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Todos los capítulos de Jugando con fuego : Capítulo 101 - Capítulo 110
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101. Humillación en público
Dayana iba saliendo del edificio principal cuando se topó con Edgar en la entrada esperándola, se miraba muy apuesto con su camiseta ajustada roja, pantalones ajustados oscuros y tenis de bota negros; ella le había mandado un mensaje invitándolo a comer en la tarde, Edgar aceptó más que gustoso y esperanzado en poder terminar lo que habían empezado el día de ayer por la tarde, ansioso por quedar bien estaba esperando afuera a Dayana con un ramo de rosas rojas.— ¿Y eso? – Dayana pregunto mirando el ramo y después a el, fingiendo emoción.— Son para ti, la mujer más hermosa de todo el mundo, seré el mejor novio que has tenido y quién sabe quizás hasta algo más. – En el interior ella quería burlarse el, pero desidio seguirle la corriente, total su felicidad estaba a minutos de esfumarse. — Pues muchas gracias... Dayana de Escalante, no suena tan mal. El corazón de Edgar empezó a latir eufórico al escucharla, por dentro tenía toda una celebración, festejando la victoria de tener a Day
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102. Actuaciones de primera
Edgar no podía creer lo que Dayana acababa de decir, él volteo a ver al rededor, había muchas personas con los ojos y su total atención puesta sobre ellos, incluso había quienes los estaban grabando con su celular, cuando Edgar volteo a ver a Dayana nuevamente pudo notar una leve sonrisa en el rostro de ella. Una gran molesta se hizo presente en Edgar, ella quería que él se humillara frente a todos pero penso que quizás ella se sentía humillada también por lo que acababa de pasar con la otra chica dejándola ver como una tonta a quién su novio le era infiel. Bajo otras circunstancias él se negaría rotundamente y se daría la vuelta dejándola ir, pero no era el caso, no podía hacerlo, necesitaba a Dayana para conseguir su dinero y forjarse un futuro próspero además de una reputación respetable para él y su familia materna, Edgar era consiente que si la perdía a ella perdía todo, jamás tendría una oportunidad de oro como esa. Tragándose su orgullo y ego Edgar dio unos pasos hacía atrás
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103. Palabras que matan.
Leonel fue consiente de como Dayana miraba a Amanda con unas ganas de irse encima de ella y golpearla, el temió por su novia ya que su hermana enojada era un completo demonio, no era para nada fácil hacer enojar a Dayana o por lo menos lograr que ella lo expresara tan abiertamente.— Amanda ya me explico todo, ese día que estaba con Edgar en las fotos que te mandaron ellos se toparon en la calle por casualidad, Amanda se empezó a sentir mal y Edgar se ofreció a ayudarla llevándola al hospital, solo la estaba ayudando. Dayana agachó la cabeza y se llevó la mano a la frente, con sus dedos empezó a masagearla en círculos tratando de controlarse para no ir en ese momento a ahorcar a Amanda. — Yo no le dije nada a Leonel porque no quería preocuparlo, te juro que creí que quizás Edgar te lo había contado a ti, yo no sabía que tu no estabas enterada, si no te lo hubiera dicho yo misma para evitar todo este alboroto. Amanda empezó a sollozar de nuevo de una manera un tanto exagerada, se ta
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104. Manipuladora
Dayana se subió a su auto, sentía que se ahogaba con el gran nudo que estaba en su garganta, sus ojos empezaron a arder más sin embrago se contuvo de derramar una sola lágrima con todas sus fuerzas; decir que Leonel no la había herido con sus palabras era una completa mentira, Dayana se consolaba a ella misma pensando que todo eso lo dijo porque estaba enojado y la única culpable de ello era Amanda. Pensar en ella hizo que la tristeza se esfumara y fuera remplazada por enojo, apretó con fuerza el volante deseando con todas sus fuerzas que fuera el delicado y delgado cuello de Amanda, era consiente de que sus pensamientos eran algo excesivos pero esa mujer parecía pedir a gritos ser golpeada, se atrevió a retar a Dayana y no solo eso, fingió se la víctima herida además de poner a Dayana y Leonel en contra. — Atente a las consecuencias Amanda.Dayana puso en marcha su automóvil y se marchó, no dejaría que eso se quedara así se encargaría de quitarle la máscara y terminar con su teatri
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105. Con las manos en la masa
Dayana iba conduciendo con tranquilidad o por lo menos eso aparentaba ya que por dentro era un manojo de emociones revueltas, ella apretaba con fuerza el volante de su auto, fue un completo error suyo irse contra Amanda siendo conciente aquellas fotos de ella con Edgar entrando al hospital no eran lo suficientemente comprometedoras y no iban a ser suficientes para quitarle la venda de los ojos a Leonel, había metido la pata hasta el fondo ya que probablemente ahora ellos serían más cuidadosos. Fue algo precipitado y ella lo sabía pero cuando miró a Amanda y Edgar salir de aquella bodega acomodándose la ropa quedó más que confirmado para ella que había algo entre ellos, era una lástima que no tuviera pruebas de ello, si tan siquiera Leonel hubiera visto lo que ella... Al recordara su hermano se molestó aún más."No puedo creer que ese niño sea tan ciego e ingenuo" Para Dayana era una completa bajeza la manera en que Amanda lo estaba manipulando y mintiendole a Leonel, pero también l
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106. Codicia creciente
Ambos hombres se voltearon a ver con un toque de pánico en los ojos, ellos desconocían que la computadora tenía documentos demaciado importantes que los meterían en grandes problemas, aunque de igual manera de a ver tenido conocimiento de ello no hubieran dudado en aceptar el trabajo, era una buena paga... eran expertos en lo que hacían por algo Edgar los contrato pero Dayana resultó ser más astuta y calculadora; estar en la cárcel no era una opción para ellos pero tampoco lo era quedar mal con su cliente.— Si aceptamos tu oferta de igual manera tendríamos problemas con el hombre que nos contrató, él es muy poderoso.— No tanto como lo soy yo... acepten a cooperar conmigo y tendrán más dinero, su libertad además de que les ayudaré a no tener problemas con el que los contratoAmbos hombres se voltearon a ver con un toque de incertidumbre pero seguros de que la mujer frente a ellos les estaba ofreciendo algo demaciado bueno para ser cierto. — ¿Que es lo que quieres? Uno de los hombre
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107. Sonríe a la cámara
Edgar ahora estaba tan emocionado como Amanda, por esa cantidad exorbitante de dinero valía toda la pena del mundo aguantar el temperamento difícil y estresante de Dayana. — Bueno, yo ya cumplí mi parte, dame mi papel .— Amanda puso una mano sobre su cintura y la otra la extendió hacía Edgar.— ¿Cuál papel? .– Él la volteo a ver extraño, no recordaba de lo que hablaba.— ¡La prueba modificada por la que fuimos al hospital, tonto!— Aa... eso, esta en mi cajón Amanda rápidamente se fue directo a la cajonera en busca de el papel, que al encontrarlo lo metió rápido en su pantalón, aún había algo más que contarle a Edgar, que Dayana ya sabía o por lo menos sospechaba sobre ellos claro que necesitaba tener el documento en su poder entes de, no podía arriesgarse que después Edgar no quisiera dárselo.Ella ya se había enterado de lo que pasó en la salida de la escuela entre él y Dayana así que a su punto de vista Edgar ya había perdido a Dayana, pero no se lo diría abiertamente, Amanda no
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108. Noticia sorpresiva
Al día siguiente no había clases en la universidad, Dayana estaba muerta de ganas de encarar a Edgar y Amanda tenía las pruebas suficientes para desenmascararlos a ambos lo único que le daba pena de toda la situación era Leonel, sabía que iba a ser un golpe duro para él, así que Dayana decidió editar el video donde estaban Edgar y Amanda, su conversación era más que comprometedora así que no tenía caso torturar a Leonel haciéndolo ver las imágenes de la mujer que amaba entregándose a otro. Dayana encendió el televisor tenía una taza humeante de café y una pieza de pan dulce, se encargaría de lo del video después de desayunar, en cuánto encendió el televisor estaba un noticiero matutino. " La noche de ayer al rededor de las 10:45pm un hombre fue asesinado con arma de fuego al resistirse a un asalto fuera de una tienda de auto servicio, la víctima fue identificada como Raúl García no tenemos más información sobre el ni el asaltante, el acto quedó grabado por la cámara de seguridad del
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109. Verdades que matan
Dayana no podía creer lo que sus oídos acababan de escuchar, tenía que ser una broma de muy mal gusto, pero Leonel estaba completamente serio. — Que voy a ser padreLeonel se acercó a la mesita de la sala y dejó en ella la hoja blanca que llevaba en las manos, Dayana se apresuró para llegar a ella, ente la desesperación el corto camino le pareció largo, cuando tomó la hoja en sus manos empezó a leerla, sin duda en el papel estaba impreso el nombre completo de Amanda además de decir que tenía 2 semanas de embarazo. — Este papel es falso... Dayana habló segura de si misma arrojando el papel en la mesa de nuevo, era totalmente imposible que Leonel hubiera embarazado a Amanda ya que se le estaba suministrando la inyección anticonceptiva, no podía creer que Amanda se inventara todo eso e incluso consiguiera un documento falso solo para amarrar a Leonel.— No es falso Dayana, en la mañana fuimos los dos a hacer un ultrasonido, voy a tener un bebé, ¡Vaz a ser tía!En ese momento Dayana re
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110. Impactantes revelaciones
Dayana puso su mano en la cabeza de Leonel mientras el lloraba destruido, no existían palabras que pudieran calmar su dolor, ella lo sabía bien así que se limitó a ofrecerle su compañía y esperaba que atraves de esas caricias en su cabeza pudiera transmitirle algo de fuerza para afrontar el duro momento que estaba pasando. De repente Leonel se apartó de Dayana, se puso de pie y se limpió las lágrimas del rostro molesto, levantó la cara y miró al techo para después cerrar sus ojos con fuerza, el dolor se estaba empezando a mezclar con más emociones.— Dayana yo... lamento a verte tratando tan mal, no haberte escuchado, tu me lo dijiste y yo no te creí fui un idiota.– Ella se acercó a él y puso su mano sobre su hombro — Tranquilo, yo sabía que las fotos de aquella vez no eran suficiente, más sin embargo me aferre a enfrentarla cuando tenía todas las de perder en ese momento, lamento yo ponerte en esa situación que te orilló a decirme todo aquello. — ¿Desde cuándo lo sabes? ¿Como te e
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