tu lado no es ella. Tienes que investigar esto antes de tomar una decisió

Renata se quedó inmóvil sintiendo que la garganta le dolía, y cada fibra de su cuerpo se partía en dos, nunca antes se había atrevido a revelar su pasado, y hacerlo delante de un muchachito que no comprendería le generaba repulsión contra ella misma, sabía que Adrien estaba dispuesto a atacarla luego de lo dicho.— Sé que nada justifica lo que hice, que no merezco el perdón, pero debía escapar rápido, antes que el hombre del otro auto se bajara y me viera y nos reconociera,debía huir, antes que llegara la policía con Silvia, nunca pensé que Jean estaba muerto, solo me imaginé que todo aquello generaría un caos para él. Hui en ese otro auto con un desconocido, me llevaron a un hospital, me curaron la pequeña herida que me hice en la frente, me rehabilitaron, y esa misma tarde llamé a mis padres, les conté otra cosa, y me mandaron a traer a lo inmediato, me escondí en España como una rata, sufriendo amargamente leyendo las noticias, cuando afirmaban que Paul estaba muerto, pero nunca me

Adrien suspiró con frustración mientras continuaba su camino hacia casa. La llamada de su madre solo aumentaba su ansiedad, y sabía que tendría que enfrentar una discusión difícil con ella. Cuando finalmente llegó a la mansión familiar, entró a la residencia y encontró a su madre esperándolo en el elegante salón, con el celular en la mano, llena de ira.— Madre, ¿Qué pasa? ¿Por qué estás tan alterada, y me llamas así sin explicarme nada, te dije que venía manejando y no te importó dejarme en angustia, estoy cansado de estas actitudes —preguntó Adrien mientras intentaba mantener la calma.Su madre, con una expresión de disgusto en el rostro, le mostró la tablet donde se veía una serie de titulares de noticias y fotos que lo involucraban saliendo de su oficina con Renata, la diseñadora de modas de España.— Mira esto, Adrien ¿Puedes explicar por qué estabas con esa mujer? Es una vieja que te dobla la edad, estás loco, acaso, intento sacarte de un problema y te metes en otro, esto ya est

Emely miró las llamadas, pero no se atrevió a responder, Adrien por su parte no le quedó más que marcharse a casa y meterse a la cama, lleno de angustia, recordando cada momento compartido con ella, y en lo que ahora Renata había confesado, cada vez sentía que estaba más cerca de encontrar la verdad, pero los compromisos que su madre le estaba imponiendo parecían ser una piedra en el camino. Le dolió mucho imaginar cómo Emely había sufrido tanto desde que era una bebé al ser abandonada por Renata.— Perdón por lo que te ha dicho mi madre, está muy asustada por lo que ha sucedido — escribió en un mensaje como último intento para comunicarse con Emely, sin embargo, los minutos pasaron y el teléfono de Adrien permaneció en silencio. Emely no respondía a su mensaje, y la angustia de Adrien aumentaba con cada segundo que pasaba sin noticias suyas.Finalmente, después de esperar durante lo que le pareció una eternidad, Adrien decidió llamar a Emely una vez más. Sin embargo, su llamada fue d

La mirada de Silvia se tornó fría y calculadora. Respiró profundamente antes de responder — Estás hablando tonterías, Emely. No hay ninguna verdad oculta. Eres mi hija, y lo sabes muy bien. Deja de inventar historias absurdas, que tu hermana haya triunfado y tú no, eso no es culpa de nadieEmely, a pesar de su miedo, decidió mantenerse firme en su posición. Había llegado a un punto de quiebre en su vida, y ya no podía seguir siendo manipulada por Silvia.— No te creo, madre. Si realmente soy tu hija, entonces demuéstralo. Cuéntame la historia de mi vida desde el principio, desde mi nacimiento. Quiero detalles, quiero pruebas. Si eres capaz de hacerlo, te creeré, por qué me has hecho de menos siempre, me has hecho sentir como tú dices: un adefesioSilvia se sintió atrapada por la demanda de Emely. Sabía que no podía revelar la verdad detrás de la historia de ella, pero tampoco podía permitir que se fuera de su lado, pues ahi en casa la tenía bajo su merced, fuera de ella sabía que podí

Los gritos provenían de la madre de Adrien, quien había entrado en la habitación sin previo aviso y los miraba con furia. Esa mañana había llegado desde temprano a buscarlo, dado que en la prensa amarillista, las fotos de él con Renata no se habían hecho esperar y ya muchos diseñadores seguían cancelando contratos con la empresa. Emely se sobresaltó y se incorporó rápidamente, sintiendo una oleada de miedo. Adrien, por su parte, se sentó en la cama con determinación, protegiendo a Emely con su presencia. — Qué haces aquí, y por qué irrumpes mi privacidad — gritó enojado — Venía a alertarte de lo que está pasando en la prensa y con tus inversionistas, y esta golfa embaucadora en cambio de estar ya en la oficina solucionando estos problemas, atendiendo a los empresarios está aquí metida en tu cama — gritó Lucrecia con rabia. Mirándola con desprecio, Emely se sintió culpable por meter a Adrien en tantos problemas y sobre todo por no ver que ya eran las nueve de la mañana y ninguno de l